Angel negro

Descubrimiento.

A los Uchihas siempre se los caracterizo por ser poseedores de grandes conocimientos y virtudes, entre ellas la paciencia, una virtud la cual se me fue concebida en muy pequeñas proporciones. Por lo que en esta ultima semana mi paciencia fue puesta a prueba con la llegada del cap. Hyuga a la mansión.

Todo comenzó esa misma noche de su llegada cuando al pasar cerca de las habitaciones escuche los pedidos de auxilio de la Hyuga menor desde dentro de su propio cuarto, por lo que de inmediato corri en su ayuda derribando su puerta, la imagen deba mucho que pensar, teniendo en cuenta que el Hyuga se encontraba en la cama de la menor en una situación demasiado sugerente, y el comentario lanzado por el mayor solo ocaciono el desmayo inmediato de la chica.

Prácticamente lo arrastre hasta la sala exigiéndole una explicación de lo ocurrido y solo atino a responder: -es solo un juego inocente entre primos Uchiha, solo estábamos CALENTANDO- y se fue riendo hasta el comedor.

Pasaron los días y la situación empeoro, se encerraban horas en una de sus habitaciones, saltándose en ocaciones los entrenamientos, nunca se podía encontrar a la Hyuga a solas ya que el mayor se le había pegado como si se tratara de su propia sombra, los mimos y arrumacos de parte de ambos eran empalagoso y molesto, teniendo en cuenta las novelas pervertidas narradas por Karin y Suigetsu con ambos primos de protagonistas, los relatos de anécdotas del mayor eran el constante tema de conversación en las comidas y tiempos libres con una Hyuga colorada o en otros casos desmayada.

Pero los peores días cuando Angel se le unia al Hyuga, aportando a su carácter de por si contrario a la dulce y tierna Hyuga, esta se volvia fría, calculadora, coqueta y atrevida con el, como ayer en la cena, cuando durante el postre el mayor tomo a la menor de la cintura y la hizo sentar en su regazo relatando que siempre solian leer cuentos en esa posición de pequeños, mientras la apretaba fuertemente a su pecho y le suzurraba algo al oído, en eso Angel apareció en escena dándose vuelta y sentándose con sus piernas a cada lado de cuerpo y lo abrazo muy sugerentemente del cuello diciendo demasiado sensualmente a su oído, pero lo suficientemente fuerte para que todos en la mesa escuchen: - no seas chismoso Neji-nii, pero que tal si subimos y me lees a mi en vez de un cuento?

El silencio reino en el comedor hasta que las risas de ambos primos resonaron y se retiraron con ella en brazos de el estilo princesa diciendo: - ya la escucharon, debo cumplir las exigencias de Angel-sama, asi que si nos disculpan nos retiramos.

En ese momento sentí la sangre hervir y opte por hacer lo que mejor puedo hacer, entrenar para calmar mis nervios.

Y aquí me encuentro ahora con la respiración entrecortada, empapado en sudor y con cada uno de mis musculos pidiendo un descanso, miro al cielo y por la oscuridad calculo que son aproximadamente las 2:30 de la mañana. Había corrido, saltado, practicado esgrima y algo de lucha, pero nada era suficiente, aun sentia una gran molestia dentro mio y no entendía a que se debía exactamente, pero sabia que era por causa del maldito Hyuga que vino a romper con el perfecto equilibrio dentro de mi equipó.

Tome mi botellón de agua y trate de recuperar algo de energía, mire un rato mas el cielo deteniendo la vista en la luna, tan igual y distinta a ella pence, mostrando un rostro limpio de marcas y ocultando su lado oscuro y lastimado, tan cercana a la vista y lejana en realidad. Tan bella e hipnotizante con Hinata.

Detuve mis pensamientos en ese instante, desde cuando tenias esos pensamientos con respecto a ella? desde cuando pensaba asi de alguien? Desde cuando era Hinata y no Hyuga?

Solte un bufido y decidi dar por terminada mi noche caminando a mi habitación, pero cuando estaba por cerrar mi puerta la vi, estaba con un diminuto camisón de dos piezas violeta corto y sus cabellos sueltos caminando por los pasillos, guarde silencio esperando ver a donde se diriguia y mi pecho dolio al ver su destino.

Se escucho unos suaves golpes apenas audible hechos por ella y segundos mas tarde la puerta se abrio dejando a la vista el torso blanco, marcado y libre de toda prenda del Hyuga, quien apenas la vio le sonrrio dulcemente, cosa que creía imposible hasta entonces, abrió lo suficiente la puerta y le extendió una mano, a lo que ella solo atino a saltar a sus brazos enterrando su rostro en su pecho mientras que el la encerraba entre sus brazos. El miro unos segundos a mi dirección y sonrrio con superioridad y entro en la habitación sin soltarla para luego cerrar la puerta.

Lo entendí de inmediato, el sabia que yo estaba hay mirando toda escena, mis puños se cerraron con fuerza y camine a mi baño entrando de inmediato bajo el agua fría. Mi enojo no mejoraba, mas bien empeoraba a cada segundo y mi sangre hervía por ello, mi mente vago por los recuerdos de todo lo vivido desde la llegada de la Hyuga y en cuenta de la verdad de todo me pasaba.

- Me había enamorado de quien no debía ni quería, me había enamorado de la Hyuga, de la heredera de la dulce Hinata y la fría Angel, de mi dulcemente frio ANGEL NEGRO

- Y los UCHIHAS NO COMPARTE NADA, asi que preparate para la guerra Neji Hyuga.