Matt, con un rotulador negro fino en la mano, cogió la de Hayley delicadamente, intentandole dibujar una mariposa en la muñeca.
-Es mejor que lo hagas tú, soy malo en esto.-dijo.
-Está bien. - dijo Hayley sonriendo.
Cogió el rotulador y empezó a dibujar una mariposa, debajo de la perfecta mariposa puso un nombre; ''Matt''.
Cuando este lo vió sonrió, besándola dulcemente.
- Me gustas. -le susurró al oído.
-¿Mucho o poco?- preguntó Hayley.
- Mucho es poco.
Su cara se empezó a poner roja cuando Matt se la acariciaba.
En ese momento la madre entró por la puerta.
- Hayley, el médico me llamó diciendome que querías el alta voluntaria, ¿puedes explicarme eso?
- Mamá, quiero irme de aquí, quiero llegar a mi habitación, con mis libros, por favor.
- Hablaré con tu padre a ver que opina...
Hayley abrazó a su madre alegremente, hacía tiempo que no sentía el calor de su hija.
La madre salió por la puerta con el móvil en la mano, para informar al padre de Hayley de lo ocurrido y escuchar su opinión.
-¿Y si tu padre no quiere, que vas hacer?
- Me escapo.
- ¿Y a donde te vas para que no te encuentren?
- No sé... me escondo en tu casa.
Los dos sonrieron.
- Por mi vale. - respondió Matt.
La madre de Hayley volvió a entrar por la puerta de la habitación.
- Tu padre te deja.
Hayley abrazó a Matt con una sonrisa de oreja a oreja. Era la sonrisa más dulce y bonita que Matt había visto.
Unas horas después llegaron a su casa.
La madre de Hayley se acercó a Matt.
- Matt, ya es muy tarde, ¿quieres que te lleve a tu casa?
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Butterfly
Teen FictionHayley, una adolescente de 15 años, detiene su dolor autolesionandose, pero Matt, un chico nuevo del instituto, la quiere ayudar, ya que sus sentimientos son más que una buena amistad. La curiosidad no mató al gato, pero si le rompió el corazón.