Capítulo 26

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ANDREA.

Me levanté de un salto, dispuesta a comerme el mundo por una vez en la vida. Pasé al lado de mi espejo y pude divisar en mi rostro una sonrisa que nunca antes había visto, era sábado, pero no un sábado cualquiera...¡hoy es el día en el que voy a tener mi primera cita!

Me aseé lo más silenciosamente posible, ya que Lexi seguía durmiendo y bajé las escaleras saltando de alegría y lo mejor de todo...sin tropezarme con el último escalón.

—Hoy no escalón—apunté con el dedo a la escalera—hoy es mi día.

Me balanceé en una especie de danza de la lluvia inventada por mí y me deslicé hasta la cocina para poner música aleatoria en mi móvil y hacerme el desayuno disfrutando de un buen baile.

Alguien carraspeó desde la puerta de la cocina, a lo que yo pegué un salto y poniéndome la mano en el pecho para intentar calmar las pulsaciones aceleradas de mi corazón ya que sentía que estaba a punto de salir de mi pecho. Me giré para ver a Aiden sonriendo apoyado en el marco de la puerta cruzado de brazos y con la mirada puesta en mi, cosa que hizo que un escalofrío recorriera todo mi cuerpo.

Hoy es mi día y no dejaré que nada ni nadie me agüe la fiesta.

Me acerqué a él corriendo y cogiéndole de las manos, le acerqué a la pista de baile, que era la mitad de la cocina y le obligué a dar vueltas conmigo cantando a pleno pulmón la canción de Ana Mena y Fred de Palma , "Se Iluminaba"

—Vaya, que buen despertar tenéis—dice de repente Lexi entrando en la cocina mientras se frota los ojos.

Bajo el volumen de la música y aún sin casi poder respirar de tanto bailar soy capaz de echar unas risas.

—Esta es la primera vez que algo así pasa—dice Aiden con una sonrisa mientras se gira para mirarme con el ceño fruncido.

—Debe ser por la cita—Lexi me da un codazo con una mirada pilla.

Yo automáticamente me sonrojo.

—Hay que empezar a prepararse ya—continúa diciendo Lexi.

—¿Ya?—pregunto atónita ya que se acababa de despertar y ya estaba pensando en ayudarme a prepararme para la cita con Chad.

—¡Claro! Tienes que elegir el outfit, tienes que hacerte una sesión de belleza con Lexi y lo más importante, tienes que depilarte...

Yo no entendía por qué lo decía, estamos a pleno invierno y la verdad es que hace mucho frío.

—¡Lexi, tiene 18 años!—exclama Aiden con un atisbo de asco y horror en su cara.

Y ahí fue cuando lo entendí todo. Oh Dios mío, Lexi pensaba que iba a perder la virginidad con Chad. ¡En mi primera cita con Chad!

Eso no iba a pasar, y si él quisiera yo le pararía los pies al instante. No estoy preparada todavía para dar ese paso...

—¿Y qué?—pregunta Lexi encogiéndose de hombros.

—Lexi...—dijo Aiden con tono de advertencia.

—Vale, está bien. Pero va a estar espectacularmente sexy y eso no lo vas a poder controlar.

—Como digas—contesta Aiden poniendo los ojos en blanco.

Aiden se fue a su cuarto y Lexi y yo nos fuimos a mi habitación.

—Tengo una mascarilla perfecta para estas situaciones—dice Lexi rebuscando en su maleta.

—¿Mascarilla?—pregunto con una sonrisa nerviosa con un atisbo de tristeza en la mirada.

MI NIÑERODonde viven las historias. Descúbrelo ahora