Red Omega

Capítulo XXIV:|Be There|"No puedo dejarte"

Caminos que se separan por diferencias, amores que solo provocan daño. La realidad del mundo y el ser humano es cruel y mucho más cuando las injusticias nacen en la propia sangre. 

..

Su aroma estaba cambiado, no era perceptible porque compartían cada día juntos pero Izuku lo notó cuando uno de sus pezones se manchó. De hecho, su alfa lo había notado antes que el. Era una mancha blanca que no podía quitar con agua y jabón. Un desequilibrio hormonal no era normal después de una marca, quizás estaba más estresado de lo común por eso su cuerpo estaba presentando las consecuencias. No lo sabía, aún así, cada día era más complicado esconder las ojeras de su alfa, él solamente lo abrazaba calmando su cansancio. Era difícil mentirle a la cara y fingir que todo estaba bien cuando no era así. Viktor lo había estado mensajeando constantemente, diciéndole que ya no estaban en orden de búsqueda como recompensa por la información de los Sparrows. Sin embargo, ¿cómo explicarle eso a un alfa tan perspicaz como Katsuki? Haría preguntas y las estaba evitando lo más posible porque él era la primera persona que notaba cuando algo estaba mal, la primera que le preguntaba sobre todo al despertar. La primera que notó la mancha en su pecho, era un milagro que no percibiera el nerviosismo de Izuku cada vez que lo abrazaba y la culpa lo afectaba. 

Encendió un cigarrillo y siguió tecleando sobre el portátil, no debía perder el tiempo en pensar. Estaba buscando en cada cámara de seguridad de la ciudad para ver si había alguna pista sobre los prime. Seguía sospechando de un almacén, una semana antes de morir, Chisaki había ido con un camión que fácilmente podría transportar cuatro primes. El problema era salir, Katsuki había ido a comprar víveres y no podía dejar la casa sola por mucho tiempo, e investigar un almacén ubicado al otro de la ciudad llevaría un buen tiempo. Aunque no estuvieran siendo buscados por la policía, no deseaba levantar sospechas innecesarias con su alfa. Todo era complicado. Finalizó su cigarrillo y extendió su cuerpo en el sillón, cientos de veces mintió en el pasado. Pero nunca estuvo involucrado emocionalmente con la persona. 

Querer a una persona era más problemático de lo que imaginó.

Fue al baño y observó su reflejo, apestaba. Lo mínimo que podía hacer era bañarse y esperar al alfa con una imagen más decente. Se desvistió y descubrió que había ganado algo de peso en las últimas semanas. Sobretodo en sus caderas. No le molestaba porque sus muslos lucían más gruesos pero una estría había salido en su cadera. Frunció el ceño y busco la crema de cicatrices que los Sparrows le habían dado para las heridas profundas, no soportaba las cicatrices y menos que fueran porque había ganado peso por descuidos. Se metió a la bañera y masajeó su cuerpo con aceites naturales, el aroma de la lavanda lo hizo cerrar los ojos. Necesitaba dormir, descansar y olvidar que todo lo que estaba viviendo era una ilusión del tiempo. Pasaron los minutos y antes de que se diera cuenta, el aroma de su alfa estaba en el baño. 

—No es bueno que te quedes dormido aquí, te enfermaras estúpido Omega—Izuku se enderezó en la bañera, el agua aún estaba tibia, solo habían pasado unos quince minutos desde que se aseó pero con su suerte quizás eran suficientes para enfermarse. 

—Okey, lo entiendo. Pero, ¿por qué te estás desnudando?—Katsuki sonrió altivo. 

—Solo estoy aprovechando el momento—le hizo un ademán a Izuku para que se moviera. El ruso rodó los ojos y le dió el espacio suficiente al alfa para que se sentará en la cabecera de la bañera. Se limpió por unos momentos antes de abrazar a Izuku por la espalda. Respirando sobre su marca cicatrizada, las sensaciones que esa mínima acción le ocasionaban ya tenían el agua con un aroma bastante evidente. La lavanda había desaparecido y solo el petrico se hizo presente. El alfa lamió un poco antes de besar y dejó que sus manos viajaran hasta los pezones de su omega. Dios, como odiaba que fueran tan sensibles. Extendió su cabeza, apoyándola en el hombro derecho de su alfa.