Una historia de amor: Naruto y Hinata andrea_22

Pedida de mano

Naruto
Lo que comenzó siendo un suave y tierno beso... se convirtió en un beso lleno de pasión. Los labios de Hinata son tan suaves que me dejo llevar y cuando menos lo espero ya estamos jugando con nuestras lenguas, mis manos recorren su espalda y ella juega con mi cabello; comienzo a excitarme cuando la intensidad del beso crece y entonces mis manos comienzan a moverse ansiosas, una de ellas se posiciona en un pecho de Hinata, siento como se estremece y mi miembro comienza a crecer... dejo de besar sus labios y entonces me dirijo a su cuello, ella emite un sonido que me vuelve loco y entonces la tomo de la cintura para levantarla, ella parece entender y rodea mi cadera con sus piernas; justo en ese momento la envuelvo con mis brazos; alcanzo sus labios y volvemos a besarnos pero esta vez más intenso...

Hinata
Los besos de Naruto me estremecen, ¿cómo podemos pasar de un momento tan tierno a esto?, pronto se aleja de mis labios para comenzar a besar la parte externa de mi oreja, luego mi cuello, sus besos se van acercando a mi pecho y entonces me mira, yo entiendo lo que trata de decirme, así que abro mi blusa; es tanta mi excitación que olvido mi timidez, pronto agradezco haberlo hecho al ver que aparece una gran sonrisa en su rostro, y entonces siento como Naruto comienza a besar la parte superior de mis senos, mientras sus manos bajan de mi cintura para abrazar mis caderas. Inconscientemente emito un sonido de placer, y entonces me doy cuenta que yo no tengo ni idea de lo que se hace en estas situaciones, yo simplemente me he dedicado a disfrutar, pero jamás he besado a Naruto de la manera en la que él lo hace conmigo... me siento torpe, pero realmente no sé de qué manera podría complacerlo. De pronto siento un hormigueo en todo mi cuerpo; es Naruto besando uno de mis pezones, mi sostén sigue puesto pero el ha logrado meter su lengua dentro para alcanzarlo... y entonces me olvido de mis pensamientos y me dedico a disfrutar de sus besos...

Naruto
¡Adoro los pechos de mi novia dattebayo! son tan suaves que no puedo evitar besarlos, me gusta jugar con sus pezones haciendo movimientos con mi lengua, pero lo que más adoro... es sentir la excitación de mi novia, sus gemidos, sus pequeños grititos que trata de reprimir, es tan delicioso que mi excitación se dispara por los cielos...

Hinata
De pronto siento que Naruto camina, no puedo saber hacia dónde pues mantengo mis ojos cerrados por la excitación. Me doy cuenta que se sienta y quedo en su regazo, el sigue aferrado a mi cuerpo.... Abro mis ojos ¡estamos en su habitación!, en el borde de la cama... siento que mi respiración se acelera de imaginar lo que está por venir...

Naruto
Siento un deseo incontrolable de hacer el amor con Hinata, así que la acuesto en la cama, y yo me pongo encima de ella; beso suavemente sus labios, me incorporo y me quito la chamarra, la aviento, justo en ese momento escucho que algo rebota en el piso y de golpe recuerdo que es el anillo que había guardado en una de las bolsas.

Hinata
Me siento muy excitada, pero de pronto Naruto se concentra en buscar algo en el piso, no sé bien lo que está buscando, pero no puede ser más importante que esto, así que lo llamo impaciente, él parece no escucharme por lo que me incorporo y quedo sentada en la cama, y entonces lo veo hincado al borde de la cama con un anillo...
- Hinata, yo.... no era como lo había planeado, yo pensé en una cena romántica, un picnic, ir a un lago, yo..., tu...
- Naruto kun – digo sorprendida, porque creo saber qué es lo que preguntara...
- ¿Quieres casarte conmigo? – sus ojos azules me dieron la fuerza para no desmayarme en ese momento, su rostro está a la expectativa de que responderé, siento mi corazón acelerarse, siento una enorme emoción que recorre todo mi cuerpo, y entonces sin pensarlo más
- Yo... acepto, quiero casarme contigo Naruto kun

Y entonces Naruto muestra una enorme sonrisa. Me abraza, yo respondo, le doy un beso en su mejilla y permanecemos abrazados mucho tiempo, no quiero soltarlo, no quiero que se aleje de mi, pero es el quien me suelta y entonces toma mi mano y coloca suavemente un hermoso anillo...