Sexto Hokage

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Kakashi
Se encontraban Naruto y Kakashi fuera de la casa que había tenido como misión construir Naruto
-Lo has hecho muy bien Naruto, es tal como fue planeada, una casa grande y bonita.
- Kakashi, ¿por fin me darás una misión de verdad?
- Naruto, acaso ¿no te da curiosidad saber para quien es esta casa? – dijo con una sonrisa en su rostro
- Supongo que para alguien con una familia enorme
- Es tuya Naruto
-¡¿Qué?! Yo no necesito una casa tan grande dattebayo
- Naruto
- Además yo no quiero limpiarla
- Naruto
- No tiene sentido que me pongas a trabajar en algo que no quiero
- Naruto
- Además yo soy feliz en mi pequeña casa
-¡Naruto!
- Lo siento Kakashi, tendrás que dársela a alguien más
- ¡Naruto! Hazme caso
A lo lejos se veía una joven rubia caminar hacia ellos, y con la mano extendida grito desde lejos:
- ¡Naruto tu brazo esta genial! – exclamo a lo lejos Ino
- Gracias Ino – mientras agitaba su brazo para que pudiera verlo.
- Naruto –exclamo por última vez Kakashi ya cansado de ser ignorado
- Hoy cenaremos todos juntos, están cordialmente invitados, será en el mismo restaurante de siempre, en una hora espero verlos por ahí – les dijo Ino con una bella sonrisa
- Diviértanse y avisen a Kiba, Shino y Hinata, acaban de regresar de su misión, yo me voy – dijo Kakashi mientras comenzaba a caminar, al parecer no logro que Naruto se concentrará en lo que tenía que decirle
- Hasta luego Kakashi sensei –dijo Ino
- Pero Kakashi no me has dado ninguna misión dattebayo
- Tu nueva misión es ponerte a estudiar Naruto, tienes que aplicar el examen de conocimientos para convertirte en jounin ya te lo he dicho antes.
- Pero Kakashi, a mí no me gusta estudiar dattebayo
- Pues esa será tu nueva misión de rango S –dijo sarcásticamente.
- No es gracioso Kakashi
- Además espero que puedas aprender a concentrarte – dijo finalmente a lo lejos
- Naruto vamos a encontrarnos con Sakura y los demás – le dijo Ino con una gran sonrisa
- Supongo...

Hinata
-¡Vaya! La aldea cada vez es más bonita, incluso más que antes de ser destruida.
- Es gracias a Kakashi, quien ha puesto todo su empeño en que los habitantes tengan un hogar reconstruido y mejorado – dijo Sakura sorprendiendo a Hinata, quien hablaba sola.
- ¡Sakura!
- Hola Hinata, bienvenida – antes de que Hinata pudiera emitir una palabra Sakura se puso a hablar – te has perdido de algunos sucesos, Naruto ya tiene su brazo hecho con células de Hashirama, Kakashi será nombrado como el nuevo Hokage el día de mañana y bueno a mí me ascendieron como la directora del hospital.
- ¡Que alegría Sakura!, gracias por contarme tan buenas noticias. Estoy muy contenta por tus logros, los de Kakashi y
- Sobre todo de Naruto ¿no es así? – dijo Sakura mientras veía como Hinata se sonrojaba –no tienes por qué avergonzarte, tu siempre has querido al cabeza hueca de Naruto, aun no entiendo por qué, pero tendrás tus razones.
- Sakura – dijo Hinata bajando la mirada
- La verdad es que no le eres indiferente a Naruto – Hinata se quedó pasmada y aún más roja
- ¿Por qué dices eso? –apenas pudo pronunciar
- Porque me he dado cuenta de cómo te ve –eso hizo recordar a Hinata las últimas veces que Naruto la observaba, lo cual la hizo poner más roja – pero es un cabeza hueca que no se da cuenta de nada, ni de sus sentimientos.
A lo lejos se veían Naruto e Ino quienes venían platicando del nuevo brazo de Naruto y toda la travesía que tuvo que pasar, Sakura se dio cuenta de inmediato que Hinata ya estaba nerviosa solo de verlo venir hacia ellas y de inmediato se le ocurrió una idea traviesa
- Sabes Hinata – empezó Sakura con un nuevo tono de voz – Naruto está muy contento por su brazo, sin embargo como parte de la recuperación es normal que tenga movimientos torpes, eso ha hecho que en repetidas ocasiones se tire la comida encima, no pueda ducharse de manera apropiada, entre otras cosas rutinarias – Hinata no pudo evitar hacer una mueca de lamento – pero claro con el paso del tiempo estará bien, sin embargo Naruto es incapaz de contar esto a más personas que no sean sus médicos, por vergüenza.
- Naruto kun, espero que pronto mejore –dijo angustiada, mientras Sakura sonreía por su travesura
- ¡Hinata! –dijo Naruto mientras se acercaba a ellas con una gran sonrisa, sintió una gran tranquilidad de verla de vuelta
- Naruto kun, Ino – dijo Hinata viendo al piso
- ¿Cómo te fue en tu misión Hinata? –dijo Ino con una bella sonrisa
- Bien, fue todo muy sencillo.
- Vayamos al restaurante, ya es hora de reunirnos con los demás – dijo Sakura aún con toque travieso.

Una historia de amor: Naruto y Hinata andrea_22Donde viven las historias. Descúbrelo ahora