Mathieu entró cansado en su habitación mientras los niños estaban en el recreo. Pero una amarga sorpresa le hizo poner sus alarmas. Aquel armarito donde había guardado su tan apreciado maletín de cuero estaba medio abierto y con el candado mal colocado. Echó una mirada hacia atrás nervioso, como si quisiese que el culpable se encontrase justo detrás suya. Llevó su mano a la barbilla, acariciándola con nerviosismo y sin dudarlo ni un segundo más, salió de allí en busca de encontrar al culpable o los culpables.
. . .
-No son fotos de tías en pelotas. -Dijo Corbin decepcionado.
-No te he dicho que lo sean. -Respondió Morhange.
-¿Por eso estabais buscando el maletín? -Añadió Angeline.
Corbin miró hacia otro lado avergonzado, mientras Pierre hacía gestos de "no" con la cabeza con las manos en alto como gesto de inocencia. Angeline bufó.
-¿Qué pone en el tuyo? -Le preguntó Leclerc cambiando de tema.
-Ave María para soprano de Clemént Mathieu. -Respondió ella.
-Yo tengo cuarteto de cuerda de Clemént Mathieu.
Los niños curioseaban las grandes hojas que el maletín contenía. El papel era algo grueso y sonaba como a cartulina. En ellas se encontraban líneas y líneas que parecían ser aquello que llamaban pentagramas.
-Parece música. -Sugirió Corbin.
-¿Y tú que sabes? -Formuló Leclerc a la defensiva.
-¿No será Morse? -Preguntó esta vez Morhange.
-O tal vez son claves secretas. -Corbin el conspiranóico le decían.
-No seáis tontos. -Dijo ahora ella leyendo uno de los folios. -Es música.
-¿Como lo sabes? -Morhange seguía creyendo su teoría del Morse y los espías.
-Lo estudié en los otros internados. -Explicó ella dejándolo en el suelo. -Son pentagramas.
-¿Penta qué? -Leclerc no entendía nada entre espías pentagramas.
-¡Cuidado! -Exclamó alertándolos un niño del patio que vigilaba. -¡Viene "Cabeza huevo"!
Los nervios estaban a flor de piel. Deprisa, todos intentaron guardar las hojas que antes manoseaban y cuando escucharon los pasos del vigilantes cerca, se levantaron al mismo son, tapando con sus cuerpos la propiedad que habían robado y burlado.
-Devolvedme eso. -Ordenó seriamente Mathieu mientras se colaba entre ellos para agacharse y recuperar sus pertenencias.
-¿Qué es, señor? -Se apresuró a preguntar Leclerc.
-No es asunto vuestro. -Respondió con rabia.
-¿Algún problema Mathieu? -Chabert entró de improvisto en los baños.
-No, nada. Es... -Hizo una pausa, ¿debería decirlo? -Es música.
-¿Para qué? -Exigió saber el profesor.

ESTÁS LEYENDO
《Fond de l'étang》| Pierre Morhange
FanfictionNo ha habido internados femeninos que aquella niña no haya pisado, y eso llevó acabo que ahora se encontrase donde se encontrase, Fondo del Estanque. Pero eso fue ya hace dos años. Y es aquí donde realmente comenzará su historia, todo gracias a aque...