Las nueve y cinco minutos.
Angel probablemente estaba a punto de llegar, así que se contuvo de pedir otra botella de vino.
Las nueve y cuarto.
¿Quizás Angel estaba tratando de llegar tarde a propósito? Pensó que eso era bastante estúpido e inútil, pero parecía algo que Angel haría.
Nueve y media.
Su segunda botella de vino estaba casi vacía, era inútil verterla en la copa, así que la terminó con un buen trago, sin importarle si eso le valía algunas miradas en su dirección.
Las diez menos cuarto, y ahora estaba bastante claro que Angel no iba a llegar. Husk se habría sentido enojado o decepcionado, y tal vez se sintió así, pero por tan poco tiempo que fue completamente irrelevante.
Lo que sintió durante más tiempo, y por lo tanto fue mucho más importante, fue la sensación de que algo no estaba del todo bien. Angel no parecía el tipo de persona que pasaría la oportunidad de disfrutar de una lujosa cena que él no tenía que pagar.
Husk salió del restaurante a las diez en punto, después de haber decidido esperar al menos quince minutos más, como si estuviera aferrándose a esa pequeña posibilidad de que Angel todavía apareciera por la puerta con una sonrisa ganadora y una historia alocada para explicar su tardanza
De camino al hotel, la sensación de temor en la boca de su estómago no hizo más que volverse más fuerte y más difícil de ignorar.
Aun así, esperaba que Angel estuviera en su habitación. Tal vez estaba dormido. Tal vez estaba viendo su programa favorito con su cerdo mascota. Tal vez simplemente ya no quería ir a una estúpida cita con él.
Era una tontería, lo sabía. Pero era mejor que todos los escenarios desagradables que pasaban por su cabeza en este momento.
—¿Oh? Has regresado, querido amigo.
Husk no pudo contener un suspiro largo y exasperado que escapó de sus labios al oír esa voz. Ver a Alastor era lo último que necesitaba en ese momento, pero sabía que no tenía otra opción que soportarlo.
—Así es. A menos que sea un doppelganger. O un gemelo bueno. Lo que más te guste.
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Hábitos de mi Corazón [AngelHusk]
FanfictionDos demonios solitarios. Un par de tragos de más. Y un vacío que ninguno puede llenar. Husk había perdido la habilidad de amar hacía años, según sus propias palabras, y eso no iba a cambiar muy pronto. Angel Dust no cree merecer el amor verdadero de...