❝ 𝐋𝐚 𝐯𝐢𝐝𝐚 𝐝𝐞 𝐮𝐧 𝐚𝐬𝐞𝐬𝐢𝐧𝐨 ❞

la parte más esperada ah

(si no te gusta, te lo repito, raja de acá y espera el siguiente cap)
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-Estos dos estaban sentados uno alado del otro, llegó un momento en cuando Robledo miró a la chica fijamente con su sonrisita cínica y pícara de siempre, ella estaba mirando hacia el piso sin decir nada-

-Puch: Sos linda flaquita, eh.

-la chica lo miró y sonrió moviendo su cabeza de lado a lado negando lo que había dicho. Robledo se acercó a ella y le dejó un beso en el cuello alejándose nuevamente y mirándola-

-Esta lo volvió a mirar borrandose la sonrisa de su rostro, se acercó a él lentamente y comenzó a besarlo.  Los dos se besaron por un par de segundos, era un beso raro, no era un beso normal, se separaban a pocos centímetros de sus bocas y después se volvían a besar-

-Robledo se paró junto con la chica y esta lo arrinconó contra la pared, le rodeo el cuello con sus brazos y siguió besándolo, esos carnosos y rojos labios húmedos eran los mejores que había besado en su vida-

-La miró unos segundos a los ojos y la agarró haciendo que ella rodeara su cintura con sus piernas, la recostó sobre la cama y empezó a desvestirla mientras también se sacaba su ropa, se quedó con el pantalón y la chica con la ropa interior-

-Bajó lentamente con besos por su cuello, y abdomen acariciando sus muslos, la mira a los ojos y sonríe desabrochandole los botones del pantalón-

-Puch: ¿Nerviosa?

-La chica lo miró y sonrió cerrando sus ojos y recostando su cabeza sobre el colchón viejo.
Este le bajó la ropa interior y comenzó a tocarla con sus dedos humedeciendo estos por los fluidos de la chica. Mientras tanto ella liberaba unos pequeños gemidos-

-Robledo lentamente comenzó pasar su lengua por su intimidad, cuando metió dos dedos la chica cerró sus piernas, estaba completamente roja-

-Y.. Si pasamos a otra parte?... Digo..

-Puch: Tranquila, no te voy a morder.

-Empezó a reír y separó nuevamente las piernas de la chica, siguiendo con lo anterior. Después de unos minutos, volvió a subir por su abdomen dejando besos en este y llegar a sus pechos sacando su corpiño y dejando sus pechos al aire, comenzó a besar sus pechos pasando su lengua por sus pezones y después subir hasta su boca, besando está intensamente-

-Robledo se desabrochó los pantalones bajando estos junto con su bóxer, se acercó nuevamente a la chica e introdujo su miembro dentro de ella, haciendo un leve movimiento de pelvis, dejando ver su blanco abdomen un poco formado. Cuando movía su cuerpo penetrandola, sus rulos se movían a su ritmo tapándole parte de la cara-

-Jazmin movía su cintura de la misma forma, acelerándose su respiración, mirando el cuerpo de Carlitos, se mordió el labio sonriendo-

-Puch aceleró sus movimientos haciendo que los pechos de esta rebotaran, llevo sus manos a su cintura y la apretó un poco fuerte dejando una nalgada en su trasero-

-Al mantener el ritmo rápido y brusco, logró hacer venir a la chica después de unos minutos intentándolo. Sacó su miembro de su intimidad y la miró mordiendose el labio, estaba claro lo que esperaba de ella-

-La chica lo miró a los ojos, sus rizos estaban un poco mojados por la transpiración, hacia bastante calor en ese lugar. Esta se arrodilló en la cama y comenzó a hacerle un oral-

-Robledo le recogió el cabello y sonrió, pero notaba que no tenía mucha experiencia, le gustaba. La miró a los ojos y la empujó más hacia dentro sonriendo pícaramente-

-Al venirse él también, este se tumbó en la cama recostando su cabeza arriba del abdomen de la chica. Encendió un pucho y comenzó a fumarlo mirando fijamente al techo, ya se había puesto su ropa, la chica aún seguía en ropa interior-

-Se levantó a de la cama, ella se vistió y él salió sin ningún problema del lugar dirigiéndose al auto dejando atrás a Jazmín, esta salió casi corriendo y subieron al auto-

-Puch: Esto no se lo decís a nadie, ¿Dale?

-La miró fijamente apoyando una mano en el volante encendiendo el auto, comenzó a conducir fumando e cigarrillo que había prendido en el lugar, soltaba todo el humo por la ventana. Mientras él miraba fijamente el camino, ella lo miraba disimuladamente formandose una sonrisita en su rostro, creo que ya estaba totalmente flechada-

-Llegaron a la casa de Jazmín y bajaron del auto, Puch cerró el coche y entraron a la casa los viejos ya estaban almorzando, los dos chicos se sentaron en la mesa la chica estaba algo nerviosa, todo lo que había pasado no paraba de darle vueltas en la cabeza, había tenido sexo con Robledo Puch-

-Patrón: ¿Dónde estaban?

-Puch lo miró y sonrió de lado y después miró hacia abajo respondiendo con tranquilidad a la pregunta de su jefe-

-Puch: Nada, fuimos a dar una vuelta, ella se quería despejar de todo lo que pasó tardamos porque justo nos encontramos con Ibáñez.