9. Investigación doble

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Arianne despertó al día siguiente y lo primero en lo que pensó fue en Dean. Era aún temprano, pero sabía que los heptrianos como él madrugaban mucho, así que supuso que ya estaría trabajando. Se aseó y vistió, y salió de sus estancias en busca de su amigo. Llevaba ya diez minutos deambulando por los pasillos de Násium sin encontrarle, cuando le vio entrando en el almacén privado donde Sky había estado robando la noche anterior. Se acercó sin pensárselo, puesto que vio el momento como una oportunidad perfecta, tanto para hablar con Dean, como para observar de cerca que era lo que Sky había metido en ese saco. Llamó a la puerta del almacén y la voz de Dean al otro lado contestó un "Adelante". 

-Ah, hola Ari - saludó Dean con una voz decaída.

-Escucha Dean, lamento haberte dejado solo anoche, pero lo hice por algo.

Arianne le contó a Dean lo que había visto la noche anterior en ese mismo almacén, así como la extraña conversación que había tenido con Sky previamente.

-¿Sky? ¿Estuviste hablando con Sky? - contestó Dean -. Ari, no llevo mucho tiempo siendo un heptriano, pero me han contado cosas de Sky que hacen que no me fíe mucho de él. Tiene comportamientos muy raros, en serio. Nadie sabe de dónde viene ni quién es su familia, ni siquiera los Hermanos. Mucha gente le ha visto paseando por Násium a altas horas de la madrugada, como tú anoche, y siempre está metiendo las narices en sitios donde no debe meterla. 

Arianne de pronto se sintió arrepentida de haberle contado tantas cosas sobre ella a Sky durante la entrevista que le hizo, pero se había sentido bien con él. Arianne fue a replicar a Dean cuando de reojo vio tres sustancias en las baldas que quedaban a su izquierda. Dos eran de color añil y naranja, la tercera era transparente, parecía agua.

-Dean, ¿sabes que son estos líquidos? Me parece que esto es lo que Sky se llevó anoche.

-Claro. Este de color azul - cogió el bote con la sustancia añil - es concentrado de crásmiro, un material presente en algunas hierbas medicinales que actúa como un relajante y somnífero muy potente. El naranja es simbalina, un compuesto creado machacando insectos, preferentemente libélulas. Es un ingrediente muy común en muchos brebajes.

-¿Brebajes? ¿Qué brebajes? - preguntó Arianne.

-Los heptrianos saben hacer algunos brebajes que nos confieren poderes extra, pero algunas de estas pociones son difíciles de hacer.

-¡No me digas! ¿Y tú has probado o hecho alguna?

-Sí, hace cuatro días hice un brebaje que servía para poder traspasar paredes. De hecho, ese brebaje llevaba simbalina. No fue perfecto, puesto que el efecto solo duró unas dos horas, y un buen brebaje puede darte poderes durante tres días, pero estoy aprendiendo. En la biblioteca hay un montón de libros que son de gran utilidad, y es una tarea que me divierte mucho.

-¡Es que tiene que ser genial! Algún día quiero que me enseñes. De vuelta a los líquidos, ¿sabes qué es este de aquí, el transparente?

-En efecto, tengo aprendido que esta sustancia hay que tratarla con cuidado. Es lermakium. Un material que crean los mismísimos Hermanos, nadie más tiene la receta. Es extremadamente corrosivo, y lo sé por experiencia.

Dean pidió a Arianne que cerrara la puerta del almacén y se quitó la ropa de cintura para arriba. Arianne se puso un poco roja, pero se contuvo cuando vio una quemadura en el abdomen de Dean, a la altura del ombligo. 

-Mira Ari, esto me lo hicieron dos gotas de lermakium que cayeron sin querer en mi ropa. La camiseta la tuve que tirar, obviamente. Doy gracias porque solo fueron dos gotas, sino a lo mejor mi cuerpo entero era una quemadura. Me gustaría saber para que querría Sky crásmiro, simbalina y lermakium. 

Arianne dio las gracias a Dean por la información y le dejo seguir trabajando. Fue entonces cuando se encaminó a la biblioteca, ya que el objetivo que tenía ese día era uno: saber más de Stafford Lung. Investigó por los enormes pasillos de la biblioteca de Násium, buscando algún libro que contuviera información acerca de Stafford. Pero la cantidad de manuscritos era inmensa y Arianne no daba abasto. Fue cuando llevaba ya tres horas de búsqueda en vano cuando avistó un libro que se llamaba Tártarum. Recordó entonces su primera reunión con los Hermanos, cuando la explicaron que el alma de Stafford Lung fue expulsada a un lugar llamado Tártarum cuando murió. Arianne cogió el libro, extremadamente pesado, y se sentó en una mesa. El libro explicaba el Tártarum de la siguiente manera:

"El nombre Tártarum proviene del concepto de Tártaro de la mitología griega. El Tártaro era un abismo usado como mazmorra y prisión para los titanes, situado bajo el inframundo. 

Nadie sabe a ciencia cierta quién creó el Tartárum o cómo es, puesto que allí solo han entrado almas corrompidas cuyos portadores en la Tierra fueron personas malvadas. Nunca un alma que ha entrado en el Tártarum ha salido de él, pero hay una posibilidad para un alma encerrada de escapar de allí. Si alguien en el Tártarum reúne el suficiente poder y apoyo de las horrendas criaturas que hay allí, podrá abrir una brecha entre su mundo y el nuestro. 

A pesar de que ninguna persona viva ha logrado entrar, estudios de la Antiquísima Orden han estimado una zona geográfica donde es más posible que se forme la brecha que una Tártarum y mundo humano. Esta zona se halla en algún lugar cerca del valle del río Jordán. No se sabe si esa localización es la más probable a presentar la brecha por ser el punto con menor altitud de la Tierra, o si esto es una mera casualidad. Los estudios realizados por la Orden, especialmente por los Hermanos Radix y Sensum, son de una extrema dificultad, pero no son herrados, y todos llevan a dicho lugar en Oriente Medio.

Tampoco podemos saber si alguien que habita en el mundo humano, ya sea buena persona o tenga el alma corrompida, puede entrar en el Tártarum sin morir. Lo que está claro es que debería tener una enorme capacidad en su interior, pero abrir una grieta entre nuestro hogar y el Tártarum parece (a fecha 1988, fecha de escritura de este libro) imposible."

Arianne continuó leyendo un rato más, pero el libro no le aportó mucha información fiable puesto que, como el propio libro decía, nadie conocía con seguridad algún dato sobre el Tártarum. La Nigromante se levantó y se dirigió a dejar el libro en su correspondiente estantería cuando Sky apareció a su lado de repente. Arianne gritó por el susto, no se esperaba encontrarse a nadie. Por suerte, en la biblioteca solo estaban ellos dos y su grito no molestó a nadie. Se agachó a coger el libro, que se le había caído, y lo dejo en una mesa.

-Lamento haberla asustado, Nigromante. He venido a buscar unos libros que me ha pedido una amiga heptriana y la he visto desde lejos. Solo venía a saludarla.

-No te preocupes Sky, no pasa nada - contestó Arianne. 

Arianne fue a colocar Tártarum cuando Sky cogió el libro.

-¿Tártarum? ¿Eso es ese lugar donde van los que mueren no?

-Sí, estaba buscando unos libros sobre los poderes de Motum y me ha entrado la curiosidad al ver el título, pero no es más que una sarta de datos sin fundamento - mintió Arianne. 

Sky miró a Arianne a los ojos con un gesto que decía que no estaba creyendo las palabras de la Nigromante, pero había algo más oculto en su semblante, algo que Arianne no supo interpretar.

-Ya, supongo que es difícil saber algo de un lugar así - replicó Sky.

-Yo pienso lo mismo. Bueno Sky, lamento tener que dejarte, pero debo hacerle unas consultas al Hermano Motum - mintió Arianne de nuevo.

-Siempre es un placer hablar con usted, Nigromante, que tenga un buen día.

Arianne pasó delante de Sky y se encaminó hacia la puerta de la biblioteca, no sin darse cuenta de que el misterioso chico no la quitó el ojo de encima hasta que desapareció de su vista.

La NigromanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora