Capítulo 6: Sentimientos nuevos.

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Desperté por el sonido de mi alarma a las 6 de la mañana, se me hizo tan extraño despertar en la habitación tan maravillosa.

Luego de la conversación de anoche decidí que era hora de volver a la escuela y Sergio me acompañaría.

Me arreglé y bajé las escaleras encontrándolo en la mesa desayunando.

- Buenos días- le dije sonriendo mientras me sentaba a su lado.

- Luces animada- me dio mi desayuno.

- Lo estoy, a partir de ahora intentaré vivir una vida diferente.

Ambos desayunamos y me llevó a la escuela en su auto.

Al entrar todas las miradas estaban sobre mí, y una que otra burla sobre lo sucedido con mi abuela, ignoré los comentarios negativos y me enfoqué en mis clases.

Antes me la pasaba sola todo el tiempo, ahora, habló con Sergio cada vez que lo encuentro en alguno de los pasillos o en el recreo.

- Hola- me encontraba sentada en una mesa apartada en la cafetería cuando siento la voz de alguien saludarme y no podía creer lo que veía, era Jackson Duncan.

- Hola- le contesté nerviosa.

- Oye escuché lo de tu abuela- lo interrumpí.

- Si vienes a burlarte puedes irte, ya escuché suficientes burlas por hoy.

- No voy a burlarme, venía a decirte que lo siento y que si puedo ayudarte en algo no dudes en pedírmelo- lo miré asombrada, ¿hablaba en serio?- podemos ser amigos si quieres.

Era lo que había estado esperando toda mi vida.

- Claro- tartamudeé.

- ¿Te apetece venir al cine conmigo esta noche? Para levantar los ánimos y eso.

- Me encantaría- se despidió con una sonrisa y se alejó de mi.

Durante el camino a casa no pude disimular mi emoción, no paraba de sonreír llamando la atención de Sergio.

- ¿Sucedió algo bueno hoy? Te ves muy feliz- dijo sin quitar la vista de la carretera.

- Jackson Duncan me invitó al cine esta noche.

- ¡Vaya Hannah! Eso es genial, me alegro mucho por ti, él es un buen chico, seguro hacen una pareja genial.

- Yo no tendría tan altas las expectativas, ni siquiera se si le gusto- Sergio detuvo el auto y tomó mi rostro entre sus manos.

- No seas tan negativa, si te invitó a salir es porque le gustas, además ¿por qué no le ibas a gustar? si eres guapa inteligente y divertida, así que levanta esos ánimos que tienes una cita.

Sonreí ligeramente avergonzada y me quedé en total silencio observando el hipnotizante cielo azul.

Llegó la hora acordada y ahí estaba Jackson en su motocicleta esperando en la puerta de la casa de Sergio.

Me había esforzado por lucir guapa, me puse un vestido, tacones y hasta maquillaje, era mi primera cita y quería que fuese perfecta.

- Hola Jackson- lo saludé tímidamente con un beso en la mejilla.

- Estas guapísima Hannah, vamos te llevaré al cine.

Con algo de miedo me subí en la moto mientras me aferraba a la espalda de Jackson.

Al llegar escogimos la película que estuviese en cartelera, por suerte era "Grown Ups" una comedia para toda la familia que seguro disfrutaría, o lo habría hecho si durante toda la película Jackson no hubiese estado besándome e intentando colocar sus manos en zonas restringidas.

- Esta película aburre, vamos a mi casa, allí estaremos más cómodos para charlar- accedí sin estar convencida pero esto seguía siendo una cita y esperaba que mejorase.

Al llegar a su casa noté que estaba vacía.

- ¿Y tus padres?- pregunté mientras me sentaba en el sofá del salón.

- Están en uno de sus viajes de negocios, ten- me extendió su mano con una cerveza.

- Yo no bebo.

- Venga, una no te hará daño- volví a acceder sin estar del todo segura.

Yo intentaba platicar pero Jackson no paraba de intentar besarme, para ser sincera esperaba que mi primer beso fuese más romántico.

Jackson se quitó la camisa y me acostó sobre el sofá, hasta aquí llegué.

- Jackson, tú me gustas, y quiero que las cosas funciones entre nosotros así que deberíamos tomárnoslo con calma.

- Es solo un poco de diversión Hannah, no seas amargada.

- Es que no quiero que sea así, yo soy virgen y quiero que nuestra primera vez sea especial- vi como reprimió una risita- lo mejor será que me vaya.

Arqueó las cejas dramáticamente y volvió a vestirse para llevarme a casa.

Al llegar encontré a Sergio dormido sobre su laptop, trabajaba en su nuevo libro.

Lo desperté para que fuese a la cama.

- Hannah ya estás aquí, ¿que tal tu cita?- preguntó volviendo a acomodarse sus gafas.

- Escueta, no fue como esperaba,  ni siquiera pudimos terminar de ver la película- suspiré cansada- bueno me voy a la cama.

- Espera, aún es temprano, y temereces una cita como dios manda, ¿que te parece si terminamos de ver la película nosotros?

Sonreí, sólo Sergio podía sacarle el lado positivo a todo.

Terminamos de ver la película acompañada de palomitas y risas.

A la mañana siguiente llegué a la escuela a la hora habitual pero no había casi nadie.

Caminé por los pasillos hasta que encontré a todo el salón al rededor de Jackson, al parecer mirando algo en su teléfono.

Al verme Jackson sonrió y presionó un botón en la pantalla de su teléfono, acto seguido los altavoces de la escuela comenzaron a reproducir nuestra conversación de anoche seguida por risas y burlas de todos los presentes.

- La apuesta era acostarme contigo pero creo que esto fue mejor- dijo entre risas.

Cerré los ojos con fuerza para no llorar mientras levantaba mi puño dispuesta a estrellarlo en su cara pero Sergio se me adelantó.

- ¿Te crees muy chistoso?- lo levantó por el cuello de su camisa unos centímetros del suelo- vamos a ver si al director le causa tanta gracia.

Empujó a Jackson hasta el despacho del director y lanzó su teléfono contra la pared haciendo que el audio se detuviera.

Todos a mi alrededor reían pero ya no me importaba, el resto del mundo se había de detenido para escuchar como mi corazón latía tan rápido.

Estaba sintiendo algo que no había sentido antes, algo por Sergio, algo que no podía ser nada bueno.

Un Café PendienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora