Entre los colmillos de los Bartholy VII: En el corazón de las tinieblas

Capítulo 32 - Lunas

Los alphas se van con los demonios y quedamos nosotros. Dante no se ha separado de nosotros, aunque no ha intervenido en nada, pero siento su apoyo. Ya quedamos sólo la familia.

_Deben alimentarse bien para esta noche, y deberían hacer una reunión con sus alphas, para planear puntos de encuentro, si necesitan portales y demás. Recuerden que estamos en guerra con una diosa loca y traicionera. Deben tener hasta el más mínimo detalle cubierto. Organícense como crean oportuno, y cuando lo tengan todo decidido nos informan a Sebastian y a mí.

_Claro mamá _dice Ares, pero todos asienten.

_ ¿Cómo lo haremos teniendo en cuenta donde estamos anclados? _pregunta Alba.

_Creo que podemos manipular sus mentes para que vean otra cosa, nos ayudará mucho estar allí.

_Buena idea hermanito _dice Alba.

_Nadie debe saber dónde está ese sitio, así que me parece buena idea. Dante, y yo os ayudaremos a vosotros _digo señalando a mis hermanos. _Sois los únicos que no podéis teletransportaros.

_Disfrutad, chicos _dice Dante.

Todos salimos de allí, pero Dante me lleva a una esquina y saca sus alas. Yo hago lo mismo y lo sigo. Estamos muy altos y deja de ascender. Yo creo una gran nube bajo nuestros pies.

_Creo que necesitas alimentarte bien...

_Así es... _digo sacando mis colmillos.

Estoy disfrutando con Dante, cuando aparece Azazel a mi lado.

_ ¿Qué haces aquí? Estoy ocupada... _digo gimiendo mientras Dante me hace el amor y Azazel me mira con los ojos negros.

_He oído que necesitaban alimentarse para coger fuerzas mi reina.

Dante me embiste con fuerza y llegamos al orgasmo delante de Azazel, aunque eso no es nuevo. Dante se levanta de mi lado, y le hace un gesto a Azazel para que se acerque. Yo antes limpio mi cuerpo con agua. Azazel dejando libre su virilidad, se posiciona sobre mí, y cuando empieza a entrar en mi lo muerdo clavando profundamente mis colmillos. Y así nos llevamos un tiempo hasta que alcanzamos el orgasmo.

_ ¿Necesitas comer más? _me pregunta Dante.

_Creo que estoy bien amor.

Me levanto, me visto, y saco mis alas al igual que Dante. Azazel no tiene alas, pero se teletransportará. Nosotros descendemos y volvemos con el resto.

_Es el momento hermanita _me dice Alba.

_Así es. ¿Os llevo?

_Cogeremos el portal, tranquila.

Dante y yo nos cogemos de la mano y aparecemos fuera del castillo. Ya han llegado algunos. Ares se me acerca preocupado.

_ ¿Qué ocurre cariño?

_Mamá, he estado pensando. ¿Y si uno de nosotros va a allí y hace de canalizador para que no tengan que ir todos? Es peligroso llevar a tanta gente...

_ ¿Y si algo ocurre? _dice Dante.

_Tranquilo papá, nos conectaremos uno a uno, y si hace falta vamos rotando.

_Está bien, yo haré de enlace y tu padre me acompañará. Luego alguno me tomará el relevo para poder unirme a mis manadas.

_Avisaré al resto del cambio de planes _dice Ares y se va.

Los alphas van llegando, y según lo hacen, se van acercando por grupos en donde se encuentra cada uno de sus lunas o fuentes de poder. A mi lado llega Jack quien me saluda alegre.