Mundos de cristal

Capítulo 6

Cuando Caye abrió sus ojos observó cómo Rebe dormía a su lado, ¿Habían pasado la noche juntas? Nunca la había tenido tan cerca.

-Buenos días...- Bostezó Rebeka y también la miró. -¿Llevas despierta mucho tiempo?- Sonrió cuando negó con la cabeza, notaba lo nerviosa que se había puesto. -Das muchas patadas.

-Tranquila, será la última vez que duerma a tu lado.

Rebeka se empezó a reír con ironía.

-¿Es que piensas que yo quería hacerlo?- Disimuló.- Te quedaste dormida cuando empezó tu dichosa película.

-Despues de haber discutido contigo. Me dejaste agotada, ¿Sabes?

-Soy la única amiga que tienes, no te quejes tanto.

Suspira.

-Supungo.- Bajó un poco su cabeza avergonzada. -Se que a veces puedo llegar a ser insoportable...

-¿Solo a veces?- Bromeó un poco para que sonríese y lo consiguió, ella también sonreía cuando Cayetana lo hizo. -Tu eres tú...

-Yo soy...- La mira.- ¿Por qué eres tan buena conmigo? Después de todo lo que te he hecho no me lo merezco.

-Todos hemos sufrido suficiente, te dije que no te iba a dejar sola y no lo haré.- Tocó la punta de su nariz con el dedo. -Es una promesa.

Cayetana sintió un escalofrío por su cuerpo cuando sintió su dedo, cada vez que la tocaba le pasaba eso... ¿Era bueno o malo?

-Quiero salir de esta burbuja, de las cosas que no veo pero me hacen daño. Nunca fui feliz con Polo, pensaba que si pero no lo era. No se que es la felicidad, no la encuentro en ningún lado.

-Quizás ella te está buscando a ti, pero como vas muy rápido siempre no te pilla nunca. Tu mundo de cristal es muy pequeño, te prometo que el mundo es enorme desde fuera, no hace falta tener vistas a las estrellas para poder verlo.

-No lo sabré nunca.- Respondió convencida. -No estoy preparada para verlo.

-Cuando pase lo sabrás.

-¿Te ocurrió con Samu?

-No lo sé.

-¿Entonces por qué estás tan convencida?

-¿Y por qué preguntas tanto?

-¿Que es un mundo de cristal?- Bromeó mientras seguía preguntando. -¿Quieres que me corte al intentar salir?

-Yo te puedo ayudar a hacerlo, quizás no duele tanto si lo intentamos juntas.