3. Una ida...¿sin vuelta?

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-Y...¡listo!- coloco la última prenda de vestir en una pequeña maleta de mano. Para su suerte todo había salido como el quería. Como lo dedujo anteriormente, su jefe aceptó con entusiasmo el reemplazo que le haría su mejor amigo, mientras que Shion rogaba que ese hombre no lo sacara de quicio.


Faltaba media hora para que tomará el tren con destino a su antigua ciudad. La pelimorada ya le habia confirmado su presencia en la estación.


Si ustedes se preguntan o más bien, si le preguntarán a él ¿Era esto algo realmente importante? Para él, no, no tanto. El mundo de la moda y el estilo  no era de su interés, el podría usar ropa deportiva y de escala de colores que solo variaban entre el gris, blanco y negro, mientras fuera cómodo y fácil de lavar era perfecto. Pero su amiga, ella era totalmente opuesta. Estaba tan enamorada de la moda, la ropa, las pasarelas y Albafica no le daría una negativa, además el la consideraba una joven muy bella y estaba seguro de que con su belleza y carisma lograría su tan ansiado sueño.


- 20 minutos - se dijo a si mismo mientras controlaba la hora por su teléfono, por suerte no era tarde. Tomó las llaves y aseguró todo lo posiblemente asegurado, dejaría las llaves debajo de la maceta que contenia un cactus que estaba en el pasillo del departamento. Shion debía regar sus plantas, otro favor mas anotado a su gran lista de favores a deber. Cerró la puerta sintiendo una nostalgia prematura, vaya que extrañaría su hogar, aunque sea por tres días.


                            ~🍒~


Sentía unos nervios extraños, su emoción era incomparable, tenerlo con ella de nuevo era una bendición, pues sólo el le transmitía seguridad y si el estaba en el casting estaba más que segura que podría ganar y cumplir su tan ansiada meta. El sonido agudo del tren y una voz saturada por un parlante anunciando la llegada del tren la sacó de sus pensamientos y activó las endorfinas de su organismo. Su amigo, su mejor amigo estaba aquí. Una oleada de gente se acumuló en la estación y la muchacha a duras penas pudo divisar la figura de su amigo. Traía un buzo gris claro junto con un pantalón estilo joggin del mismo color y una zapatillas blancas. Sasha pensó que era un total desperdicio que su amigo desaprovechara su increíble belleza al usar ropa tan aburrida según ella.


-¡¡ALBIII!!- la joven levantó su brazo sacudiendo la mano euforicamente y el peliceste reconoció de inmediato la voz de su amiga.


-¡SASHA! ¡Cuánto te extrañe boba!- Albafica camino en dirección hacia la joven y la contuvo en un cálido abrazo de amistad. La persona que los viera pensaría que son dos hermanas separadas al nacer.


-¡Yo también! Lamento no haber ido a visitarte pero estuve tan atareada.


- No te disculpes boba,esta bien, además estoy aquí y te ayudaré con lo que sea- el peliceste agregó sonriendo dulcemente.


-¡Qué bueno que estas aquí! Eres el único en el que puedo confiar y se que si me acompañas tendré ese casting más que asegurado- se podía apreciar desde kilómetros el entusiasmo de la chica- por cierto, hay tiempo aún, el casting será mañana por la media tarde, así que bueno me da tiempo para arreglarme- dijo zarandeando su cabello con aire de superiodad que Albafica tomó con gracia.


-Bien pero debes saber que de moda, ni idea. Hasta el cactus de mi depa tiene más estilo que yo- bromeó Albafica, el amaba su manera de ser y eso tambien aplicaba a su forma de vestir.


- Ay pero albi, no me digas que en ese bolsa traes ropa como la que llevas puesta ¿No?- la chica demostró su descontento y Albafica se apresuró a responder.


-Claro, sólo serán tres días, no necesito nada más, además el casting lo harás tu, no yo.


-Pero alba, esa gente es de la alta, si vas a ser mi acompañante debes empezar a verte como ellos.


- ¡AY, NO! Sasha, estoy perfecto asi- la chica lo había tomado del brazo casi arrastrandolo hasta un parada de taxis.


-¡Ay, si Albafica! Si serás mi acompañante deberás vestirte como tal, dejaremos tus cosas en mi depa y ¿adivina que?...Iremos...¡DE COMPRAS!- el chico ya se daba una idea de lo que se avecinaba.


-¡Oye! Pero no traje tanto dinero- un taxi se paró en frente de ellos, la chica ya estaba entrando al vehículo, detrás de ella su amigo y el taxi emprendió marcha, con el taxista algo confundido sin saber a dónde ir.


- No te preocupes por eso, mi padre me dio una extensión de su tarjeta.


-Ejem..señorita.


-¿Qué? Ah, si, Calle Agras 25.


- No quiero tener que deberte Sasha, suficiente con Shion- pensó melancólicamente en su amigo.


-Ya te dije que no te preocupes, no me debes nada, todo sea por el buen gusto- la chica dejó escapar una leve risilla, era imposible decirle que no.


- Ahh, okey- Albafica suspiró y dejó descansar su espalda en el asiento. Para él, su estilo era lo de menos, después de todo tenía un buen trabajo y buenos amigos, estaba seguro que dentro de unas semanas y cuando todo fuera totalmente estable y un trabajador o trabajadora social lo aprobará, sería feliz junto con su pequeño hermano, Dita. Pensar en él era lo que lo mantenía firme y con voluntad.



~🍒~


Buenas, sep, volví ( a nadie le interesa ya se :(

Como verán voy a ir introduciendo a nuevos personajes y aquí una clave que sería Afrodita.

Algunos datos y aclaraciones:

Dita, es el diminutivo que voy a usar para Afrodita.

Dita tiene 10 años de edad y no se encuentra actualmente en Grecia.

Dita tiene 10 años de edad y no se encuentra actualmente en Grecia

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