✏Cɑpítulo 2

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No tardaron mucho en llegar a la dirección guiada por Kyungsoo al conductor del vehículo. El bar en el que entraron estaba bastante vacío y en opinión de Chanyeol, oscuro también. Lo único bien iluminado por luces amarillas era la barra de tragos, el resto del lugar lo alumbraban unas luces neón azules y rojas.

Chanyeol notó a un hombre tocando el piano más allá y se sintió a gusto enseguida, el ambiente del lugar ciertamente lo acogió. Luego siguió a Kyungsoo y tomaron asiento uno frente al otro en una mesa para dos al azar. El pelinegro estaba quitándose el saco y arremangando su camisa cuando llegó un muchacho a preguntarles que iban a beber. Chanyeol pidió el trago más fuerte y Kyungsoo solo una bebida alcohólica ligera. El hombre asintió y se marchó, Chanyeol se concentró en el sujeto que tocaba el piano reconociendo la canción después de prestar atención.

Ambos estaban perdidos cada uno en su mundo hasta que el chico que tomó sus pedidos volvió y dejó lo que pidieron para consumir sobre la mesa. Chanyeol se puso a beber enseguida mientras que Kyungsoo daba un sorbo a su bebida con tranquilidad.

―Bueno, así que trabajas en el mundo del entretenimiento ―inició la conversación el pelinegro. Chanyeol lo miró y se acomodó en su lugar para responder.

―No exactamente, solo compongo canciones y eso... ―respondió quitándole importancia con un encogimiento de hombros continuando con su bebida.

―Mm-mmh, es casi lo mismo ―agregó Kyungsoo―. ¿Y solo escribes? ¿O también haces las melodías?

―Las dos cosas, soy bastante completo ―se rio de su propio chiste.

―¿Y te va bien? Ya sabes, por lo que dijo Baek ―aclaró.

Chanyeol suspiró y se terminó de beber lo de su vaso de un solo trago.

―Me va bien, tengo mucho trabajo. Lo que Baekhyun cree es que es fácil cuando no lo es. La inspiración y eso no viene de la nada. Cuando me quedo seco de ideas es imposible seguir así que estoy constantemente en modo estrés ―comentó―. Pero no lo malinterpretes, amo mi trabajo —aclaró inmediatamente tocándose el pecho.

―Comprendo ―asintió Kyungsoo―. Bueno, a mí me pasa algo parecido. Soy dueño de un restaurante en el centro de la ciudad y créeme, no es fácil manejar todo de la manera en la que te gustaría ―el pelinegro miró al hombre alto servirse más alcohol. ―Supongo que lo que te trae así es el trabajo ―señalo la botella. Chanyeol se encogió de hombros y comenzó a jugar revolviendo el líquido del vaso.

―Qué más quisiera que fuera solo eso ―murmuró distraído. Kyungsoo puso una expresión de curiosidad y Chanyeol se dio cuenta de eso por lo que enseguida comenzó a reírse como un loco―. Olvida lo que dije, creo que esto me afecto rápido ―siguió riéndose y bebiendo como un idiota.

Kyungsoo frunció el ceño y después negó con la cabeza bebiendo también.

―Bueno, no sé tú, pero yo necesitaba un trago después de esa fiesta ―declaró―. Nunca me imaginé que Sehun me pidiera ser su padrino ―confesó. Chanyeol lo observó frunciendo el ceño y preguntó:

―¿Pero no eres su mejor amigo? ―Ante la pregunta Kyungsoo asintió con la cabeza.

―Sí, pero él tiene más amigos a parte de mí, no sé, imaginaba que cuando esto sucediera le pediría a alguno de ellos que lo sea. ―Con la respuesta Chanyeol comprendió una cosa.

―Entonces, tú... ¿No tienes amigos además de él? ―Kyungsoo observó al otro y se encogió de hombros bebiendo.

―Puede sonar solitario pero mi único amigo en el mundo es Sehun. ―Chanyeol no respondió y ambos guardaron silencio un momento hasta que Kyungsoo volvió a hablar: ―¿Soy muy deprimente por eso? ―El alto miró a su acompañante quien tenía la mirada perdida en algún lugar del bar y había cuestionado sin mirarlo. Aunque el otro no lo veía, el hombre de cabellos rojos negó con la cabeza.

¿Plan Fallido? [ChanSoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora