Mi Guardespalda Y Mi Señora (+18) [ SAP#1]

Capítulo 8

Espero que le guste en este capítulo narra un poco Deborah.

Voten y comenten.

Angie.

Estamos desayunando en el jardín me gusta mucho desayunar aquí en el aire fresco, estamos desayunando pan tostado de mermelada un jugo de naranja en una taza redonda fruta, tazas de café y un trozo de pastel y mi red velvet.

— cariño crees que podrías quedarte aquí sola tu madre y yo debemos ir a Italia sobre unos asuntos exteriores— negué ya extrañaba que se fueran de viaje no su hija enferma los detiene.

— claro — dije mordiendo mi red velvet.

— y dime ¿Quién te dió ese cachorro? — pregunto mi madre bebiendo su caffe Reggio.

— madre me lo regaló Nathan — susurré pero audible mi padre golpeó la mesa y me miro.

— por que ese guardespalda te da regalo además quien se cree que es — dijo mi padre con sequedad.

— papá, sólo lo es una cachorra además se llama Kala — dije mirándolo.

— me importa cómo se llama esa estúpida perra — dijo mordiendo un trozo de pastel de chocolate.

— Christopher deja que Angie cuide a su cachorra además no a tenido uno jamás ella se hará responsable — dijo mi madre mirándonos seriamente.

— si papá pero que te preocupa esa cachorra.

Ni que se lo fuera a comer.

Mi padre nunca le a gustado los animales dice que son mucha carga y pulgoso pero yo digo que son tiernos.

— está bien — dijo mirando su periodo.

Estaba sentada en la maldita silla de rueda en el desayuno con mi pierna derecha extendida, trato de agarra una manzana que está en el centro de la mesa pero no puedo me acerco más a la mesa llegó a rozar la fruta hasta que mi hermano la agarró y se la comió agarre mi red velvet y se lo lance en la cara el me miro sorprendido.

— ¡Angie pero que hiciste!— grito mi madre al ver el desastre en el césped.

— ¡El se me robó mi manzana con tanto esfuerzo que hice para agarrarla el llegó y se la comió! — grité mirando al idiota de mi hermano.

— Johs deja de burlarte de tu hermana, si — bufo mi madre mirándonos severamente.

— como en los viejos tiempos llorona — añadió mi hermano mientras cargaba a Kala.

— ¡Oye! — exclamé haciendo un puchero.

— ustedes no cambiarán enserio desde niños se hacían maldades son unos inmaduros — dijo mi padre con diversión.

Es verdad desde que era una niña mi hermano me hacía muchas maldades, me rompió mi oso panda de felpa color lila era mi único oso panda que me regaló mi padre por qué los demás juguetes eran muñecas y más muñecas. Recuerdo que ese día llore a mares por lo que me hizo mi padre lo regaño junto con mi madre, ese día estuve triste ni cosiendo lo, lo quería yo quería a mi oso panda de felpa lila.

— lo recuerdas también — dijo mientras soltaba a Kala en el jardín.

— si, eras muy grosero conmigo me rompiste mi oso panda de felpa lila era mi único regalo de papá y tu lo rompiste — dije fulminando lo con la mirada.

— pero a ti no te castigaron ni te dieron un sermón solo lloraba como una nena pequeña — dijo divertido.

— ¡Oye tenía cuatro años! — me hice la ofendida.