Después de que Conway reclutara a una nueva cadete en su cuerpo de policía, todo parece ir bien.
Sin embargo, en la ciudad debido a la corrupción e ilegalidad siguen habiendo problemas; los cuales comienzan a verse solventados ante una organización...
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( 🌺 ) Si te dijera dónde he estado, ¿Todavía me llamarías bebé? Y si te dijera todo, ¿Me llamarías loco?
La patrulla cruzó la calle hacia el otro lado, cambiando completamente su rumbo para dirigirse hacia la comisaría. Noa había dicho y convencido de una manera milagrosa al superintendente de volver a una zona segura, a resguardarse en un lugar como lo era la comisaria; donde estaba prácticamente lleno de policías y cámaras filmándolo todo sin ningún punto ciego.
Noa bajó del patrulla de Conway una vez esta aparcó en el aparcamiento privado de la policía. Mientras el superintendente se disponía a guardar su vehículo para evitarse que cualquier otro agente lo usara sin su consentimiento, ya que, era una de las cosas que no toleraba en lo más mínimo.
Noa se apresuró para enviar un mensaje a Dark Star y avisar de lo que había visto anteriormente. Pues no estaba segura sobre lo que era exactamente, y podía jurar que la camioneta que tenían detrás de ellos tomó otro camino, sin embargo fue reemplazado por otra igual que le seguía con una distancia de dos autos por en medio.
Luego cuando la patrulla giró hacia la esquina de la comisaría, esta siguió recto. Y Noa había deducido que buscaban secuestrarlo nuevamente, por segunda vez en el mes. Y lo más posible era que, buscaban que Conway estuviese solo para no tener que lidiar con otra persona más.
—Vamos adentro. —avisó el de camisa blanca apareciendo frente a ella, haciendo que le observase por unos segundos antes de seguirle el paso.
(...)
—Pero a ver, —habló Noa, tratándose de calmar.—¿¡Cómo que no ves movimiento!?
—No hay. Desde la ultima semana que nos reunimos, los movimientos se detuvieron. —habló Lucas.—Tienen a los chicos en el mismo lugar, no los han movido. Y no les conviene. No sé qué mierdas es lo que buscan hacer, y la mamada que estén planeando no pinta bien.
Noa frunció el ceño, quitando la vista de la pantalla de su celular y dejando de ver los cientos de memes que aparecían en el modo "Explorar", notando como si dos ideas se conectaran entre sí dentro de su mente.
