𝐀𝐇𝐎𝐑𝐀 𝐒𝐎𝐘 𝐃𝐄 𝐌𝐀𝐆𝐂𝐎𝐍 ━ Old Magcon.

Capítulo 108

Dayana Monroe.

¿Saben algo romántico? Que tu novio te dedique "Birthday sex". Aunque, seamos sinceras...

Es algo que Nate haría.

Y fue el mejor sexo de mi vida.

Lamento decir que olvide que estaba embarazada por dos horas, pero ya fui al doctor y haber tenido sexo en lugar de arriesgar algo, lo mejoró de alguna manera.

So, todo cool.

Cambiando a noticias, no tan cool's

Payton, Jacob y Joey tienen que volver a casa, ya que su estadía en este tour se terminó.

O eso me dijo Bart antes de que empezará a llorar.

— Dayana, por dios santo...—habló Bart, lo mire con mis ojos llorosos—. ¿Porque lloras?

— ¡Acabas de decirme que mis hijos se irán!—grite entre sollozos—. ¿Como me pides que no lloré?

— De todas las mujeres que pudiste embarazar—le dice Cameron a Nate, lo mire mal—. ¿Tenías que embarazar a la más llorona?

Le saque mi dedo corazón a Cameron, mientras Nate me veía específicamente con una sonrisa.

— Oye, yo que iba a saber que se iba a embarazar...

— Existen los condones—hablo Hayes, mirando su celular.

Solté una carcajada, aunque aún estuviera llorando.

— Ah, ¿Si sabes que es un condón?—pregunto Sof retóricamente lo que estaba pensando. Maho se rió.

Hayes miró mal a Sof, y siguió en lo suyo.

Ellos se viven matando.

Es divertido en algunas ocasiones, en otras cansa.

Lo digo por Hayes, llega a ser cansado en muchas, muchas ocasiones.

¿En serio yo andaba con él? Que oso.

— Dayana, ellos tienen que irse a casa—me dijo Shawn, solté otro sollozo.

— Pero, ¿Porqué?

— Por que solo los compraste por 5 cuidades—respondio Taylor, sollocé

— Eh, yo no tengo problema con quedarme toda la semana—hablo Payton. Ay lo amo.

— Yo menos, estoy libre—concordo Jacob, vieron a Joey.

— Yo sí tengo que volver...—hablo, con una mueca—. Mamá irá de viaje y por alguna razón confía en mí para cuidar a Kashius.

Hice un puchero, y me aferre al pecho de Joey, quien me abrazo de vuelta.

— Lo siento pequeña.

Dejo un beso en mi cabeza y se apartó, pero yo no lo deje ir.

— Dayana, tenemos que dejarlos en su casa—dice Gilinsky, negué con la cabeza.

— Ese avión me lo compró Nate a mí...—enterre mi cabeza en el pecho de Joey—. Y no se los presto.

Cameron, Aaron, Taylor y Payton soltaron una carcajada, mientras Joey me abrazo más fuerte.

— Vamos, amor, tenemos que irnos a casa...—hablo Joey en mi oído.

— Está bien...—murmure, alejándome lentamente de Joey, quien me sonrió.

— Muy bien lil ma—felicito Nate, le sonreí—. Ahora, ¿Quieres acompañarnos?