Capítulo 22.

69 6 1
                                    

Ike hablaba sin controlar lo que decía, pero tampoco le molestaba. Aunque no era el momento para pensar en eso.

Buscaba en lo más profundo de su cabeza lo dicho por Isabela. No podía creer que no había escuchado nada. Muy mal para un mercenario.

—¿Aún buscando? —Marth se cruzó de brazos. Ike sólo sonrió torpemente— Cabeza de Dona tenías que ser. No ataques a lo bruto, y mantente siempre cerca mío que yo te protejo. Te guiaré si tan torpe eres.

—¿No sería que yo te protegería?

—¿Una gallina protegiendo a un guerrero como yo? No me hagas reír.

Ya se estaba pasando. Pero sabía cómo cambiar el rumbo de la jugada.

—¿Está segura, princesa? Su cuerpo es tan débil, que de seguro la brisa de otoño haría que salieras volando.

Vió la sonrojada y furiosa cara del príncipe. Punto para Ike. Estaba tan molesto que parecía que le salía humo por las orejas. Marth prefirió callar: cuando no le haces caso a un niño que te molesta, este se aburrirá e irá a molestar a alguien más (N/A: prueba 100% real no fake, yo lo probé y funciona:v). El mercenario notó eso y prosiguió:

—¿Qué sucede, milady? ¿Acaso dije algo que le molestara? A las princesas como usted se ven mejor con una sonrisa.

Sonreía como idiota. No recordaba la vez que había hablado tanto. Marth le pisó el pie y éste se quejó. Tenía más fuerza de la que aparentaba. En parte Ike no mentía, el de Altea iluminaba su mundo con una sonrisa.

—S-señores, no tienen por qué pelear —la princesa Zelda interrumpió su "tranquila" conversación.

—No. Me llames. Así —deletreó en un murmuro Marth.

—¿Tan ofendida estás?

Antes de que Marth le planteara un puñetazo en el ojo, Sonic habló más rápido.

—Disculpen por interrumpir su plática de recién casados, pero pronto tendremos que patear traseros.

—Nosotros no- —el príncipe no pudo terminar.

《Recién casados》. Resonó en la cabeza de del portador de Ragnell.

Vacío. {Marth x Ike}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora