Algunos escritores del comportamiento humano, definen las personas en la vida de otras, como aquellas que ayudan a forjar emociones, sentimientos, incluso temperamentos, nadie llega a tu vida sin dejar algo en ti, bueno o malo, nosotros como seres pensantes tenemos la posibilidad de absorberlo todo, pero al final aprender de ese todo.
Habían pasado veinticinco meses desde la última vez que Orel había visto a Hessa, nadie en absoluto le daba información de ella, ni siquiera en la policía.
Aún sentia sus sentimientos vivos hacia ella, aparte de que sus últimos recuerdos a su lado no lo dejaban tranquilo, casi todas las noches, en sus sueños se reproducían cada palabra, cada gesto que se creaba en su rostro producto de haberla tomado a la fuerza y denigrarla como lo hizo, gracias a sus impulsos.
• ¿Aún pensando en ella? (Pregunto Martin, quien llevaba varios minutos de pié, en el marco del consultorio de Orel, observando a su amigo distraído)
• No hay un día en que no la tenga presente (respondió sincero, con algo de tristeza en su rostro)
• ¿No has sabido más nada? (Pregunto mientras tomaba asiento frente al escritorio)
• Lo último que supe, fueron las grabaciones de las cámaras que dispone el edificio (le respondió a su amigo, el cual asintió, pues ya sabía esa version)
En aquellas cámaras, Hessa salía de las instalaciones a las cuatro de la mañana, descalza, sin nada, lo último que reflejan es que se perdió en un oscuro callejón.
Aquellas imágenes tocaron lo más sensible de Orel, haciendo lo que ya acostumbraba, refugiarse en el alcohol.
Sin embargo Martín, luego de varias noches de insistencia logro hacer que volviera a enfocarse en el trabajo, en donde permanecía hasta días, trabajando en la clínica, pues solo el cansancio lo ayudaba a calmar su ansiedad.
• ¿Orel... si escuchaste eso último que te dije? (Pregunto Martín sacandolo de sus pensamientos)
• Perdón... ¿qué me dijiste? (Pregunto frunciendo su seño, pues le pasaba muy a menudo estar completamente distraido)
• ¿Te preguntaba si viajarás a la cumbre en América? (Repitio la pregunta, tomando un bolígrafo y se lo tiraba para que este respondiera)
• No se... no quiero viajar (agregó serio, atrapando el bolígrafo que le había lanzado su amigo)
• Deberías ir, aparte de que tienes que ir a solucionar lo de siempre allá (insistió animandolo pues sabía quizás un viaje lo ayudaría, para cambiar un poco su estado emocional, Orel era el único que se aferraba a la idea que Hessa algún día volvería a él)
• ¿No puedes ir tú? (Le pregunto casi rogando, no quería ir a ningún lugar público ni hacer convivencias sociales)
• Orel... te estoy mandando a ti para que te distraigas y quites esa cara de culo que traes (hablo haciendo que la risa de Orel depues de tanto tiempo resonará de forma espontánea, confundiendolo a un más) ¿en donde está el chiste imbecil? (Pregunto irritado al ver que Orel, seguía riendo)
• Lo... siento... (hablo tratando de calmarse) es que... (volvió a reírse, mientras pasaba una mano en su abdomen, impacientando a su amigo, ajeno de toda la realidad) no puedo.... (cada vez que pronunciaba alguna palabra, simplemente volvía con su imperiosa risa, su amigo ya empezaba a preocuparse, estaba rojo, podría darle algún derrame, pensó preocupado, pero recordó que al final se estaba burlando de él, de alguna cosa que el no comprendía, por lo que evitó decir algo, sin embargo discretamente se tocaba la cara, esperando tener respuesta de su posible burla, quizás tenía algo en ella) ahora si (suspiro serio, tratando de contenerse) ¿de donde jodo sacaste la palabra culo?... ¿no te da pena ni siquiera saber pronunciarla?
ESTÁS LEYENDO
🅛🅘🅑🅡🅔UN AMOR MÁS ALLÁ DE UN TABÚ
Storie d'amoreLIBRE Esta es mi historia Hessa... un amor más allá de un tabú Es un melodrama, que relata la historia de una mujer, atada a los tabúes de su cultura. Hasta que por circunstancias de la vida, tiene la oportunidad de ir a Rusia, a vivir una segunda...