Capítulo 6 - Universo alterno

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Desperté sudando en mi cama, no podía dormir con ese vacío dentro, estaba lloviendo como si el mundo quisiera acabar. La oscuridad estaba rodeándome y pasé del calor violento al sabor del frío que me refrescaba. Tomé una camiseta del closet y caminé escaleras abajo, iba con sudadera y descalzo así que tomé mis zapatillas deportivas antes de bajar. Mi cabello estaba totalmente desorganizado se estaba convirtiendo una costumbre traerlo así; tenía los ojos hinchados, estaba viendo muy borroso. Tomé las llaves del Toyota y subí en él. La puerta corrediza se abrió y el suave sonido del radio al encender el auto me envolvió. Tantos años de estudio pianístico han agudizado mi sentido del oído. Avancé dejando atrás la casa, el camino estaba oscuro totalmente y las luces altas apenas permitían ver algunos metros delante.

Ya son cuatro noches en las que me levanto de la misma forma y mis ganas de dormir se disuelven entre los minutos en los que tomo algo de ropa e intento despejar mi mente saliendo de casa. Nuevamente estoy aquí, recorriendo el camino desolado hacia el mirador de la zona en donde vive mi familia. Han tenido aquella casa solo unos cuantos años, antes vivíamos en otra ciudad hasta que mis padres por cuestión de negocios cambiaron su residencia por la tranquilidad que la actual ofrecía. Aparqué el coche de frente al borde del mirador, permanecí inmóvil mirando la ciudad a través del parabrisas del coche. El radio del coche se había conectado a mí al Spotify del IPhone al subir, se escuchaba una pieza de piano que me recordaba la palabra reminiscencia. El apretón en el pecho regresó nuevamente, abrí la puerta ahogado y caminé hasta el borde del barranco. La lluvia era ahora más ligera y se había aclarado la noche. Han pasado solo un par de meses y todavía parece que hubiera sido ayer. Eso sonaba muy cliché, pero aun así era la realidad. Necesito respuestas. Me acerqué demasiado al borde y se desboronó un poco cayendo al vacío. La ciudad me calmaba, aunque sabía que era inevitable ignorar lo que sucedía y por más que quisiera no lo podría dejar ir.

Realmente podía sentir aquella presencia todo el tiempo, y parece que nunca voy a dejar de sentirla. Gira alrededor de mi cabeza la mayor parte del tiempo, los cambios recientes debían haber ayudado, eso dijo James. No está funcionando, en absoluto, necesito regresar.

Escuché un vehículo venir sobre la carretera, luego el sonido pareció alejarse y cuando pensé que se había ido las luces se iluminaron hacía mí.

Nota: Obra para piano. Frédéric Chopin. Nocturne No. 20 in C-sharp minor.

Preferible que usen audífonos, cierren los ojos y silencio total.

Una estrella en el mar del cieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora