V

187 18 1
                                    




Por fin había terminado esa tormentosa semana. Llena de exámenes y de trabajos.

Louis estaba tan cansado de todo, no sabía que hacer, tenía tantas dudas en la cabeza, no sabía cómo manejar el instituto, la situación en su casa tampoco era la mejor y ya ni hablemos de que a su querido 'padre' le habían entrado las prisas porque empezase a trabajar. En serio estaba agotado tanto física como psicológicamente, ya no podía más con la situación.

Esta semana la verdad es que la tenía más tranquila, tenía un examen pero era de su asignatura favorita así que tampoco le suponía mucho problema estudiarla.

Sonó su queridísima y bendita alarma, el sonido favorito de su día a día, vivía por y para escuchar ese sonido tan increíble que le decía 'va a empezar un día más de mierda', así que se levantó, se duchó y hoy sí que se puso ropa más abrigada y que tapase más porque a Troy se le fue la mano. Cogió su mochila y sus llaves rápidamente porque adivinad que, sip, llegaba tarde como siempre.

Salió escopetado de su casa y como no, sin abrigo ni guantes ni nada, pero por suerte hoy llevaba algo más abrigado.

Fue caminando y se maldijo interiormente porque pudo reconocer el coche que acababa de parar en la esquina. Ese bendito coche que llevaba una semana esperando ver, aunque no se lo reconociese a Niall ni a nadie básicamente. Pero lo que él no sabía es que Harry llevaba una semana haciendo el mismo recorrido a la misma hora para ver si se encontraba con cierto omega de ojos azules.

Cuando llegó a donde estaba el coche Harry ya estaba con la ventanilla bajada preguntándole si quería que lo acercase, y vamos a ser sinceros nadie se negaría ante esa sonrisa con hoyuelos, esos ojos esmeraldas y ese aroma tan increíble, así que esta vez ni dudó ni esperó a contestarle y subió al coche.

Durante el camino intercambiaron pocas palabras, pero al llegar al estacionamiento del instituto pasó algo que de verdad Louis quería que no pasase. Se le cayó el móvil al suelo al bajar del coche y cuando se agachó la manga se le subió y se podía ver perfectamente a kilómetros las marcas que le dejó Troy. Y en ese momento es cuando Harry empezó a hacer preguntas.

- Qué es esto? – Le miró con el ceño fruncido.

- Nada que te deba importar.- No sabía cómo librarse de esa situación, era obvio que iba a empezar a preguntar, porque desde el día que lo conoció supo que este alfa no era como los demás.

- Mira, sé que no somos amigos y que no tengo ningún derecho a preguntar, pero si estás siendo maltratado deberías pedir ayuda.- Lo dijo en un tono bastante serio, incluso podía decir que le había cambiado el aroma a uno más ácido.

- No eres nadie para decirme lo que tengo o no que hacer, además a mí nadie me ha tocado- Y aquí llegó el actor de Louis Tomlinson, esa máscara que se pone él de omega duro y sin sentimientos.

- Sólo me estoy preocupando por ti- Al ver como Louis se estaba empezando a alterar cambió totalmente la expresión de su cara e instantáneamente su aroma se suavizó, lo que le dio más seguridad al omega.

- No necesito que te preocupes por mí, sí?- Un óscar para Louis el actor.

Esto sí que no se lo esperó ya que el alfa fue demasiado rápido y no lo vio venir.

- Ahora me dirás que nadie te ha tocado no?- Harry le había descubierto un poco más la manga donde se podía ver perfectamente las manos de su padre marcadas en su brazo. Se dio cuenta como Harry empezaba a respirar más fuerte y juraría que se le habían hecho más grandes las fosas nasales.

- No te importa una mierda mi maldita vida porque no eres nadie para mí- Eso fue directo al corazón y al alfa de Harry, notó en seguida como el aroma de Louis había cambiado y como su alfa estaba intentando soltar un gruñido por la frustración de no poder ayudarle y de saber que si intentaba acercarse iba a recibir una fuerte patada en alguna parte de su cuerpo.

- Está bien Louis, como quieras, si necesitas algo quiero que sepas que puedes contar conmigo.- Se giró y se marchó.

Cuando estuvo lo suficientemente lejos, Louis gritó de maldita frustración, había podido oler perfectamente el aroma del alfa, y apestaba a tristeza y decepción, y eso enervaba muchísimo a Louis porque él, ni quería hablar de ese tema con nadie ni le gustaba, pero con Harry su omega le estaba pidiendo a gritos que se lo contase para que el alfa pudiese reconfortarle, y encima ahora se sentía como una mierda por haber causado esos sentimientos en el alfa ya que simplemente se estaba preocupando por él, nada más.

Lo que hizo fue entrar a clase muy malhumorado, aunque en serio se preguntaba porqué mierda se encontraba así si no conocía de nada a ese alfa, que más le daba que se hubiese sentido así? Harry no tenía derecho a tocarle ni a meterse en su vida.

Al entrar a clase se podía oler que estaba muy enfadado y frustrado. Por el contrario estaba Niall, más rojo que un tomate, con una sonrisa tímida en su cara, y con un aroma peculiar diría Louis. Entonces se sentó a su lado sin decir nada y Niall tampoco, y eso asombró a Louis porque debía apestar an alfa y volvía a llegar tarde. Esta vez fue él quien empezó la conversación:

- Ni? – Le preguntó preocupándose de que le estuviese sonriendo a la nada. Al ver que no le contestaba le llamó varias veces y cuando se cansó, le empezó a dar golpes en el brazo hasta que por fin reaccionó.

- Ey Lou.... Cuándo has llegado?

- Pues hace un rato, pero como estabas en tontilandia ni te has enterado.

- Oye oye si estás enfadado con el mundo no la pagues conmigo- Y en ese momento a Niall se le borró la sonrisa de la cara para pasar a estar serio y Louis se arrepintió en ese instante. Entonces cambió la mueca que llevaba en la cara y le preguntó lo más amable que pudo.

- Me vas a contar que ha pasado para que estés sonriendo como un maniático a la nada? – Sí, él y su forma tan amable y educada de preguntar las cosas.

- Eh? – Y ahí estaba Niall sonrojándose otra vez.

- Nialler, que me tienes que contar? – se olvidó de porque estaba enfadado y le puso esa sonrisa y esa mirada que Niall en serio odiaba.

- He... -Miró hacía otro lado- He conocido a un alfa Louis- Y se sonrojó aún más si podía.

- Quién es? Cómo se llama? Estudia aquí? Cuántos años tiene? Dónde y cómo os habéis conocido? – Sonrió en forma de burla.

- Ey no seas así Loueh, solo a mí me queda bien preguntarlo- Hizo una mueca graciosa con la cara.

- Está bien pero cuenta.

- Vale pero no digas nada hasta que termine- Asintió con la cabeza.

- Bueno él... él se llama Lewis, es un curso mayor que nosotros y por lo que sé estaba esperando a su amigo que llegaba tarde como siempre, y yo le dije que estaba esperando a mi amigo que también llegaba tarde como siempre, entonces nos pusimos a hablar de cosas de la vida y bueno él, en serio Louis es precioso, tiene unos ojos verdes que enamoran y un aroma, el mejor aroma que he olido en mi vida de verdad. Y bueno estuvimos hablando un poco más, sonó el timbre y como no llegabas ni su amigo tampoco decidimos entrar a clase, me acompañó hasta aquí, me dijo que si quería ir con él y sus amigos a almorzar, le dije que te iba a preguntar y me dijo que por supuesto y que ellos se sientan en la mesa del fondo de la cantina. Y bueno creo que eso es todo.- Le mira con una sonrisa y una cara de inocente.

- Claro que vamos a ir a almorzar con ellos, tengo que conocer al chico que ha puesto tontorrón a mi mejor amigo, bueno a mi futuro cuñado.

- Cállate quieres? Ni si quiera le puedo considerar amigo como para que digas que vamos a acabar juntos, tontito.

- Lo primero no me llames tontito y lo segundo está por verse Niall- Le sonrió con cara perversa.

Hasta el recreo estuvieron atendiendo y haciendo lo que mandaba el profesor. Cuando sonó el timbre jamás había visto a Niall tan nervioso, sonrojado y desprendiendo un aroma tan dulce.

HomeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora