Entre los colmillos de los Bartholy VII: En el corazón de las tinieblas

Capítulo 11 - Rastreo

NARRA DANTE

Ella se va junto a su familia, nuestros hijos y Edward a la sala de juntas, supongo que para hacer el barrido mental. Yo me acerco a Casandra y le ofrezco una habitación para que esté aquí para mañana, lo cual me agradece. Una vez se van yendo todos, sólo quedamos los de su confianza junto a los Bartholy.

_Adam, acomoda a Casandra en una habitación.

_Rey Dante, me gustaría quedarme aquí si no es mucha molestia, me gustaría poder hablar con la Luna cuando ella considere oportuno _dice Jack.

_Claro, Adam te mostrará dónde quedarte.

Yo por mi parte, voy con Erik y Lucas para darle una lección a James.

NARRA HELENA

_Cariño, ¿estás bien?

_Si mamá. Sólo os llamaba porque voy a hacer un barrido de este mundo y del inframundo, y voy a necesitar conectarme a vosotros.

_ ¿Sabes a quién buscar enana?

_Claro, Uriel me ha pasado un informe de todos los que han escapado, o al menos cree que todos.

Yo me conecto a ellos, pero sólo a la mitad para hacer un barrido mental por la tierra. Antes de nada, empiezo a buscar por la tierra. Encuentro a dos de los demonios, tras barrer durante algunas horas.

_Azazel, te daré las instrucciones de dónde se encuentran dos de los demonios, ya sabes que hacer. Uno de ellos es bastante poderoso, llévate a Dante y a alguna bruja junto a algunos hombres.

_Enseguida mi reina.

_Helena, te ves cansada, ¿quieres descansar? _me dice Alba.

_Tranquila, estoy bien. Ahora realizaré la búsqueda en el inframundo. Diana, Ares, Edward, vosotros podéis ir a descansar. Mirad si vuestro padre necesita ayuda con algo.

_Claro mamá.

Yo me quedo sola con mis hermanos y con mamá. Respiro un poco, y me pongo a realizar la búsqueda por el inframundo. Tras otras horas, doy con varios demonios. Esta vez con ocho, y van a necesitar ayuda, por lo que aviso al consejo de demonios y lo dejo en sus manos. Pido que todos queden en las celdas y que las brujas refuercen los hechizos en función de sus cualidades.

_Iros a descansar, hoy entrenaremos por la tarde _ya que son las 6 de la mañana.

_Helena, necesitamos que nos cuentes qué pasó la otra vez _dice mamá.

_Mamá... Es algo que me da vergüenza recordar...

_Estás con la familia Helena, no diremos nada, te lo prometo _me dice Alba.

_Está bien...

Yo le cuento todo lo que pasó, lo que nos hicieron con detalle, y lo que yo les hice a ellos luego, que Dante los mando al tártaro y que ahora están libres.

_Cariño...

Mamá me abraza y yo me pongo a llorar sin remedio. Me desahogo junto a mi madre y mis hermanos, y siento que me he quitado un peso de encima. Al rato llaman a la puerta. Yo me levanto, seco mis lágrimas y miro quién es.

_Luna, todos están apresados.

_Estupendo Adam. Vosotros descansad, y los que habéis estado de caza también.

_ ¿Tú también descansarás enana? _pregunta Eneas.

_Claro, no te preocupes.

_Luna, una cosa más, Jack está esperando para hablar contigo, no ha querido acostarse y ha venido de caza. Dice que no se acostará hasta que no hable contigo.

_Está bien, id a descansad, y dile que venga, lo esperaré aquí.

_Mi reina, Lucifer está aquí como pidió.

_Está bien, dile que descanse un rato, más tarde lo veré con Casandra y el otro demonio.

_Como desee.

Yo espero que llegue Jack, el cual entra enseguida y viene a abrazarme. Yo me sorprendo por su acción, ya que antes no ha hecho nada así. Yo lo miro y él se pone a hablar.

_Siento mucho todo lo que está pasando Luna, el traidor de James no merecía perdón. Puede contar conmigo para lo que desee. Yo estoy aquí para usted.

Yo me abrazo y no puedo evitar derrumbarme, acabo de recordar todo lo que me hicieron esos malditos, todo lo que está pasando y lo furiosa que me hace sentir el idiota de James. Jack no dice nada y sólo me deja entre sus brazos. Cuando me desahogo un poco seco mis lágrimas y recupero mi compostura.

_Jack, ve a descansar.

_No Luna, quiero ir con usted y ayudarla.

_Como quieras. Y trátame de tu.

Yo me dirijo a los calabozos y están allí los demonios del consejo juntos a los míos esperando mi llegada. Sabían perfectamente que yo vendría.

_Os dije que se fueran a descansar.

_Queremos estar contigo, mi reina _dice Agramón.

_No te dejaremos sola mi amor _me dice Dante.

_Gracias a todos. ¿Los han hecho hablar? _pregunto mientras los escruto con la mirada.

_Si mi reina, estos 4 que están a parte dicen querer unirse a ti, esos 5 dicen que están de parte de Nix y que no tenemos nada que hacer contra ella, no quieren hablar. Y aparte tenemos a uno del que creo se querrá encargar personalmente _dice Astaroth señalando una celda alejada.

_Gracias a todos de nuevo. Azazel, prepara las torturas para esos 5, cuando creas que no dirán nada más, Dante o yo revisaremos si es así, mientras divertíos.

Yo me dirijo a la celda del final y veo lo que menos me apetecía ver, a uno de los demonios de Mefistófeles. Mi corazón da un vuelvo y el asco me invade. Él sonríe al verme, pero yo no muestro flaqueza alguno. Dante y Jack están a mi lado.

_Vaya, que honor, la reina en persona visitándome. ¿Quieres que te haga pasar un buen rato?

_No voy a perder el tiempo.

Yo entro en su mente mientras hago que se retuerza de dolor. Sus gritos se pueden oír por todo el calabozo, sonido de ambiente para el resto... Saco toda la información mientras se la muestro a Dante. Una vez ya lo he visto todo, creo una luz blanca y se la lanzo, haciendo que tanto su cuerpo como espíritu desaparezcan para siempre.

_Éste no podrá volver de nuevo _dice Dante.

Yo vomito a un lado y Dante viene enseguida a sujetarme y aguantarme el pelo. Yo me levanto poco a poco y cierro los ojos un momento.

_Amor, ¿me puedes traer agua?

_Enseguida, quédate con ella Jack.

Jack me sujeta entre sus brazos y yo dejo mi cabeza apoyada en su pecho. Dante llega con el agua y la bebo de un tirón. Cojo una amplia respiración, y suelto el aire poco a poco por mi boca. Abro los ojos decidida.

_Vamos a por los otros 5.