───── Los negocios, la ambición
y la familia hacen mala combinación
pero aunque ninguno estuvo de
acuerdo ambos no pueden dejar de
sentirse atraídos.
──
+𝟏𝟖
──────
𝐭𝐢𝐦𝐨𝐭𝐡𝐞𝐞 𝐱 𝐨𝐜
────────
𝐭𝐨𝐝𝐨𝐬 𝐥𝐨𝐬 𝐝𝐞𝐫...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
▪︎▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▪︎
OO2. La chica misteriosa
Llegamos a la fiesta, me puse la peluca negra en un callejón oscuro, entramos y era genial, estaba oscuro pero había luces de colores iluminando el techo y esto hacia que se notará un poco a las personas, casi no se escuchaba lo que decían, todos estaban bailando.
Había un grupito al fondo que al momento reconocí, noté que junto de mis amigos estaba otro grupo, pero no los conocía.
Nos acercamos a nuestro grupo y comenzamos a platicar estupideces y cosas sin sentido.
- Bueno, ahora que estamos completos, que comience la verdadera diversión -opinó Jack.
Fruncí mi ceño.- ¿Shots? -pregunté.
- Si, pero le añadieron un toque de "vida" -sabía a lo que se refería.
- Bueno, dame uno de esos -Jack le hizo una señal a una mujer mayor y comenzó a repartirnoslos conforme nos los daba los tomábamos.
Cuando me lo dieron en un baso tequilero, lo probé y era bastante fuerte. Fruncí mi ceño intentando encontrar el sabor o la "vida" ya que era un sabor extravagante.
Al llegar al punto de él vaso comencé a sentir cosquilleos en mis labios y en mi garganta.
- Esto si está fuerte -me dijo Sadie.
Asentí. Mi mente comenzó a pensar en Griffin. Ese tarado estaba en la fiesta y no me quiso hablar.
Lo busqué con la mirada y estaba en el grupo de a lado.
Miré a todos los de su alrededor pero hubo uno que llamo demaciado mi atención, se notaba con la poca luz que era castaño, ojos verdosos, alto y delgado.
- Dame otro -le pedí a Asher.
Frunció su ceño- ¿Segura?, Porque yo solo llevo uno y ya me siento algo alumbrado -rió.
- Solo dámelo -ordené, levantó sus manos en señal de paz y me dió uno.- Gracias caballero -le guiñe el ojo y de nuevo me fuí junto a Sadie.
- Sadie, iré por un chico, cúbreme -asintió
- Solo no olvides que daremos un baile -le sonreí y tomé del pequeño vaso. La música comenzó a hacer eco y escuchaba mi respiración.
