5

478 46 4
                                    

Peter siempre ha sido muy positivo, desde pequeño, parecía siempre lleno de energía y buenas vibras. Cuando perdió a su tío Ben, todas esas características le habían abandonado, con dieciséis años aprendió a fumar y a tomar cierto gusto al alcohol. May se preocupó mucho por él, pero se reconforto ver que fue por un breve periodo de tiempo, aunque su gusto por el tabaco quedó permanente.

Era víspera de navidad y Tony cumplía su semana número veinte y dos. Los rumores en las revistas de chismes habían comenzado, la ausencia del genio fue notoria, y se habían disparado todas las teorías posibles. Peter le había pedido a Jarvis que suspendiera la suscripción a dichas revistas, no quería que nada molestara la atmósfera de tranquilidad que habían implementando en el departamento. Pero no pudo ocultar que esos rumores aparecieran en los noticieros, donde preguntaban por el bienestar del querido magnate, si como no. Tony, por medio de una video llamada, le decía a Pepper que terminara los rumores diciendo la verdad, este nunca ha podido ocultar bien que le gusta ser el centro de atención. Peter sabe que es algo de Tony, ser el foco de los chismes, para bien o para mal, y recuerda que una vez esté le había dicho "no importa que hablen de mi vida, es muchísimo más interesante que la mayoría de los que están allá afuera". Si el genio estaba bien con eso, Peter también lo estaba.

Disfrutaban de su pequeña cena, escuchando los clásicos navideños. El ya crecido vientre de Tony le imposibilita terminar de decorar el árbol, así que Peter se encarba de los detalles más altos, y Tony solamente le pasa los accesorios con un gesto de desacuerdo en los labios. Cuando terminan, el reloj en frente de la chimenea indican las diez de la noche en punto. Peter le sugiere ir a descansar, y le Tony le responde con besos, obligando a Peter a sentarse de nuevo en la sofá. El castaño se las arregla para subirse a su regazo, sin apretar su vientre, y dedicarse a besar como es debido a su esposo, como no lo ha hecho en meses.

Con mucho temor, Peter se va dejando caer sobre el sofá, entre los cojines y las sábanas que ahora su esposo mantiene ahí, Tony no se baja de él y comienza a acariciarle sus puntos de quiebre. Siente las suaves manos del mayor sobre su cuerpo, pasean desde su cuello hasta los costados de su torso, su respiración comienza a volverse cada vez más pesada, y los besos de Tony van esparciendo calor sobre su oreja, cuello y clavículas. Pierde su camisa y la de su esposo cae poco después, ¿en qué momento la habitación ganó tanto calor? Todos los movimientos de esa noche son más lentos de los que Tony realmente quiere, y son muy rápidos para Peter, que con muchísimo miedo toma el cuerpo de su esposo.

Despierta cuando los ronquidos de Tony no llegan más a sus oídos, alertandole que había despertado, pero Peter ve que sigue sin moverse, el cuerpo de Tony está más frío de lo normal y su respiración es apenas sensible. Todas las alarmas en su cabeza se disparan y se levanta con el cuerpo de esposo aún sobre el suyo, le llama, le habla, toca su rostro y comprueba que el calor le había abandonado. Deja a Tony reposando sobre el sofá y busca desesperado algo de ropa, cuando encuentra el deportivo que llevaba esa noche suspira aliviado. Saca rápido su celular y puede ver que anuncia las seis de mañana con siete minutos. Mientras corre a buscar edredones que le generen calor para Tony, llama a Bruce, lo único que sale de su boca es "Tony no tiene calor, necesito que subas", la adormilada voz de Bruce le contesta que estará ahí en tres minuto.

"Tony, amor, ¿cómo te sientes? ¿Te duele algo?" Preguntaba mientras subía las cobijas hasta la garganta del mayor, la IA iba subiendo la temperatura rápidamente y Peter no sabía si el sudor era por eso o el temor que se había apoderado de su cuerpo. Cuando finalmente Bruce llega, Peter le pregunta qué hacer, que está listo para marcharse al hospital. El doctor le tranquiliza, e inicia con el chequeo en el durmiente. Le indica que Tony perdió calor, y decide obviar el hecho que durmieron en la sala, desnudos. Y que esta dormido, no inconsciente, pero no despierta, porque pues, evidentemente está agotado. Le indica a Peter que prepare un baño con agua lo más caliente que pueda, y luego meta al millonario ahí. También le dice que irá por el resto de sus cosas y harán un ultrasonido rápido, para ver que todo siga en orden.

Cuando tiene listo el agua caliente en el baño de su habitación, se recrimina la irresponsabilidad, ¿qué tenía en la cabeza? Baja y encuentra a Tony plácidamente durmiendo, sigue sin despertar pero las perlitas de sudor en la frente le llevan un poquito de alivio. Sin quitar las cobijas del mayor, lo toma en brazos y lo sube a la habitación. Lo recuesta en la cama y entra de nuevo al baño, prepara toallas y saca la ropa más abrigadora que encuentra en el armario. Saca a su esposo de entra las cobijas y con toda la delicadeza que tenía, lo deposita dentro de la bañera, mojando parte de su pierna.

Ve a su esposo dentro la bañera aún sin despertar, y se dice que llorar ahora no es el mejor momento, aunque el picor en sus ojos no lo puede parar. Se asegura que la posición en la que su esposo descansa sea cómoda, y se dedica a regar el agua sobre las partes que no cubre. Su blanca mano contrasta con la morena tez del mayor, y las lágrimas van cayendo, se van mezclando con el agua que cae de su mano al hombro de Tony, y se odia por no poder detenerlas.  "Si sigues llorando así, tendré que cuestionarme que tan mal esposo soy". La voz de Tony llena el baño, y lo único que puede hacer es abrazarle, besa su cabello, y lo pega a su pecho en un intento de ocultar sus ojos llorosos. "¿Puedo saber qué pasó? Sabes que no me gustan los baños tan temprano." Sin importa la situación, Tony no pierde el humor, y eso es una de las mil cosas que enamoran a Peter.

Le explica, y se disculpa, aunque Tony le dice que no es necesario. Y se iba a disculpar una vez más pero Bruce les llama desde abajo. Le ayuda al genio a salir de la bañera, lo seca con la toalla con suaves movimientos, y Tony le agradece los detalles, pero se puede vestir solo; mientras este se viste, Peter baja a recibir al doctor, pero ya había pasado directo al improvisado consultorio. Unos minutos más tarde están los tres nuevamente reunidos, Bruce se alivia a ver a Tony completamente reanimado, y realiza un nuevo chequeo. Las manos de Peter no saben que hacer, así que busca las manos de Tony, y se aferra a ellas.

La imagen que aparece en la pantalla le corta la respiración, Peter ve como han crecido y se han hecho lugar en el cuerpo de Tony. "Gracias al cielo, todo está orden chicos. Vean cómo están de grandes. Felicidades, están haciendo un buen trabajo." El rostro de Tony merecia ser enmarcado para la eternidad, pensó Peter después de ver como sus ojos brillaban, y sonreía lleno de vida. La arruguitas al borde de sus ojos se pronunciaban. Y Peter no controlo el impulso de besarlo.

Cuando Bruce se marcha después de rechazar el desayuno, argumentando que tenía muchas cosas que hacer, deciden subir y descansar un poco más. Iban a ser las ocho de la mañana y no había plan alguno para el día. Tony se duerme rápidamente sobre su pecho. Peter se dedica a acariciar la espalda del mayoy mientras mordisquea su labio. Aunque trata, no puede evitar llenarse de miedo.

Decisión. [STARKER]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora