Capitulo 12

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En la madrugada empezó a llover un trueno ilumino la habitación y despertó a Fernanda, vio en sus brazos a su hijo y sintió una tristeza repentina, se había perdido de muchas noches de tenerlo así, verlo caminar, sus primeras palabras, acompañarlo al colegio; un hombre le había quitado todos esos momentos, besos la frente de Pedro e cerro los ojos tratando de guardar ese momento.

Casa de Miguel

Miguel había llegado a su casa con su novia que ahora dormía a su lado, no había conciliado el sueño, por su cabeza solo pasaban las imágenes de Fernanda, era una mezcla de sentimientos, recordaba cuando eran niños y la conoció como quedo enamorado de ella, cuando fueron creciendo tuvieron un noviazgo a escondidas, como los dos fueron a estudiar a Sao Paulo carreras diferentes pero en la misma universidad y sin que sus padres supieran se fueron a vivir juntos, el momento en que Fernanda llorando con miedo le contó que estaba embarazada, el día que nació Pedro, el encontrar una carta donde le decía que lo dejaba y después verla con esposas en sus muñecas asistiendo al juicio.

Todos esos recuerdos le quitaban el sueño, la verdad era que por más rabia que había tenido en su momento la amaba, quería mucho a Lucia pero no se comparaba con los sentimientos hacía Fernanda, se levantó de la cama y se dirigió al estudio de la casa que estaba en el primer piso, abrió uno de las cajones que tenía con llave y saco unas fotos de Fernanda, tenía 18 años como era que después de todo lo que habían pasado seguía amándola.

Todos esos recuerdos le quitaban el sueño, la verdad era que por más rabia que había tenido en su momento la amaba, quería mucho a Lucia pero no se comparaba con los sentimientos hacía Fernanda, se levantó de la cama y se dirigió al estudio de la ...

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-Miguel-

-Papá por que despierto a esta hora-

-Escuche ruidos y salí a mirar quien era-

-Que haces acá-

-No podía dormir-

-Fernanda-

-No, papá para nada-

-Esa foto que tienes en la mano no es de ella-

Miguel tomó la foto y la guardo en el cajón

-Miguel, yo te he visto pasar por muchas cosas por culpa de Fernanda, tú sabes que yo no le guardo rencor, pero no es la mujer para ti y eso ya lo probó-

-Papá, yo estoy con Lucia y me voy a casar con ella, no entiendo por qué me dices esto-

-Miguel, te conozco muy bien para saber que esta pasando por esa cabeza-

-Me voy a dormir, tengo que ir mañana a la oficina por los días que estuve afuera-

-Está bien, descansa-

Miguel subió a la habitación y se quedó por un instante en la puerta viendo a Lucia dormir, que confusión tan terrible había causado Fernanda con su llegada.

Pedro despertó temprano y vio a su mamá mientras dormía, su cachete izquierdo y el labio estaba un poco inflamado y rojo, su cuello estaba con manchas moradas y rojas y se veían lo que parecían dedos, pensó que era mejor dejarla dormir un poco más y salió de la habitación encontrándose con su abuelo y Casilda.

-Despertaste temprano- dijo Anibal

-Fernanda esta durmiendo todavía, le estoy preparando un desayuno delicioso-

-Si, quería llevarle el desayuno a la cama, esta bien-

-Claro que si- Casilda alisto una bandeja y puso el desayuno para que Pedro lo llevará

Regreso a la habitación, dejo la bandeja sobre la mesa y empezó a acariciar su frente, para despertar a su mamá, Fernanda se movió y abrió los ojos para encontrarse con la sonrisa de su hijo, que despertar más maravilloso

-Perdón por despertarte-

-Pedro, fue un maravilloso despertar-

-Te traje el desayuno-

Pedro acercó la bandeja, Fernanda se sorprendió

-Todo esto es para mí-

-Si, te tienes que alimentar bien, no quiero que regreses al hospital-

-Pedro ya me siento mejor, voy a estar bien-

Fernanda desayuno, tomo un baño y se alisto para salir con su hijo, tenían una conversación pendiente

-Estoy lista- dijo Fernanda entrando a la sala donde esperaban Pedro, Aníbal y Casilda

-Hija, estas hermosa, como te sientes-

-Papá yo estoy bien, voy a ir con Pedro a la playa y regreso más tarde-

-Hija, ten esto- Aníbal entregó dinero para Fernanda

-Papá-

-Hija, por favor, vas a salir con Pedro y además puedes comprar ropa de tú gusto, o lo que quieras-

-Es demasiado, no puedo-

-Fernanda, no olvides que tú sigues siendo dueña de la hacienda y todos estos años yo estuve al frente de tú parte, pero ese dinero es tuyo y tú ya puedes tomar tu lugar de dueña-

-Gracias-

Fernanda dio un besos a su papá, se despidió de Casilda y salió con Pedro, empezaron a caminar a la playa, sabia ese camino de memoria pero habían muchas cosas diferentes, la ciudad estaba moderna, había semáforos donde antes no había y muchos negocios nuevos, al llegar a la playa Fernanda se quitó los zapatos y sintió la arena debajo de sus pies, como extrañaba esa sensación, empezó a caminar hacia el agua y dejó que las olas la tocaran, el agua estaba un poco fría pero el olor, el calor que empezaba a sentirse le dio mucha felicidad, el mar era de sus cosas favoritas y estar de nuevo ahí le daba mucha felicidad, Pedro observaba sentando en la arena a su mamá, ahora todo tenía sentido era tan parecido a ella, muchas veces se preguntó si todas esas cosas que le gustaban pero no compartía con su Papá era por su mamá y ahora lo comprobaba.

Fernanda se giró y vio a Pedro sentando, observándola, camino hasta donde estaba

-Te tengo que llevar a mi lugar favorito de Puerto del Cielo, se puede ver el mar desde la altura-

-Yo sé dónde es, mi papá me llevo, me contó que solían escaparse a ese lugar, es de las pocas cosas que me contó de su relación-

-Claro-

-Mamá, yo se que no es fácil, pero me puedes contar porque te fuiste-

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