Tú, Yo y el Destino.

14. Vistazo al jarrón

"Hoy día la gente conoce el precio de todo y el valor de nada."

—Oscar Wilde.

~*~

—Esto debe ser una broma. —digo frustrada ya que no encuentro mis pantalones formales, los únicos pantalones un poco decentes que tengo.

Tengo que ir vestida formalmente, ya que me darán el uniforme allí, —Solo si me contratan claro— tengo que dar una buena impresión y ya he comenzado con el pie izquierdo.

Hay más aspirantes a ser sous chef, así que nos mostrarán todo el restaurante y cómo funciona cada uno de los utensilios, tengo una ventaja ya que tengo mucha experiencia con cuchillos, y de más, así que no creo que será tan difícil, aunque estoy muy nerviosa.

Llevo más de cinco minutos buscando el maldito pantalón formal, ya no puedo perder más tiempo, tome una falta semi formal, y digo semi porque es muy corta, demasiado, de verdad no se porque entre esto en la maleta.

Me cambio lo más rápido posible, me pongo la falda de más de seis dedos arriba de la rodilla, una camisa color blanco por dentro de la ajustada falda azul oscuro, unos tacones negros con tacón semi alto, mi reloj y mis aretes formales.

Me puse un poco de labial rojo mate, y mascarilla para pestañas.

Me doy vuelta para verme en el espejo, y Dios mío, ni siquiera parezco yo, es demasiado atrevido para el evento, pero no hay tiempo para cambiarme, así que me las arreglo con esto.

Me arreglo un poco el cabello suelto, tomo mi móvil y cartera, salí rápidamente de mi cuarto dirigiéndome al comedor, tomo una manzana verde del manzanero, salí por la puerta principal, la cerré y me aseguré de ello, mientras comía mi manzana con rapidez.

Pensándolo bien, me había olvidado de lo que ocurrió ayer, y ahora que lo pienso lo tome demasiado bien para la situación, y eso fue muy extraño, para ser sincera no sé qué rayos pasó, y además de eso no se porque no siento miedo al pensarlo.

Mejor dejo de pensar en ese extraño momento, tengo que llegar lo más rápido posible, estoy demasiado tarde, y solo me dieron una oportunidad porque tengo experiencia y potencial.

—No lo eches a perder Chloe, no hagas nada estupido, no hoy.

Sin más me voy hacía la acera de frente al edificio donde vivo y pido un taxi, sin antes que los hombres me tiren piropos, pero no los culpo, si Alice me ve de esta forma ni si quiera me reconocería, pensado en ella tengo que contarle todo lo qué pasó, por igual a Tom, a Alex y por supuesto a Kamila, pero ahora me preocupo por la entrevista.

~*~

Finalmente, llegue a mi destino, le pague al joven taxista, y fui lo más rápido que pude hacia la entrada del edificio administrativo.

Al entrar, reconozco al mismo señor que me atendió ayer.

Me acerco y le saludo.

—Mucho gusto en volverla a ver, Viene un poco tarde, pero tranquila que aún no han comenzado, ¡Ah! Me podría hacer el favor de llevar este documento a la oficina de la señorita Floyd, si no es problema, es que estoy un poco viejo y vago. —dice con una sonrisa cálida en su rostro.

—asiento. —Claro, no se preocupe, yo sé lo llevaré, pero antes, ¿Donde queda su oficina?

—Está cerca del área del restaurante, si ella no está allí, suba a la oficina principal y déjelo allí.

—Ok, cuando lo deje ¿tengo que ir hacia el restaurante?

—Si, el jefe debería estar allí dando la charla en estos momentos con los otros aspirantes.