[ Mía Olivia Brown es una chica diferente de 18 años, que comienza el primer año de universidad en la que conoce a las que se convertirán en sus mejores amigas, pero por unos sucesos la expulsan de la residencia junto a 11 chicos con los que tendrá...
Eran las 12 :30 de la noche y estábamos las chicas y yo en medio de la pista bailando y cantando a todo pulmón.Íbamos un poco pasadas de copas pero todavía sabíamos lo que hacíamos, por lo menos yo. De repente noto como me agarran fuerte de la cintura dándome una vuelta para ver su cara. Trago grueso cuando me encuentro con un chico uno o dos años mayor que yo mirándome de arriba a abajo.
-pero si eres la modelo ¿no?,- no contesto y el lo toma como un sí.
- Tienes un cuerpo... no puedo esperar para imaginármelo encima de mí desnudo.-dice apretando me más contra sí notando su erección que hace que abra los ojos como platos.
-¿ves como me pones?- dice acercándose para besarme, me estaba cogiendo tan fuerte que me era imposible deshacerme de su agarre cuando de repente alguien lo separa bruscamente de mí.
Veo a Ashton propinandole un puñetazo en la nariz, lo cojo del brazo para pararlo, me mira cerrando los puños hasta que sus nudillos se ponen blancos de la fuerza que esta ejerciendo. Cuando me mira noto como se relaja un poco.
-¿está es tu zorrita?,- dice el muy asqueroso recomponiendo se del puñetazo en la nariz.
Cuando escuche esas palabras me acerqué a el pegandole un puñetazo en la mandíbula haciéndole caer en el proceso.
me subo a horcajadas sobre su cuerpo dolorido y lo agarro del pelo con fuerza.
- En tu puta vida vuelvas a intentar forzar a una mujer ni a decir eso por que como me entere te juro que te corto las pelotas y me hago unos pendientes. !IMBECIL!
Me levanto y veo a Ashton con una sonrisa orgullosa, en un momento de valentía me tiro rodeando su cintura con mis piernas besándolo. Me corresponde al instante, sus labios se mueven al compás de los míos pero por una estupida razón como la falta de aire nos tenemos que separar.
Apoya su frente contra la mía mientras nos miramos a los ojos y susurra.
-¿sabías que me vuelves loco?- dice perdiendo se en mis ojos.
Sonrío volviendo a capturar su boca.
(...)
(Sonido de la alarma)
-Uff ,- digo quitando la alarma.
Hoy era el primer día de clases, y encima tenía una resaca de mil demonios y por si os lo estáis preguntando, sí, me acuerdo de absolutamente todo lo que paso ayer.
Intento despegar me de las sabana para meterme en la ducha urgentemente.
Cuando salgo abro mi armario para ver que me pongo hoy y me decido por un top rojo de tirantes unos shorts blancos y una chaqueta vaquera:
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Me hago una fina línea en cada ojo, un poco de rímel y listo.
Cuando voy a coger mi mochila llaman a la puerta, y cuando abro lo veo.
