Capítulo 13

1.8K 55 3
                                    

EVA
Abro los ojos y me los restriego para poder ver con claridad.

La cabeza me está matando, aunque no es algo insoportable.

-Hola. -Hugo irrumpe en la habitación. -Llevo un rato esperando a que te despertases.
-¿Y eso?
-Tu madre ha llamado. -Me tenso. -Tranquila, Ander no sabe nada.

Suspiro aliviada.

Nos quedamos por un rato mirándonos fijamente hasta que él rompe e silencio.

-Creo que tendríamos que hablar sobre ciertas cosas.

Le observo con la ceja alzada y él se acerca a mí.

-¿Qué?
-Vamos, Eva. Anoche.
-¿Anoche qué?
-Lo que ocurrió anoche.
-¿Qué fue lo que ocurrió anoche?
-¿Estás de coña no? ¿No recuerdas como acercaste tus labios a los mios? ¿Cómo me diste un beso en el cuello? ¿O como bailabas pegada a mí y deslizabas un hielo por mi cuello con tu boca?
-¿Yo hice todo eso? -Me hago la sorprendida y me acerco a él lo suficiente como para ponerle nervioso.
-Si, tú hiciste todo eso...
-Pues no me acuerdo. -Suelto con voz ronca muy cerca de sus labios.

Él dirige su mirada hacia los míos y después a mis ojos. Está conteniéndose.

-Joder, Eva... -Suspira alejándose. -Estás en terreno peligroso.
-No te entiendo.
-No te hagas la inocente.

Me levanto y camino hacia él.

-No se de qué coño me estás hablando. -Meto mis manos bajo su camiseta y noto como sus músculos se contraen con mi tacto. -Pero yo ahora mismo lo único que sé, es que tengo hambre.
-¿En serio? -Saca mis manos de dentro de su camiseta y me mira serio. -¿Es lo único que vas a decir?
-¿Qué quieres que diga? Que no me acuerdo, tío.

Me aparto y abro la puerta de su habitación. Salgo y la cierro de un portazo.

-¿Eva? -Ander me mira con el ceño fruncido desde el inicio de las escaleras. -¿Qué coño hacías en la habitación de mi hermano?

Mierda.

Me llevo las manos a la cara y suspiro. Lo último que quería es que esto pasase.

-Ya sabes... Estudiar.

Me hace un escaneo con la mirada.

-Ya, claro.

No parece muy convencido, pero yo para calmar el ambiente y relájarle me echo a sus brazos rodeando con mis piernas su cintura.
Él me sostiene y comienza a bajar las escaleras.

-Te quiero. -Le digo dándole un beso en los labios.

Me sonríe y sé que por el momento ha bajado la guardia y se ha olvidado del tema.
Aunque no sé por cuanto.

-Yo también, muñeca.

Evugo - Blonde Donde viven las historias. Descúbrelo ahora