Veintitres.

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"Un golpe de suerte o un instante tierno
Un gesto de los tuyo' borraría el infierno"
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Kleo sintio sus piernas temblar y sus manos sudar al verlo sentado en la vereda de la heladería, con la mirada en el cielo, como replanteandose las cosas, Valentin sin dudas causaba en ella algo que nunca sintió, y tal vez eso era lo que le daba miedo y rechazo.

Se acercó hasta el músico, llamando su atención, levantándose hasta llegar a la altura de Clío.

-Viniste-sonrió ampliamente generando que la artista sonria tímidamente llevando un mechon de su cabello por detrás de su oreja-.

-Si-respondió largando todo el aire que estaba guardando-.

Se miraron fijamente, generando un ambiente incómodo.

-¿Queres un helado? Lo pago yo-soltó Valentin tambien nervioso, pensando dos veces sus palabras antes de soltarlas-.

-Si, pero no hace falta, yo pago el mío.

-No, Clío, yo lo pago-dijo frenando la mano de la chica que estaba por sacar plata de su bolsillo-.

Ambos sintieron esa corriente eléctrica que generaba cuando sus manos se juntaban.

Ella hizo una mueca nerviosa pero asintió.

-¿El mismo de siempre no? -le preguntó formando una sonrisa en sus labios, ella asintió-esperame acá, no te vayas.

-Te espero-soltó ella, generando extrañamente paz a Valentin-.

El chico entró a la heladería y Kleo se sentó en la vereda, mirando a la gente que pasaba por allí, unos jóvenes, otros niños, otros adultos y hasta ancianos, le sorprendía como los años pasaban y paso de ser una nena paseando con su familia con un helado en mano a tomar helado sola, sentada en una vereda.

Bueno, no tan sola del todo.

Suspiro profundo, preguntandose que tenía Valentin que le atraía y que lo quería tener con ella cerca, tal vez su belleza, tal vez su música, tal vez su seguridad, tal vez su compresión o consejos, tal vez su personalidad, tal vez todo.

A los minutos Valentin apareció detrás de ella con los helados, sentándose a su lado para entregarle el cono.

-Es increíble que te acordes-río ella mirándolo, pero cuando sus ojos se conectaron se sintió pequeña, chiquita ante él-.

-Por que no lo haría.

Ella levanto sus hombros, pero decidió callarse.

-¿Sabes algo? -preguntó Valentin después de ingerir un pedazo de su helado, Kleo hizo un ademán para que hablara-Era obvio que vos tenías que ganar esta tarde.

-No Valen-nego sonriente-vos ganaste bien, tus fans apoyaron tu primer pared, encima estaba re cheta.

Valentin se sintió lleno al escucharla, hace una semana no se hubiese imaginado estar hablando así con ella.

-Pero lo tuyo es arte, lo mío es solo un intento.

Kleo por más que hablara tranquilamente sentía que el ambiente seguía incómodo ¿tal vez era momento de dejar de lado el pasado? Tal vez deberia dejar de decir tal vez.

Graffiti ; WosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora