Todo al revés

Tan cerca

(Pov Simón)

Me sentía demasiado débil, tanto que al sacarnos de la jaula ni siquiera podía zafarme, no hubo necesidad de usar nada para retenernos, Maia y yo éramos un par de costales de papas con pies, fuimos arrastrados como si de animales se tratara hasta una habitación, escuche una conversación de uno de los guardias que al parecer había olvidado por completo que tengo una muy buena audición

— Con la sangre de estos impuros por fin podremos acabar con la basura demoniaca—abrí grande los ojos, ya sabía que planeaban vaciarnos la sangre hasta quedar secos, eso era algo que Alec ya me había dicho, pero ¿qué querían decir con acabar con la basura demoniaca? Algo en mi interior decía que no se refería solo a los demonios, nosotros los subterráneos entrabamos en el circulo de basura demoniaca

— Debemos salir de aquí—me susurro Maia, al parecer también había escuchado, asentí con la cabeza pero aunque de verdad teníamos la convicción de salir de ahí, ninguno podía hacerlo, habíamos pasado una semana sin comer nada ni beber, me sorprendía que aun siguiéramos vivos, mi amiga se veía un par de kilos más delgada y sus labios partidos indicaban su deshidratación ¿cuánto vivía el humano promedio sin comida? Es más casi podía que jurar que se suponía que no se podía vivir mas de tres días sin agua

— Espero que Alec esté bien—ella asintió y fuimos arrojados al interior de la habitación, caímos al suelo uno junto al otro, apenas habíamos podido meter las manos para no ir de cara al piso

— Simón, un gusto volverte a ver—fulmine con la mirada al señor frente a nosotros que extendía sus manos como si fuera un querido amigo que hacía mucho no veía

— Ahórrate las palabras Valentine—no supe de donde saqué el valor para contestarle así, seguramente de la sabiduría que estaba por morir una segunda vez y de nuevo a manos suyas

— Que grosero, mi buena amiga Elaine estaría tan decepcionada de que fueras así de cortante con un amigo de la familia—me logue parar y trate de atacarlo solo para ser derribado con suma facilidad, estaba ahora de cara al piso con Valentine tomando mi muñeca izquierda y retorciéndola en mi espalda de una dolorosa manera

— Estoy muy seguro de que, si mi madre supiera lo que me has hecho, ella misma te diría un par de palabras altisonantes—escuche su risa tan escalofriante en mi espalda

— Oh de seguro haría mas que eso—recargó más su eso en mi cuerpo, jadee tratando de zafarme, pero era prácticamente imposible

— Suéltalo bastardo—mi amiga gruño y vi como su cuerpo empezaba a convulsionar amenazando con transformarse hasta que la dejaron inconsciente por un golpe en la nuca

— Ustedes los subterráneos siempre se dejar llevar por los instintos—se alejó de mí, suspire regresando mi brazo a una posición más cómoda, me hinque sobándome el hombro, no supe si la perdida de conocimiento de Maia era lo mejor o lo peor que podía pasar, al menos así no vería nuestro final, simplemente moriría en una paz que merecía, por otra parte estando así yo no iba a poder despedirme, nadie al que yo le importara estaría aquí en mis momentos finales y eso me dolió un poco

— Diría algo de tu raza, pero sería agredir a mi mejor amigo que para nada es como tu—lo mire y note enojo en sus ojos, me pateo por la espalda aventándome de nuevo al suelo

— Aleja a mi hijo de tu sucia boca demonio—sonreí de lado, si iba a morir en sus manos, al menos lo haría enojar un poco antes

— Alexander no es tu hijo, el decía que mi padre era más tu hijo que tú, es más recuerdo que cuando hicimos nuestro Bar Mitzvá el le dijo a mi padre que aunque sabía que te quería, o eso creía porque, diablos se supone que un hijo ama a su padre, el amaba a mi padre más de lo que jamás te pudo amar a ti—recibí otro golpe— El siempre quiso y respeto más a mi padre de lo que jamás nadie te querrá o respetará a ti en tu patética vida—se abalanzo a mí y corto mi garganta, sentí la sangre salir de mi cuerpo, lleve mis manos a ese lugar, note que en lugar de que la sangre llegara al suelo flotaba hasta una caja de cristal enorme donde ya había sangre, supe que era del brujo y la niña Seelie, ese iba a ser mi final