𝔅𝔢𝔴𝔦𝔠𝔥𝔱𝔢𝔡 𝔠𝔯𝔬𝔴𝔫𝔰 ||𝔜𝔬𝔬𝔫𝔐𝔦𝔫||

👑Capítulo 55👑

Reina abajo

Leticia caminó hacia el grupo, toda la habitación se había sumergido en susurros y murmullos inentendibles.

—más te vale que no sea un juego Leticia, esto es importante— habló el de alas bicolor.

La mujer extendió su mano.

—tengo un hechizo que hace posible proyectar recuerdos con el toque, si me permites, puedo mostrarte— por alguna razón, Jimin sentía una extraña distancia hacia la mayor, parecía distinta, diferente a como la recordaba.

Al instante los siete miembros comenzaron a susurrarle al líder, pero después de unos segundos el levantó la mano, indicandoles que se callaran, anunciando;—tomare su palabra—

Ambos adultos estrecharon sus manos, un aura oscura cubrio sus brazos hasta llenar sus cuerpos.

Pasaron unos segundos, no fue hasta que el brillo abandonó el lugar que los dos se separaron.

—como ya viste, Jimin no fue el culpable, ¿qué les parece si hacemos que los demás se vayan y hablamos de lo que vamos a hacer?— sugirió, el de las alas bicolor camino hasta su escritorio nuevamente.

—que todos abandonen la habitación, el juicio cambió su ruta— indicó, Jimin fue liberado de sus esposas, sonriente corrió hacia sus amigos que lo recibieron con una sonrisa y abrazos.

Siendo empujados por los guardias, incluidos los reyes se tuvieron que retirar, entre murmullos  ofendidos.

Y Park pudo ver como Leticia le dedicaba una última mirada sonriente.

Con un destello en sus ojos verdes.

Cuando todos estuvieron afuera, a Jimin le importó muy poco lo que pudieran decir y solo tomo la cara de su novio, plantando un beso.

Ambos se abrazaron fuertemente.

—por un segundo pensé que iba a morir— dijo en un hilo de voz que YoonGi apenas pudo escuchar, como si estuviese a punto de llorar.

—no lo íbamos a permitir—respondió Tae se acercó, tomando su hombro.

—hasta teníamos un plan por si las cosas salían mal— el de labios cuadrados le guiño un ojo.

—¡Kim SeokJin!— la voz alterada de Ariel llamó la atención de más de uno —¡aléjate de ese grupo de fenómenos asesinos, son unos enfermos!—

Lo que la pelirroja no veía, era que su visión tapaba las manos entrelazadas de su hijo y NamJoon.

El grupo de adolescentes miro a sus mayores, el pelirrojo había parecido perder cada pigmento de color en su piel.

—¡dije AHORA!—gritó, provocando que Jin apretar la mano de su novio en respuesta, no pasó mucho hasta que su madre se diera cuenta de lo que pasaba, abriendo sus ojos impactada—tu...—

—no iré a ningún lado contigo, la verdadera gente que me quiere está aquí — habló, aferrándose al brazo del príncipe del país de las maravillas.—y ya no me importa lo que digas o hagas, no te tengo miedo, no puedes usarme, ¡Ya no!—

La mujer se sumergió en la furia, caminando hacia su hijo mientras levantaba su mano, dispuesta a darle una cachetada tan fuerte que lo enviaría al piso.