Sasuke estaba furioso. Muy furioso, como nunca antes.
Lo peor es que ni siquiera sabía exactamente qué era eso que lo hacía enojar tanto.
Apretó los dientes con desdén, luego enterró los dedos en el vaso de su bebida, sin darse cuenta hasta que el cristal logró quebrarse en diminutos cachitos y el líquido carmesí del vino corriera por su mano.
Agh. Gruñó cuando notó a Ino Yamanaka hablándole al oído a un hombre corpulento y con apariencia mediocre. Demasiado cerca.
Ese ninja, prácticamente, se la estaba comiendo con los ojos, e Ino reía encantada como si no le importaran las miradas lascivas que el chico de cabello castaño le dedicaba.
Agh. Qué tonta. Yamanaka era tan tonta.
Sasuke pidió un trago más, sin despegar en ningún momento los orbes de Ino. La estaba analizando a detalle, tratando de entender su manera de actuar, aunque para él, Ino era la chica más complicada de comprender. Era por demás, estaba al tanto de que a la rubia le maravillaban todo tipo de atenciones, y que además siempre capturaba todas las miradas, igual que una princesa de cuentos.
Precisamente eso era lo que más le molestaba. Pero también, la forma en que ella le sonreía al tipo y bromeaba con él. Evidentemente, Ino ya sabía que él la estaba vigilando, y aún así se comportaba como una niña mimada.
Tomó un trago y todo su autocontrol se fue en picada cuando notó que los dedos de aquel desgraciado se posaron en el muslo de ella.
Eso sí no lo iba a permitir.
Sasuke se puso de pie con la misma velocidad que un rayo, empuñando la mano con fuerza. Tenía muchísimas ganas de partirle la cara a ese sujeto, e iba a disfrutarlo con ganas cuando le rompiera un par de huesos. Oh, sí. Ino pensaría dos veces antes de coquetear con cualquier otra persona, pero francamente, eso no le importaba en lo más mínimo; lo que la rubia -cabeza hueca hiciera o dejara de hacer no era de su incumbencia. Por supuesto que no. Solamente le daría una lección para que ella no perdiera de vista la relevancia de su deber.
Sin embargo, no podía permitirse caer tan bajo, con su imagen apenas restaurada en su aldea, era muy riesgoso causar un nuevo conflicto, y Uchiha ya tenía bastante fama como asesino antes de la guerra y de su etapa como joven vengador.
No tenía opción, al menos esa noche no podría golpearlo.
Suspiró dentro de sí, escuchando los pasos de un camarero inexperto que cargaba una bandeja con tarros de cerveza. Entonces una sonrisa maléfica surcó por los labios de Sasuke.
Aprovecharía que Ino y aquel estúpido se encontraban tan concentrados en su plática, y al verlos de reojo, Sasuke sintió deseos de vomitar. Para su suerte, ellos no estaban tan lejos.
Cuando el mesero pasó cerca de él, Sasuke le puso el pie despistadamente, y lo siguiente que ocurrió fue un caos. El joven tamborileó graciosamente tras tropezar, poniendo su mayor esfuerzo por mantenerse firme, pero finalmente logró caer.
Sasuke ahogó un grito triunfal cuando los tarros de cerveza empaparon por completo al otro ninja, coloreando rápidamente su cara de rojo por la ira y arremetiendo contra el pobre servidor. Otro ninja se metió para defender a la víctima y allí las cosas surgieron de acuerdo al plan. Comenzó una pelea a la cual se sumaron otros ninjas más, y de pronto, todo el bar estaba inmerso en una fuerte contienda, destrozando las sillas, las mesas y las paredes.
Ino se quedó estática. La oportunidad perfecta para Sasuke.
La tomó del brazo y la arrastró consigo, para su gusto Ino seguía en shock, cosa que él agradeció infinitamente. Sin saber cómo, llegaron hasta la habitación del azabache en la posada.
—¿Qué demonios haces? —gruñó la platinada mientras Sasuke le daba la espalda—. ¿Creíste que no notaría lo del mesero?
Sasuke frunció el ceño.
—Te salvé de una pelea. De nada —rugió, conteniendo parte de su rabia. Todavía seguía molesto, ¿e Ino se iba a poner a enfrentarlo? Debería estar bien loca.
Escuchó a la ojiazul insultarlo a través del lomo. ¿Por qué se enojaba si ella era la culpable?
—Cometiste un grave error, Sasuke Uchiha. ¡Estaba a punto de obtener información muy valiosa de ese ninja!
Él rodó los ojos.
—¿Utilizas el coqueteo para obtener información? Hmp.
—¡Pues sí! —gritó ya alterada—. ¡Tu deber es de acompañamiento. Mi misión es de seducción, Uchiha-idiota! ¿Se te olvidó?
Toda la sangre se agolpó en la cabeza del ex renegado.
—¡Largo!
Esa chica lo sacaba de sus casillas de forma infernal. Simplemente no recordaba cuándo Ino se volvió tan agresiva con él, ni mucho menos sus razones.
—Primero responde. ¿Qué demonios tratas de hacer? Te comportas muy extraño, y es odioso.
¿Odioso? Sasuke rió silenciosamente. Ella qué iba a saber sobre ser odioso. Ino Yamanaka era la reina de las odiosas.
Se dio la vuelta, irritado hasta la punta de los pies, dispuesto a sacarla de su cuarto de un solo movimiento. Pero miró directo a los ojos de Ino, y se perdió. Se perdió plenamente.
La besó con deseo en los labios, rodeando los brazos de Ino para evitar que se alejara, mas Ino correspondió al beso con la misma intensidad y la misma ambición desbordante. Sasuke ya no pudo pensar con coherencia, sino que se entretenía descifrando el sabor de la boca de Ino. Sabía a frambuesa. Se lamió los labios y continuó, mientras que Ino se pegaba a su cuerpo, Sasuke soltó sus brazos para acariciar su cintura y sus pechos por debajo del top.
Y entonces lo supo, el porqué él estaba molesto y por qué ella lo evitaba a toda costa. Ese beso se lo comprobó.
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Fecha original: Sep 13, 2019.
Créditos al autor de la imagen.
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Memories [Ino Multishipper]
FanfictionColección de Drabbles y One-Shots independientes. Multishipper. Ino x All "Por cada página en blanco, prometo escribir una memoria. Un recuerdo nuevo formado entre líneas". Durante más de diez años me he encargado de escribir todo acerca de Ino Yama...