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LLEVEMOS JUNTAS SERENATA PARTE II #6

30 años después

Camila POV

Estaba saliendo de la empresa, iba derecho a comprar algo de cenar, entro al restaurante de comida china, frente al edificio donde trabajo. Salgo y veo a alguien conocida justamente pasando por la entrada.

-¿Dinah?-pregunto con duda y ella se detiene.

-Pero si es Camila Cabello-menciona y nos fundimos en un abrazo.

-Oye, hace años que no te veo-le comento-La última vez que te vi fué unos días después de mi boda con Lauren-le digo y sonrío.

-Sí, lo sé-dice rascando su nuca.

-Vamos, te invito a una copa-niega.

-Lo siento, no debo tomar alcohol, tuve un tiempo horrible por él-asiento.

-Pues entonces vamos a mí departamento y prepararé algo de café ¿Ya cenaste?-niega.

-De hecho a éso venía por acá-comenta.

-Tengo comida suficiente aquí, si quieres puedo compartirla contigo-asiente y caminamos-Mi departamento no está muy lejos-le comento.

Llegamos a mí departamento, ella entra seguida de mí, enciendo la luz y nos dirijo a la cocina.

-Bien, déjame te ayudo a servir-dice y saca los platos, comienza a servir y yo enciendo la cafetera.

Nos sentamos a degustar la comida chica mientras hablamos de nuestra infancia, de lo que solíamos hacer.

-Déjame sirvo el café, si quieres puedes ir al living, yo llevaré el café y algunas galletas-le digo, ella asiente y yo comienzo a preparar el café.-Bien, aquí está-toma una taza y coloco la bandeja con las galletas en la mesita de café.

-Cuéntame ¿Dónde está Lauren?-me pregunta.

-Pues nos divorciamos-le digo con un deje de tristeza.

-Seguro te dejó por ser infiel-comenta tratando de animarme y niego-¿Recuerdas que yo le mandaba rosas?-asiento-Pero la conquistó más un clavel-reímos por éso.

-Cierto, éso lo recuerdo tan bien, caí a la piscina ése día y Michael casi nos mata a las dos por éso-reímos.

-Sí-dice-Llevamos juntas serenata hasta su balcón-recuerda.

-Tu llevabas tú guitarra y yo ésas maracas viejas que estaban en el sótano de mi casa-reímos juntas.

-Recuerdo que Lauren tenía 15 años  en ése entonces.

-Cierto y nosotras teníamos 16-suspiro.

-Aún no dejo de reír que yo con ésa guitarra y tu ésas maracas, sufrimos muchos resfriados por Michael y sus baldes de agua fría-reimos de nuevo al recordar.

-Sólo por ser mi amiga te confieso-digo y veo mis manos.

-¿Qué pasa?-pregunta algo preocupada.

-Pues es que me divorcié, más nunca la olvidé. Extraño sus ojos y quiero tenerla de nuevo conmigo-suspiro-La amo más que cuando me casé-digo triste, ella pone una mano en mi hombro en forma de apoyo.

-Llevemos juntas serenata, juntas hasta su balcón, yo la guitarra y tu las viejas maracas-hace un movimiento en sus manos, junto a sus hombros, indicando el movimiento de las maracas y reímos.

-No creo que funcione-digo con desánimo.

-Antes funcionó ¿No?-asiento.

-Ahora somos mayores, Dinah y nuestro matrimonio acabó por mí falta de tiempo a ella-le digo haciendo una mueca con mis labios.