tres.

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-Cómo bien sabrás, traté de seguir tu consejo

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-Cómo bien sabrás, traté de seguir tu consejo. Pero el inútil no es capaz de aguantar cinco pastillas -se quejó HyeMin, tomando de aquella taza elegantemente.

Miré desde la puerta atentamente. Jungkook se había ido hace unos minutos logrando que me quedase sin compañía. Pero antes de irse había dejado a Wooyoung en uno de los cuartos de la casa.

Escuchar las conversaciones entre aquellas dos personas siempre era igual. Criticar, humillar y vivir en un mundo de mentiras.

Siempre había odiado el ambiente en el que se rodeaba Heesok; debía vestir bien, debía de culparme de cualquier error suyo, debía ser cruel. ¿Todo para qué? Sí, para tener un estatus social alto.

-Dios mío, HyeMin, no puedes decir eso. Wooyoung tan solo lleva un día, no es que sea un inútil, es que su organismo debe acostumbrarse -la regañó.

HyeMin sonrió apenada y miró hacia el suelo. Todos extrañábamos a la antigua chica de sonrisa cuadrada, pero, ella había elegido la sociedad antes que ella misma.

-Lo siento, tendré cuidado la próxima vez -contestó.- ¿Cómo llegó a ser amada por todos?

Levanté una de mis cejas curioso, era interesante aquella pregunta; pero por desgracia, la respuesta ya estaba clara para mí.

-El amor es la admiración -contestó Heesok, tomando de su té.

La otra chica asintió, observando su té durante un rato.

-Quiero ser cómo usted. Quiero dejar de ser yo misma.

Bufé inconscientemente. Abrí mis ojos sorprendido al darme cuenta de lo que había hecho.

Heesok me miró impresionada. Aquella acción estaba prohibida para mí.

-¿Qué has hecho, San? -gritó Heesok, para después relajarse y mirarme con una sonrisa.- Con la llegada de HyeMin no te has tomado tu pastilla.

La miré expectante de sus acciones.

-Es cierto. Yo mismo me las tomaré.

Hice una breve reverencia y me dirigí hacia la cocina, dónde se ubicaba un paquete de pastillas. Fingí coger cinco para posteriormente tener un vaso de agua en mano (rellenado con el agua del grifo). Tomé el agua y regresé al salón.

 Tomé el agua y regresé al salón

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NO CONTROL ;woosanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora