Samuel
Arregle mi armario entero, tenía una sensación que no era capaz de explicar. Estaba eufórico pero tenía todavía que ir a visitar mi instituto para poder coger el horario. No quería molestar a Nadia y salí yo solo del piso, así iba conociendo la ciudad.
Era enorme esta todo lleno de edificios muy altos y la gente estaba toda amontonada en las aceras era casi imposible no chocarte con alguien.
Creo que me estaba empezando a perder por lo que procuré preguntar a la gente. Mi inglés era normal pero parecía que no m entendía. Vi a un chica morena con los ojos verdes que parecía estudiante, así que fui a preguntarla.-Excuse me, do you know where is it the University Of Columbia?- dije mientras la chica asentía con su cabeza.
-Yes, you have to go left and in the second street you go to take the right.-dijo demasiado rápido que no me enteré.
-Wait, i'm from spain and i speak inglish a few ca...- la chica me interrumpió.
-Ah habérmelo dicho.- dijo mientras se reía.- Soy de Argentina y estudio aquí.
-Menos mal ya me estaba agobiando, no entendía nada.-dije devolviéndole la sonrisa.- Soy Samuel por cierto, ¿te llamas?
-Tamara, Tamara Robles.- dijo dándome las mano.
-Tamara Robles creo que me has salvado la tarde, eres mi ángel de la guarda.-dije volviéndola a sonreír.
-Tampoco es para tanto pero si quieres te puedo acompañar a tu universidad a si no tienes que volver a preguntarle a nadie más.- dijo mientras empezaba a andar.- Ven sígueme y así te enseño la ciudad, y a la próxima no te pierdes.
Esto iba mejorando por momentos Tamara era una chica muy lista, además de buen sentido del humor, me he reído con ella mucho esta tarde.
-Muchas gracias enserio otra vez, creo que se está haciendo de noche y mi amiga estará preocupada, así que mejor me voy yendo.- iba a darle la mano.- Oye te gustaría que nos volviéramos a ver me has caído genial y nose podemos ser amigos.- dije mientras me tocaba la nuca nerviosa y sonreía.- Eres la primera persona que conozco aquí y creo que me ha tocado la lotería de que fueras tú.
-Claro, me has caído súper bien.- dijo mientras metía la mano en su bolso.- Ten acá tenés mi número de teléfono cuando sea me marcas o me escribes un mensaje.
-Será un placer.- dije cogiéndolo y dándole dos besos antes de irme.
Eran las 12 de la noche iba otra vez andando por las calles para llegar a casa que más o menos me acordaba del recorrido, pensando en como tendría que organizarme el curso cuando vi a lo lejos un Bar que estaba abarrotado de gente. Parecía muy animado y me dió la curiosidad de entrar así que eso fue lo que hice era como un sitio en con un escenario, que estaba vacío y varias personas bailaban al ritmo de la música. Me apetecía beber algo porque había estado toda la tarde andado, así que fui hacia la barra a pedir algo menos mal que me había acordado de llevar algo de dinero conmigo.
Fui hacia la barra y había una chica de espaldas en la caja registradora que parecía estar contado lo que viene siendo el dinero.
-Perdona, ¿Me puedes atender?-dije medio gritando por el escándalo de la música.
-No lo siento mi turno ya ha acabado.- dijo sin darse la vuelta, ya que seguí a lo suyo.
No sabía que hacer así que me quede esperando a que alguien apareciera ya que todos los demás estaban atendiendo las mesas. Así que volví a insistir una última vez.
-Porfavor, llevo mucho tiempo andando y solo quiero una CocaCola, podrías hacerme el favor.-
-He dicho que no te voy a atender, no es mi turno.- dijo rápidamente mientras se daba la vuelta bruscamente allí vi quien era.
-Lucrecia?, que haces aquí?-dije al reconocerla.
-Trabajo aquí Honey.- dijo con su típico acento.- La preguntas es, que haces tu aquí?
-Bueno he ido a por mi horario y me encontré a una chica y pues me acompaño a por el horario y pues después nos quedamos hablando un rato.
-Parece que ya tiene a quien sustituir por Carla.- dijo mientras sacaba su chaqueta de debajo de la barra y se la iba poniendo. La verdad ese comentario me jodio un poco ella no era quien para hablar de eso, así que se la devolví.
-Igual que tú por Guzmán.- dije mientras que le ponía una sonrisa cínica.
Ella solo se limitó a sonreír y coger su bolso. Después salió de la barra y vi que se iba a ir.
-Espera.- dije mientras la paraba cogiéndola del brazo.
-Me voy a casa, si quieres venir sígueme.
Solo asentí y la seguí antes de que saliéramos del Bar el chico de esta mañana volvió ha aparecer y se puso delante de Lucrecia.
-Entonces ya te vas bebé- dijo el tal tío ese, se notaba que estaba un poco perjudicado.
-Aparta, quiero irme a casa estoy cansada.- dijo ella intentándolo hacer a un lado.
-No quieres que la pasemos como ayer, ya sabes tu, yo...- dijo el mientras se iba acercando más a ella.
-Te ha dicho que te apartes.- dije yo poniéndome enfrente de el y dejando a Lucrecia detrás mía.
Nose porque reaccioné así, pero sentí que la estaba hostigando y ella solo quería irse.
-Este quien es tu nuevo noviecito, que rápido cambias de chicos, ya me di cuenta.
-El no es nadie igual que tú, que no eres nada ni serás nada mío, déjame salir del puto Bar o te juro que llamo a la policía y te sacan ellos de aquí a patadas.- eso último lo hizo reflexionar así que el chico se aparto y nos dejo salir a los dos.
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Corazón con Subtítulos - Lumuel
FanfictionHistorias Lumuel Samuel queda muy mal parado en España, por lo que consigue una beca para ir a la Universidad de Columbia. Es una continuación de la Tercera Temporada.