DEPRESSION→ [Kang Daniel y tú] «Terminada»

Capítulo 9: "Adiós... ¿Despedida?"

Decidí dejar de mirar a esos tipos y seguir con mi camino, quería salir de allí rápidamente, no quería sentirme vulnerable otra vez, ya no quería eso para mi vida. Caminé a paso rápido hasta que llegué a un apartado dónde alquilan apartamentos a buen precio, entré y hablé con el dueño del lugar, me mostró unos cuántos apartamentos que tenía, no eran tan grandes y tampoco tan pequeños, eran perfectos para una sola persona, hubo uno que me gustó mucho y opté por preguntarle por ese, me dijo que sí podía alquilarlo, solamente tenía que esperar unos días a qué esté listo para que alguien habite en el lugar, sin más estreché la mano del señor y retomé mi camino a casa de Daniel, debo admitir que no quería ir, se que estará esa mujer rondando por la casa, lo que menos quiero es cruzarme con ella, pero por desgracia es algo que debe suceder.

—

Llegué a la casa de Daniel, sin embargo aún no entré, he estado afuera mínimo unos 20 minutos pensando en si debería entrar o no, no me sentía bien para entrar, pero debía hacerlo, ya estaba comenzando a hacer frío y no sería buena idea enfermarme, sin más vueltas entré encontrándome con Sook en la sala viendo televisión con Daniel junto a ella, ambos estaban abrazados, cuándo notaron mi presencia ella me miró con cara de pocos amigos, en cambio Daniel me miraba sonriente.

—Hola, subiré a la habitación así no los molesto, si necesitan algo me pueden decir— Dije mirándolos, me sentía incómoda con la mirada asesina que me daba Sook
—Claro ve y no te preocupes que no te vamos a necesitar— Sonríe descaradamente la desgraciada, ya me está empezando a hartar, se comporta como una niña mimada siendo que es una persona adulta, miré a Daniel en busca de que quizá le diga algo a su "noviecita" sin embargo, no lo hizo, me miró con cara de súplica para que no comience una pelea, decidí ignorarlos a ambos y retirarme del lugar.

Ya en la habitación, me quité la ropa para darme una ducha, cuando terminé me vestí y me acosté un rato, no tenía planes de salir ni nada por el estilo, tampoco es como si tuviera amigos para hacer algún tipo de actividad, estoy sola en el mundo, siempre fue así.
Aún estaba acostada cuando Daniel toca la puerta pidiendo permiso para entrar, él entra cuando recibe un "pase" de mi parte, cuándo lo hace se sienta en la silla que está en el escritorio, me mira como queriendo comenzar una conversación pero sus palabras no salen, lo analizo con la mirada tratando de buscar la razón de su visita, pero no encuentro nada que me revele sus intenciones al venir, pero en mi mente ronda la posibilidad de que vino aquí por su "querida" Sook.

—Hola, Amelie yo vine a hablar contigo sobre Sook— Lo sabía, era más que obvio que venía por la víbora, realmente no me interesa, de todos modos en unos días ya no estaré aquí, pero mientras tendré que soportar a esa mujer que solo me da dolor de cabeza y los pedidos de Daniel respecto a ella
—Dime, no tengas miedo con lo que vayas a decir— Dije sentándome correctamente mientras lo miraba fijamente, que le haya dicho eso al parecer le dió "ánimos" ya que comenzó a hablar fluidamente
—Sé que yo te pedí que vengas y no estoy arrepentido de eso, pero me gustaría que trates de llevarte bien con Sook, mira yo a ella la quiero mucho y me dijo que se estaba sintiendo incómoda porque no le hablas, dijo que ni siquiera intentas comunicarte con ella o formar una amistad— Terminó de hablar y la verdad, no me sorprendió nada de lo que dijo, es más, lo veía venir
—En primera yo no creo mucho en eso de la amistad y no lo haré solo porque tú o tú noviecita me lo pidan, yo tengo mis principios también— Dije, Daniel iba a decir algo pero no lo dejé— Y si es por el tema de que ella se siente incómoda, yo también me siento así, pero en cambio yo no te voy diciendo nada, además en unos días dejará de sentirse así
—¿A qué te refieres Amelie?— Frunció el seño cuándo escuchó lo que dije
—Me voy a mudar Daniel, ya no te molestaré más a tí ni a ella— Solté dejándolo con la boca abierta