Princesa, pido perdón por ser de pocas palabras;
Temo gritar y ensordecer tu corazón.
Perdona la ausencia de mi canto de baladas;
El elocuente que había en mí enloqueció.
Pero he de confesar que te pienso
Cuando el sol duerme.
Tu imagen no abandona mi mente,
Apenas se va vuelve volviéndome demente.
Sin pedantería te confieso que me encantas,
Como el canto que cantan sirenas,
Como el tanto que guardo en mis penas.
Y como no hechizar si eres hermosa,
Princesa preciosa,
Primera prosa que veo poema.
Añoro un día sentirte cerca,
Saberte presa del poco encanto de mis letras.
Hoy que la luna se haya despierta,
En bruma busco una figura
Que se ajuste a tu figura esbelta.
Pero veo entonces que no figuran;
Mis palabras no cantan juntas.
Solo queda pensarte hasta que amanezca.
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Poemas de melancolía
PuisiA veces la luna decide abrazarme; llora desconsolada recargada en mi hombro, mientras sus lágrimas descienden, recorriendo todo mi cuerpo, acariciando cada centímetro de él, hasta llegar por fin a morir a una hoja en blanco. Otras veces la luna me...
