La velada estuvo agradable, hasta que fue hora de irme a casa, Hiro ofreció a llevarme pero no quise, no era tan tarde y aún debía andar gente por la calle, es sábado por Dios.
No tenía muchas cosas en que pensar, solo que nadie me asalte o algo peor, creo que debí aceptar que Hiro viniese conmigo, en fin.
Mañana les hablaré a las chicas para salir un rato, quizás a comer algo, ellas querrán ir a comprar ropa hmmm, o mejor podemos preparar hamburguesas en mi casa y ver alguna serie mala, estoy segura que a mamá no le importará.
Cerca de mi casa hay una avenida llena de clubes y bares, cosas de gente cool y popular (hacer pose cool) y adivinen a quién me encontré.
Eso fue muy rápido...y fácil.
Nadie más que Kamlyn Izumi y a otro chico, me hubiese dado lo mismo si no se hubiesen estado besando, todas sus amigas estaban ahí, algunas con chicos, otras hablando y algunas bebiendo algo.
¿Le tomo una foto? ¿Sigo mi camino? ¿Llamo a Hiro?
Nunca imaginé que fuese tan complicado, Hiro la quiere, Dios santo, ella le pone los cuernotes, no puede hacer eso...
Me hice la ciega y seguí caminando, llegué a mi casa y mis padres estaban viendo una película, mamá ya estaba dormida en el sillón y mi papá estaba preparándose un té.
-Hola corazón, ¿Cómo te fue? ¿Que comiste de rico? -me besó la frente.
-Hola papá, bien gracias, comimos alitas y otras cosas- dije un tanto desanimada.
-¿Pasó algo? ¿Ese niño te hizo algo? Si es así dímelo y te juro que...
-No te preocupes papá-rei- no me hizo nada pero... No sé que hacer.
-¿Quieres hablar de eso?
-Sí... Él tiene novia, llevan unos 5 meses juntos, es la primera que tiene, es muy feliz con ella según sé, pero hoy cuando volvía a casa la ví y pues estaba con otro muchacho, incluso la Sra.Cass también la ha visto, sé que debería decirle a Hiro pero no quisiera lastimar su felicidad, en serio lo aprecio mucho.
-Es muy fácil hija, debes decirle y ya, no le des tantas vueltas al asunto, si fuese tu novio te gustaría que te advirtieran si te fuese infiel -me abrazó- además eso le enseñará que mi hijita es mejor.
-Gracias papi- lo abracé mientras reíamos - estoy cansada así que iré a dormir, descansa.
-Buenas noches.
Me puse mi pijama y me dormí tan pronto como cerré mis ojos.
Al día siguiente les pregunté a mis papás si mis amigas podrían venir y ellos no tuvieron problema, aprovecharían y saldrían en una cita.
Alrededor de las 3 todas estábamos camino a la tienda para comprar las cosas necesarias.
-Increíble amiga, nunca me imaginé a Kamlyn haciendo eso, se ve tan ya sabes... Cara de angelito.-Dijo Anna mientras caminaba con el carrito.
-Es una perra, eso no se hace y está mal jugar con los sentimientos de ese chico-Dijo Yuji.
-Yo creo que Hiro también tiene algo de culpa, por aún no darse cuenta- Dijo Sabrina.
-Llevemos papas fritas- tome dos bolsas- Lo sé pero quién soy yo para juzgar, solo se que cuando lo vuelva a ver le diré.
-Me gustaría que se diese cuenta solo, sería genial esa escena de ella llorando pidiendo perdón o que se yo -decia Anna mientras pesaba el pan.
-Ojala se diera cuenta solo pero bueno, ya veremos dijo el ciego- reí.
Pagamos las cosas y caminamos de vuelta a mi casa, cocinamos las hamburguesas y tostamos el pan, luego de tener todo listo nos sentamos en el sillón a ver algunas películas malas de Netflix.
Luego de algunas horas todas se fueron y yo me quedé con lo peor, lavar platos.
Cómo sea, otra vez a la escuela, hoy le diré a Hiro lo que sé.
Al llegar todo normal, mis amigas estaban ahí hablando de cosas y yo en mi mundo, no ví llegar a Hiro así que me fui a clases, todo aburrido como siempre, entregué mis tareas pendientes así que un peso menos. Cuando llegó la hora del almuerzo ví a Hiro salir al patio.
-Las veo al rato lindas, disfruten su comida- me levanté y les lancé un beso.
-Suerte- dijo Sabrina.
Comencé a caminar y lo ví sentado donde siempre.
-Hola, pensé que vendrías a almorzar con nosotras- me senté a su lado.
-Lo siento, de vez en cuando hablan de cosas que no entiendo y me gusta más aquí- dijo.
-Ya veo, oye quería contarte algo que ví y debes saber... Es sobre Kamlyn, se qué no me creerás o te enojaras, no lo sé pero es importante que lo sepas porque bueno es tu novia y las novias no deberian hacerlo pero ella...
Diablos estoy divagando.
-¿Quieres contarme que Kamlyn me puso unos cuernotes?-dijo y mordió su sandwich.
-Exacto pero no debes sentirte triste porque eres una buena persona y ¿Espera ya lo sabías?
-Claro que lo sabía, era raro que me hablase porque nunca antes lo había hecho, su forma de tratarme era tan vacía, además la oí hablar con sus amigas sobre eso.
Lo dice tan naturalmente y yo sigo en shock.
-¿Porque no la terminaste ahí mismo?¿Que?
-Era una apuesta, pensaban que podrían romper mi corazoncito, así mismo lo dijeron, pero olvidaron que soy demasiado inteligente, les seguí el juego porque pensé que era divertido.
-¡Estuviste cinco malditos meses con ella! Desperdiciaste 156 días de tu vida ¿Solo por darle el gusto?
-Me gusta jugar de esa manera, pero no te preocupes ya hablé con ella y sabe que yo ya sé, pero no hay drama.
-Yo no soportaría estar cinco meses con un imbécil.
-Apenas nos veíamos, siempre estaba escondida, nunca le gusté en serio, no fue tan difícil, hasta mi tía lo notaba.
-Ayer me di cuenta, ayer la Vi con otro chico y pues me sentí mal, por ti, pensé que de verdad te gustaba.
-Es linda, pero no te sirve de nada tener una naranja hermosa y grande si por dentro está más seca que lengua de muerto.
-Eres un idiota, nunca más me preocuparé por ti- le di un ligero golpe en el hombro mientras reía.
- Me gusta que te preocupes por mí.- me sonrió.