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2. Primer Día

Empieza a sonar la alarma de mi celular, indicando que ya son las seis de la mañana y momento de levantarse.

Ya es lunes, no puedo creer que hace solo dos días mi padre y yo nos mudamos a nuestra nueva casa y a un lugar muy diferente a la ciudad, me gusta como todo se ve tan lleno de vida, la naturaleza presente, eso sin duda me encanta.

Por primera vez en mucho tiempo me levanto con una sensación de comodidad y de estar en un lugar de ensueño como el paraíso, sonrío, y luego recuerdo que hay algo que estoy olvidando, ah claro, el primer día de clases de mi último año en una nueva preparatoria.

Eso hace que mi sonrisa desaparezca y que me empiece a poner nerviosa, dejando atrás la felicidad espontánea de hace unos segundos. Me odio por tener nervios de gelatina.

Sin embargo hago lo que puedo y una vez lista, me pongo mis zapatos y tomo mi teléfono de la mesita de noche, y mi bolso, salgo de mi habitación y voy directo a la cocina, cuando entro esta mi papá preparando el desayuno.

El olor hace que me de hambre, cierro los ojos y disfruto el aroma...Umm panqueques.

-Oh, hija, veo que estas lista.-me dice al verme en la entrada de la cocina.

Enciendo mi celular y veo la hora tan solo son las 6:30 am, y es que creí que había pasado mas tiempo, pero al parecer no es así, hace falta una hora para mí entrada y no queda para nada lejos, esta a tan solo unas cuadras de aquí. Así que me queda tiempo y me relajo solo un poco, me acostumbre a lo rápido de la rutina en la ciudad, supongo que luego me acostumbraré a esta, todo a su tiempo, claro.

-Pensé que era tarde.- Le menciono a mi papá, me siento y lo observo volteando un panqueque y luego hacer una montaña con dos más y extenderme el plato, lo tomo gustosa queriendo ya dar el primer mordisco a un panqueque.

-Ellie, tómalo con calma ¿Si?-me sonríe-Tal vez te tomará un poco de tiempo acostumbrarte, pero se que te gusta este lugar, ese ya es un comienzo, no te preocupes por la preparatoria, todo saldrá bien, hija.

Mi padre es tan comprensivo, que a veces me cuesta creerlo, lo quiero tanto y es que él a sido todo para mi.

Mi madre a diferencia de él no mostró mayor interés en mi, con ellas las cosas se resumían en pequeñas interacciones vacias mientras que yo solo quería un poco de su atención, y no es porque ella estuviera realmente ocupada sino porque cualquier cosa era mas importante que algo que tuviera que ver conmigo.

En cambio mi padre a pesar de no estar tan presente debido a su trabajo, su ausencia apenas se notaba pues me brindaba mucha atención cuando podía, y sigue siendo así.

-Realmente eso espero, lo intentaré.-él solo me mira a través de sus lentes y asiente, para luego poner su atención de nuevo en la cocina.

Comienzo a comerme los panqueques y luego de un rato termino, y veo que papá también termina de desayunar y recoge todo dejándolo limpio en tan solo unos minutos, ya que el también debe ir a su trabajo.

-Ellie, ya me tengo que ir, si quieres te dejo en la preparatoria.

yo asiento.

***

-Bueno, hija, ya llegamos a tu destino.-Me mira con una sonrisa cálida en su rostro, tratando de transmitir seguridad. Y de algún modo lo logra, me despido de él con un beso en la mejilla y bajo del auto .

Camino hacia la entrada de la preparatoria, sintiéndome nerviosa, de vez en cuando dando una mirada hacia el frente y volviendo a mirar el suelo, observo de reojo a los estudiantes conversar y reírse.

Ya dentro, sigo caminando y recuerdo que tengo el horario de las clases en mi bolso así que lo busco para poder ubicar mi salón y la materia asignada para esta hora. Suena la campana y afortunadamente ya se cual es mi salón así que voy directo hacia allá y de repente choco con alguien y es que olvide mirar hacia el frente mientras veía el horario.

-Disculpa, yo...no quise.-me disculpo por tropezar a una chica que justo ahora me mira más que disgustada.

-Fíjate por donde caminas-Ella voltea los ojos y se va con su notable mal humor.

Ahora tendré más cuidado, no quiero tropezar con alguien más, sino caminando esta vez si miro hacia al frente y entro al salón de clase, decido sentarme en un asiento a la mitad de una esquina e inmediatamente después entra el profesor.

-Buenos Días, alumnos, para los que no me conocen soy Robert Philips su profesor de Ciencias, y el día de hoy, ya que es el primer día de clases vamos a estar hablando sobre...- El profesor esta explicando la clase, la verdad explica bastante bien, aunque su rostro no es muy amistoso que digamos.

-Buenos Días...- La chica con la que tropecé en el pasillo aparece en la entrada del salón.

-Querrá decir Buenas tardes, llega tarde señorita Juliet.

-Lo sé, ¿puedo pasar o no?-la chica parece desafíar al profesor.

Él la mira con notable molestia, sin embargo asiente.

La chica entra al salón y se sienta en un puesto de adelante. El profesor sigue con la clase y yo me dedicó a escuchar con atención.

Noto que la chica, Juliet, está conversando con un chico sin importarle lo más mínimo la clase, al parecer ella nota mi mirada y voltea a verme, inmediatamente dirijo la vista a mi cuaderno para evitar cruzar miradas. Solo espero que olvide el incidente de esta mañana, levanto la mirada y veo que ya estoy fuera de su campo visual.

El tiempo pasa y termino la clase de Ciencias, para luego ver Historia, una profesora muy carismática da la clase y por un momento me empezó a gustar escuchar sobre esa materia, la cual no es mi favorita.

Suena el timbre que indica el receso y todos salen rápidamente y yo los imito, recojo mis cosas para ir al receso, cuando estoy a punto de salir del salón, la chica que ahora sé se llama Juliet se coloca en frente de mi, evitando que avance.

-Hey, espera chica, eres nueva ¿Cierto?

-Eh... Si soy nueva-Le respondo en un tono muy bajo.

Chasquea la lengua

-Bienvenida, supongo.-su cara dice lo contrario

Ella se da media vuelta y se va con aires de superioridad, me siento un tanto desconcertada por su actitud, sin embargo, si digo que no esperaba que algo así me sucediera tan pronto, estaría mintiendo. Ser el objetivo de alguien como ella es mi especialidad, respiro hondo y salgo del salón, voy a la cafetería, sólo por un jugo, la verdad esta mañana quede satisfecha con mi desayuno, voy por el jugo y me siento en una mesa vacía, me siento incomoda por lo de hace un momento, pero supongo que el día avanza con normalidad. Solo debo evitar toparme con ella de nuevo.

Termino el receso y toca regresar al salón, así que entro y empiezan las clases. El día de clases transcurre bastante bien, y lo bueno es que pude controlar un poco mis nervios.
No tuve que presentarme gracias al cielo.

Voy caminando a mi casa, cuando llego saco mis llaves y abro la puerta, se que mi padre no esta en casa, él dijo que llegaría un poco tarde. Así que preparo un sándwich y me siento en el sofá a ver televisión, hoy no mandaron tarea, pero tome muchos apuntes de las clases.

Me pongo a pensar en este primer día de clases y en que a pesar del pequeño encuentro con esa chica Juliet, mi día transcurrió mejor de lo que pensaba.