Capítulo 11

1.6K 339 45
                                    

En la granja había una inquietante tranquilidad que rodeaba para todos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

En la granja había una inquietante tranquilidad que rodeaba para todos. El clima estaba cálido y los animales disfrutaban del día. HoSeok se distrajo un momento apreciándolos, en los años que lleva viviendo nunca había estado en un lugar así. Le agradaba este sitio pero no debía adaptarse a el, en cualquier momento podrían irse.

Su conducta cambió drásticamente, ya no estaba renegando como antes, solo escuchaba a los mayores hablar sobre lo que harían respecto a él. El saber sobre sus padres seguía sin respuesta, nadie le quiere decir lo que pasó con ellos pero ya lo supone. Nadie puede llevar una vida pacífica con tantos enemigos alrededor, nadie puede ver triunfar al otro por envidia a no llegar a ser exitosos como ellos.

Ahora, el mismo respondió la pregunta que le había hecho a su amado padre días antes.

—Padre, ¿por qué siempre tienes a hombres entrenando en nuestro jardín?

—No es de tu incumbencia, Hoseok.

Los preparaba para este tipo de tragedia. En el fondo le dolía que su padre nunca confió en él. Le dolía que no pudiera compartir tantos momentos con él. ¿Su padre alguna vez estuvo orgulloso de él? La vida de los ricos nunca fue perfecta, no es esa típica familia feliz como se presentan en las series. Se sorprendería saber si lo hubiera.

Lágrimas silenciosas caían bajo sus ojos. No recuerda alguna vez en la que su padre le dijo que lo amaba. Las acciones dicen más que mil palabras pero, ¿qué acciones hizo Daehyun para demostrarle el amor que sentía hacia su hijo?

Entrenar a alguien para que cuidara de él.

Ese hombre no le agradaba en lo absoluto. No le agradó su forma de hablar con él. No respondía ninguna pregunta. ¿Si seguía todas las órdenes de su padre quiere decir que ahora está al cuidado de él? No se imaginaba estar todo el tiempo a su cuidado, también se nota que él tampoco quiere hacerlo.

¿Por qué aceptó una vida así?

Pasos se escucharon detrás de él pero decidió no voltear para ver. Rápidamente se limpió las lágrimas que habían quedado para disimular el no haber llorado. Odia que lo vean en un estado frágil. HoSeok siempre ha sido orgulloso con un fuerte carácter, nunca dejaría ver su lado débil.

TaeHyung se posicionó al lado de él y le entregó un vaso con agua. Supuso que HoSeok había llegado a tener sus propias conclusiones acerca de sus padres cuando vio su pequeño cuerpo temblar.

—Toma, para que te mantengas hidratado.

HoSeok agarró el vaso y lo quedó viendo.

—No le pusimos veneno, tranquilo —dijo TaeHyung.

¿Debería confiar en ellos? No le quedaba nadie ya. No quería confiar en nadie. No dan respuestas a sus preguntas, no hablan con él. De algún modo pareciera que estuviera secuestrado, se sentía excluido de todo.

Decidió tomar del vaso, realmente tenía sed y hambre pero no pediría nada a ellos.

—Gracias.

TaeHyung vio fijamente al pelirrojo con sus duros ojos. HoSeok al sentir su mirada también giró para verlo. Parecía una guerra de miradas pero HoSeok no se dejaba intimidar por nadie y no pensaba perder. Al cabo de un rato volteó su mirada donde se encontraban los animales y suspiró. Tenían razón, parece juego de niños.

El mayor escuchó un auto detenerse fuera de la caseta y visualizó el alrededor en busca de acompañantes. Era JungKook y había logrado escaparse de los hombres de Hyung-Sik.

Volvió su mirada a HoSeok y le dijo:

—No te muevas de aquí.

HoSeok rodó los ojos pero asintió a sus palabras. No le importaba quien hubiera llegado. ¿Atacantes? ¿Qué más da si lo matan? No le queda nada en esta vida.

TaeHyung buscó a YoonGi y con señas le dijo que vigilará cualquier movimiento de HoSeok para que no se interponga entre ellos.

Fuera de la casa se baja JungKook de su auto estirándose un poco ya que tenía los músculos tensos. Aspiró el viento que resoplaba contra él y sonrió. Rodeo el auto para abrir la puerta trasera donde se encontraba un inconsciente JiMin amarrado y recostado en los asientos. TaeHyung vio el cuerpo y después volteó a ver a JungKook.

—¿Qué? Ya sé que soy guapo.

TaeHyung gruñó y agarró el cuerpo del chico.

—Jodido idiota, te dije que lo trajeras consiente para las preguntas.

JungKook lo miró indignado.

—Harías lo mismo que yo si estuvieras con él encerrados en un auto después de este desastre. ¡No paraba de hablar!

Ambos cargaron el cuerpo y lo llevaron dentro para sentarlo en una silla y amarrarlo por igual para evitar que se escape.

—Hasta Jung fue más tratable.

JungKook arqueó una ceja y sonrió de lado.

—Entonces la próxima vez me llevaré a Jung.

TaeHyung lo miró mal.

—De ninguna jodida manera. 

Espero les guste

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Espero les guste. Cualquier duda comenten  Besitos, cuídense y no salgan si no es necesario.

—Jhanosky

Protección; vhopeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora