Su único trabajo era secuestrar al molesto chico popular y quizás enseñarle una lección.
Lastima que si lo hizo pero lo que planeo le salio totalmente distinto.
Historia ganadora de los My Time Awards 2020♡
ALTO HUMOR NEGRO, PRIMER AVISO si te ofend...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Seguí esperando por años como idiota por personas que todos decían que nunca volverían por mi..."
Pelea, pelea ¡Pelea!
Con la poca fuerza que poseía movió sus brazos y piernas tratando de zafarse del agarre de esos dos hombres armados que lo sujetaban con fuerza pero no importaba que tantas veces tratara de patear, siempre era inútil hasta que cuando lo obligaron a cruzar la puerta y pensó que solo lograría debilitarse más si seguía desperdiciando energía por lo que se rindió. No ganaba nada bueno peleando y de todos modos era muy pequeño, flaco, débil y sin fuerza alguna como para plantarle cara a alguno de esos tipos. Nunca pudo, ellos se aseguraron de que no pudiera manteniéndolo débil y frágil como una flor marchita, con un toque se desharía en sus manos.
Siempre ha sido lo mismo durante los últimos 12 años. Solo quiere correr lejos de allí y ver el sol una vez más antes de morir, el hecho de que seguramente lo haya pronto era algo que ya había aceptado hace mucho durante un invierno. Hacia demasiado frio y su pequeña manta no bastaba opera protegerlo en ese gélido sótano donde apenas comía algo comestible. Por un momento pensó que moriría allí mismo pero así no fue. Incluso su único sueño se ha vuelto algo imposible porque apenas podría correr un poco antes de caer rendido sin fuerza para seguir pero quizás allí, podría ver el sol una vez más y si tenía suerte algunas nubes también. Le gustan mucho las nubes.
Ese invierno no murió ni los que siguieron.
No lo hizo, y no sabe por qué sigue vivo, si muere hoy o mañana no le importa. ¿Por qué pelea? Porque si se va al menos quiere molestar un poco a esos bastardos.
Usaba un gran camisón blanco que le llegaba a la mitad de los muslos, era lo único que lo dejaban usar además de la ropa interior, pasó su vida encerrado en una habitación y pocas veces lograba escaparse para dar una vuelta por la casa de arriba recibiendo después una paliza como castigo y muchas veces experimento lo que era tener un hueso roto. Tomaba su tiempo pero al menos llegaba algún empleado para curarlo y dejarlo inmóvil por un tiempo hasta que se recuperaba y solo se quedaba con la mirada perdida, creyendo que todo lo reflejaban sus ojos. Estaba perdido en una pequeña habitación.
Perdido.
No podía ver a nadie, solo a los guardias que le traían comida y a un gruñón profesor que se encargó de que no "se quedara estúpido por toda su vida" que le enseño muchas cosas de tantos libros en vez de ir a la escuela como los demás, pero todo siempre de mala gana y si no respondía bien a algo se ganaba un castigo.
Detestaba al hombre que lo retenía ahí con toda su alma y le encantaría asestarle un buen golpe en la cabeza con la enciclopedia más grande que tenía.
Le aburría tanto leer y siempre eran los mismos libros aburridos que trataban sobre física cuántica de lo que no entendía ni el punto final y diccionarios con palabras como ddt
