Una semana había pasado de aquello. Cosa que no se volvió a repetir, pues ambos llegaban agotados del trabajo. Incluso prefirieron dormir cada uno en su habitación, pues les quedaba el último tirón para que llegasen las vacaciones de navidad. Estaban realmente ocupados y no podía permitirse el lujo de trasnochar, bajo ningún concepto.
Esa mañana, Jungkook, se había despertado de muy buen humor, pues lo despertó una llamada de Taehyung, diciéndole que el señor Müller le quería dar otra oportunidad. El día había empezado de maravilla. Se duchó rápidamente para acompañar a Jimin en el desayuno. Cuando llegó a la cocina, tragó en seco al verle puesto con ese traje. El dichoso traje que lo traía loco, desde la primera vez que lo vio. Saludó a Jimin con un tierno beso en los labios y se dispusieron a desayunar en silencio. No hacían falta las palabras cuando aquellos dos muchachos estaban solos.
Llegaron a la oficina apresurados, pues Tae le mandó un mensaje de que el susodicho, llegaría pronto. Salieron tan deprisa que Jimin se olvidó su teléfono en casa. Pero Jungkook le dijo que no había tiempo, que no podía perder otra vez esa oportunidad.
La empresa estaba con más movimiento de lo normal, pues todo tenía que salir perfecto. El señor Müller era una persona muy importante. El cliente más importante que ha tenido Jungkook. Minutos después de llegar a su despacho, Haenul anunció su llegada. Jungkook suspiró hondo antes de permitir su paso, permitiéndose ver a Jimin sonriendole y levantando ambos pulgares. Le estaba dando ánimos, pues sabía que esa persona era por la cual él trabajaba ahí.
La puerta se abrió, dejando ver a un hombre de unos 40 años. Pelo oscuro, que dejaba ver algunas canas. Gafas oscuras, que se quitó al entrar en el despacho. El hombre llevaba un hermoso traje gris, planchado perfectamente. Se le veía un hombre muy apuesto, a pesar de su edad. Jungkook estaba realmente feliz, pues iba a recuperar todo el dinero perdido. Seguro que lo haría, era el mejor para persuadir. Puede que incluso ganase algo más. Jimin recibió a aquel valioso cliente con una reverencia, pero en cuanto se reincorporó, palideció. ¿Cómo era posible?
Los recuerdos de aquella fatídica noche volvieron en cuanto los ojos de aquel hombre se posaron en los de él. Müller sonrió, pues lo recordaba perfectamente. Ninguna otra puta lo había hecho disfrutar tanto como él. Lo estuvo buscando por todas partes, sin éxito. No pensaba, ni mucho menos, volverlo a ver allí. Jungkook estaba tan metido en el papel de jefe, que no se dio cuenta de la situación.
-Bueno, Jeon... Creo que eso es todo... Cuento contigo esta vez. Espero que no me falles. -sonrió-
-Descuide. Esta vez no habrá ningún problema. Le aseguro que desde ahora, ha ganado las elecciones. -Le estrechó la mano-
-Por eso pensé en ti, desde un principio. Pero aquello, me decepcionó bastante. Estuve a punto de demandarte y todo. Pero mi amada esposa me dijo que te diera otra oportunidad. Y tengo que agradecerle a ella el estar aquí hoy -Eso último lo dijo mirando al pobre chico, que estaba aterrado-
-Se lo aseguro, ganará. Esta en las mejores manos -sonrió-
-Lo sé... Una última cosa... ¿Podrías prestarme a tu empleado? De paso que me acompaña a la salida quiero que apunte unos detalles finales
-Por supuesto. Jimin, haz lo que te diga -Estaba tan absorto en el trato que acababa de hacer que no vio el terror en los ojos del menor, que simplemente asintió-
Jimin estaba muerto de miedo. El señor Müller no le hizo nada en el ascensor, que era lo que más temía. Tal vez no me reconoce, pensó. Sin embargo, cerca de la salida, el miedo volvió a invadirle todo el cuerpo, cuando sintió la mano de aquel hombre como le rozaba levemente el trasero.
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Asistente personal •KOOKMIN•
RomansaJeon Jungkook. Director de la mejor empresa de publicidad de Busan. Mujeriego. Park Jimin. Asistente personal de Jeon Jungkook. Mudo. ¿Cómo será la relación entre ambos? 🥇 - chicoxchico (06-11-2022) 🥈 - jungkook (25-11-2022) 🥈 - Jimin (02-02-20...