Confusión... .- EMILIACO

27. Teatro

Narrador omnisciente

Hay personas que simplemente están hechas para cagarla, tratan de hacer algo bien y terminan haciendo todo lo contrario, y exactamente así era Emilio, por más que se esforzaba en hacer las cosas bien con Joaquín le salía todo lo opuesto, y la culpa no era de nadie más que de él y su estúpida boca, simplemente parecía que esta tenia vida propia y no controlaba lo que de ella salía, con tal de zafarse de las situaciones no pensaba antes de actuar, acción que le jodia mucho al rizado, su estrés se elevó al máximo con la llegada de su novia, no estaba listo para verla y mucho menos para sus escenas de celos y termino cagandola.

Ahora todo estaba hecho una mierda con Joaquín, de vuelta. No quería lastimarlo, pero sabía que lo había hecho, que siempre lo hacía y ahora tendría que remediarlo como sea.

.....

La obra ya había comenzado, automáticamente que entraron al escenario, y sintieron toda la energía de la gente los nervios se les fueron.
Vieron a sus familias y amigos al principio del escenario, y a una pequeña parte del fandom atrás de estos, gritando y riendo por las escenas que los pequeños estaban protagonizando, y fue ahí cuando se dieron cuenta del porqué estaban en ese momento ahí parados, entonces paso, cada uno dio su máximo, y por unas horas olvidaron todo, y simplemente la conexión que antes tenían, volvió.

La obra terminaba con un beso, pero estaba claro que por lo menos en esa función no se lo darían, no tenían indicaciones, así que Emilio solo se giró y tomo entre sus manos la cabeza del menor, dándole un tierno y casto beso en su frente, enloqueciendo a todo el público. Fue ahí cuando se cerró el telón y todo volvió a la normalidad.
Emilio volteo a ver a Joaquín y este simplemente asintió.
Salieron a dar las gracias y a continuar con el meet and greet que se tenía planeado para esa noche.

Los dos estaban emocionados de conocer algunos de sus fans más de cerca, muchos les daban regalos, les pedían fotos un poco incómodas para los chicos, pero disfrutaban de sus emociones y sentimientos hacia ellos.

- ¡Emilio! - grito emocionado un pequeño chico con gorra. - que emoción tenerte ya de frente. - lo abrazo a lo que el rizado correspondió aquella acción. - en verdad gracias. - dijo con nostalgia

Emilio
¿Gracias por qué?

- Porque gracias a ti es que ya no me da miedo decir quién soy, y he tomado el valor de decirle a mis padres que soy gay y sobretodo porque me enseñaste amarme tal cual soy. - Emilio en vez de tener una cara de emoción o de conmoción, parecia triste, la vida le estaba dando un pequeño recordatorio de aquel error que anteriormente había dicho, justo como Joaquín le había mencionado.

Emilio
No tienes nada que agradecer, y no soy un ejemplo a seguir. - sonrió con amargura. - he dicho muchas cosas malas a lo largo de mi vida, he lastimado gente que quiero, a costa de cosas estúpidas. Me alegro que hayas sido fuerte, y espero las cosas con tus padres hayan ido bien, de lo contrario no bajes la cabeza, siempre ve en contra del mundo antes de ir en contra de tus ideales... pero, sobre todo. -lo tomo por los hombros. - siempre debes estar orgulloso de quien eres, nunca te escondas, créeme que el armario es un lugar muy feo y oscuro, y nadie merece estar ahí.

¡CHICOS, RÁPIDO LA FOTO! - El pequeño castaño y el rizado se acomodaron a lado del pequeño chico con gorra. El fan no pudo decir nada más, ya que lo jalaron rápidamente para que el meet and greet continuara.

Emilio

Me sentía muy triste, era verdad, no solo lastime a Joaquín con una simple palabra, lastime a muchas personas que me apoyaron, lo hice a pesar de que ellos ni lo sabían. Yo lo sabía. Y con eso bastaba para sentirme con una mierda. El meet and greet había acabado, a lo que todos los del elenco nos fuimos de aquel lugar, por desgracia no supe más de Joaquín ya que María se encargó de que no me despegara de su lado.