Las clases se terminan, Hayley se despide de Wendy después de que esta le diera la dirección de su casa. Se reune con Matt y se van juntos a casa, hablan sobre los exámenes de la semana que viene.
- Buf, para la semana que viene hay muchos exámenes.
- Ya... ¿que tal llevas francés?
- Bastante mal...¿y tu?
- Lo llevo bien, si quieres la semana que viene voy a tu casa alguna tarde y ya te ayudo.
-¡Si! Es que sino...
Llegan a casa de Hayley y se despiden en la puerta, esa tarde será un día largo y duro,sobre todo para algunas personas.
Hayley entra en su casa, desbloquea el móvil y llama a su madre, para que le informe que tal está su padre.
- Hola mamá, ¿que tal está papá?
- Está bastante bien, no te preocupes. Aún está en la UCI, no te dejan entrar por ser menor. No iré a casa hasta la noche que iré a ducharme y cambiarme de ropa, tienes la tarde y noche libre, a las 4 te quiero en casa... no vaya a ser que te pase algo.
- Mamá me voy a casa de una amiga...
- ¿De una amiga? ¿Enserio?
- Si mamá, de una amiga.
Los ojos de su madre brillaron, su hija nunca había ido a casa de ninguna amiga, ya que no la tenía...
- Bueno, tengo que colgar que viene la enfermera, adiós, te queremos.
- Adiós mam...- en ese momento su madre cuelga.
A las siete quedaría con Wendy, así que decidió leer para pasar el rato.
-¿Como que viene a las siete una amiga tuya? ¿Y cuando me lo ibas a decir?
- Mamá te tienes que ir, ya son las cinco y media y necesito hacer cosas para la cena.
- ¿Y dónde voy yo ahora?
- Yo que sé, fuera, venga. - Wendy empuja a su madre hasta la puerta, que empieza a llorar.
- Nunca me trataste bien, y yo te he defendido siempre...¿que te he hecho?
- ¡Que te vayas!
Wendy empuja a su madre y cierra la puerta. Tenía que hacer varias cosas aún, esa noche sería muy especial para ella.
Hayley mira la hora y se da cuenta de que son casi las seis y media, decide cambiarse de ropa, se pone una falda de vuelo negra, con unas medias negras y un jersey que le llegaba por el ombligo, pero la falda era tan alta que se lo cubría.
Se pinta un poco los ojos y se arregla el pelo.
Ya son las siete menos veinte y decide salir de casa, si no llegará tarde.
- ¿Como que me dejas?
- Ainhoa, me has puesto los cuernos con mi mejor amigo... te quería... mucho.
- Me lié con el por que me gusta más que tu, estuve contigo por una apuesta... no estoy enamorada de ti Eric, entiendelo.
- Como tienes la cara de decirme todo esto... yo si he estado enamorado... me has roto el corazón.
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Butterfly
Novela JuvenilHayley, una adolescente de 15 años, detiene su dolor autolesionandose, pero Matt, un chico nuevo del instituto, la quiere ayudar, ya que sus sentimientos son más que una buena amistad. La curiosidad no mató al gato, pero si le rompió el corazón.