Una noche magnífica

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∆∆∆∆∆∆ Andrea ∆∆∆∆∆

Después de salir de apartamento de Cayetana fuí con papá a una «cena importante» con el mismísimo alcalde, papá estaba más que orgulloso de compartir la mesa con alguien tan importante yo estaba más que decepcionada de haber tenido que dejar a Cayetana por venir a esta aburrida cena sobretodo cuando estaba tan feliz en sus brazos disfrutando de cada beso y de cada caricia, soy tan feliz«ella me correspondió» finalmente sé que sí me ama y que le gusto, justo cuando creí que yo no era su tipo resulta que sí lo soy y que sí tengo pase libre para besarla y acariciar todo cuanto quiera esto es todo lo que había deseado, solo tenía que tener un poco de valor para darle una ayuda, está mañana cuando estaba besando su cuello en el colegio ella en verdad pareció disfrutar eso, entonces dentró en mi la duda de sí existe la posiblidad de gustarle un poco de poder ganarme su amor poco a poco, decidí que solo un beso podría quitar esa duda de mí así que me armé de valor para ir a su apartamento y pedirle que me enseñara a besar, lo debatimos por medio de una partida de ajedrez que yo gané ella no parecía querer hacerlo, pero finalmente accedió a confesar que está enamorada de mí tanto como yo de ella, finalmente la incertidumbre se fue y supe lo que es el paraíso al sentir sus labios en los míos «joder ella besa tan bien» que me vuelvo loca y lo mejor es que sé que ella también se vuelve loca conmigo aunque yo sea realmente mala besando o acariciando, me ama lo sé y eso me hace tan feliz tengo libre paso para decirle cuánto la amo y lo mucho que me gustan sus besos y lo feliz que me siento en sus brazos.

- André - exclamó mi padre que al parecer acaba de hacer ningún pregunta que no escuché.

- Perdón, no estaba prestando mucha atención - dije apenada por lo que estoy pensando.

- El señor alcalde pregunta si serías tan amable de pintar un cuadro con todos los miembros de su familia -

- Por supuesto yo encantada, para mí sería un honor -

- Le prometo que no se va a decepcionar señor alcalde, mi hija es muy buena en lo que hace -

- Eso es seguro, le parece bien este fin de semana para que usted Vega y haga la pintura, mi hijo mayor estará aquí para ese día y quiero que él esté en el cuadro -

- Me parece bien - fue lo único que dije, luego papá y él seguiremos hablando, yo dejé de prestar atención de nuevo para concentrarme en la sonrisa de Cayetana y esa mirada que me mata, esa mirada a la que no le podría decir que no aunque quisiera, y esos besos «joder» eso besos me cautivan por completo.

- ¿En qué piensas tanto? - susurró a mí lado la loca hija del alcalde.

- Nada -

- ¿Y te quedas sonriendo como idiota solo por pensar nada? - me percaté de mi sonrisa hasta que ella me dijo.

- Bueno, si estaba pensando algo, pero no es nada importante -

- Eres rara, uno no piensa tanto en cosas sin importancia y sobretodo no sonríe de la nada por cosas sin importancia - está chica está comenzando a fastidiarme.

- Sí, tienes razón, soy rara -

- O sólo estás enamorada - lo dijo en un tono completamente distinto, ¿sabe que es estar enamorada?.

- Puede, ¿Tú estás enamorada? - ella soltó una carcajada y su padre la miró de una forma muy intimidante, ella se calló de la nada y guardó silencio, luego habló.

- Creo que una parte de mí lo está -

- ¿Una parte? -

- Ana siempre dice que sea buena, pero no quiero - ¿Se refiere a su otra personalidad o qué?

Como Lo Fue Para MiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora