CAP 13

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Por fin llegaron. Era una cueva debajo de todo del monte Hakurei. Ellos Vivian en la falda del monte, donde se accedía por una cueva. Al final de esa, llegaban a una Clariana rodeada de montañas pero que se veía el sol. Estaba lleno de casas y huertos. Subiendo un camino lleno de escaleras ibas al castillo donde Misora, sus guardianas y gente vivían. Por suerte hace ya tiempo construyeron un pasillo secreto para ir dentro de la cueva donde pocos conocían por si había alguien que los quería conquistar.

- ¡¡Misora!!- Gritaron todos los habitantes refugiados mientras le daban un abrazo y le explicaban todo lo sucedido. Todos estaban muy preocupados y tristes hasta que Misora los calmó. - Tranquilos, hay gente que nos ayudará, pero no quiero que perdáis la calma porque será peor. - Su voz era serena y tranquilizadora.

Una vez dicho esto, buscaba a una persona. Al no verla con los demás se preocupó machismo. -Oye, has visto a....- y antes de terminar la frase el humano le respondió. - Está allí, parece agotada...- - Gracias- y era verdad. Allí estaba, sentada como los budas y sudando muchísimo. "Pobrecilla, debe de estar así des de ayer..." pensaba Misora - Michiko, descansa un poco, has sido muy valiente y responsable, estoy muy orgullosa de ti. Pero ahora te toca descansar, debes de llevar mucho tiempo con la barrera- - ¡Misora! qué alegría que estés bien. Tranquila, no pasa nada, aún puedo continuar- - ¡¿Cómo que aún puedes continuar?! ¡Si estas toda sudada y tu cara dice que estas cansada! Anda deja, yo me encargo de la barrera duerme un poco. Y no se valen escusas porque yo las tengo que hacer cuando estoy de guardia- - ¿Quién eres? - Preguntó Michiko atónica con la personalidad explosiva y extravertida de Ayami. - Me llamo Ayami y soy la pequeña de las guardianas de Hannon, la semidemonio del agua y hielo. Soy del Sur. Ahora que ya lo sabes descansa que me encargo yo. - Está bien...- "Nunca había visto a alguien tan... explosivo y extravertido. Acostumbrada a la gente introvertida, tranquila... Cómo lo eran los del norte los del sur parecen totalmente distintos" pensaba la guardiana del norte y tenía razón; Los del sur eran totalmente distintos. Ellos eran más extravertidos y con mucha energía. - Vamos Michiko, yo te acompaño que estoy reventada del viaje. - - ¿Y tú quién eres? - preguntó Michiko pensando que era otra guardiana mía. - Ups perdona, que mal educada soy, si no me he presentado Jajajaja, me llamo Hikari y soy una de las guardianas de Shanna la semidemonio del fuego, vivo en el oeste. Ahora que ya me he presentado vámonos a dormir que yo estoy reventada y me parece que Rin también. - - Si. - Dijo Rin. - Vaya... Yo soy Michiko encantada Hikari y Rin. - " Se be que los del Oeste también son muy abiertos. Me parece que los del norte somos los únicos cerrados... De todas maneras, me parece que me caerán muy bien las dos, parecen simpáticas y diferentes" pensaba. - Ayami, si necesitas ayuda me lo dices que te ayudo- Dijo Hikari. - de acuerdo, pero me parece que me las puedo apañar sola. Gracias y si te necesito te lo haré saber. Ahora ir a descansar que las tres estáis reventadas. - Y la verdad es que Ayami también lo estaba, pero para ayudar decidió no decir nada. Si veía que necesitaba descansar ya tenía previsto pedirle ayuda a la guardiana del oeste.

- Por favor, ¿me podéis decir que ha pasado? - - Señorita Misora, fue una tragedia- Empezó uno - Si una grande tragedia- decía otro. Como todo el mundo hablaba y Misora no se enteraba de nada pidió que callasen y que solo una persona se lo contara. Al final, después de muchos intentos lo consiguió. - Señorita Misora... No te puedo decir lo de todos, pero si mi versión. Yo estaba tendiendo la ropa mientras que mis hijos y su padre estaban en el río cazando peces para la comida. De repente muchísimas nubes grises taparon el sol y había un viento muy fuerte. Eso no duró mucho porque empezaron a salir demonios y nos atacaron. Había una señora con un... Un vano que parecía que hiciera remolinos y corrientes de aire que mataban. Me asusté mucho, pero por suerte mi familia estaba corriendo hacia casa. Me alegre mucho al ver que estaban bien pero aún estaban en peligro. Entonces... Cuando, estaban a punto de llegar la chica del vano mató a uno de mis hijos. No supe que lo mató hasta que entraron mi otro hijo y mi marido. - Dijo un demonio llorando. - Otra cosa- Interrumpió otra voz. Esta vez era un hombre humano. - Dime- respondió Misora. - Yo estaba en el huerto recolectando verduras para la comida cuando vi los demonios y fui corriendo hacia casa. Mientras iba hacia allí vi a una niña pequeña que iba toda de blanco y con un espejo. Nunca la había visto pero pensé que era una nueva del pueblo así que decidí decirle que viniera conmigo. Suerte que no lo hice porque vi como ese espejo se tragaba algo blanco de las personas, semidemonios y demonios y se caían al suelo. Parecía que les robara el alma. Corrí todo lo que pude hasta encontrarme con Michiko que me dijo que fuera con ella y eso hice. - - Espera, ¿has dicho una niña de blanco con un espejo? - Misora estaba alarmada. - Si, yo también la vi. - Dijo varia gente. - Hikari, Ayami, Rin, Michiko quedaros aquí, me tengo que ir. No os mováis de aquí ¿entendido? - Y salió corriendo hacia el campo donde habían quedado para explicar a sus compañeras.

El secreto de Shikon (I parte) [Completa] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora