First Love - Fanfic Yaoi

First Love - Cap 8

Otro dia más, un dia como cualquier otro a pensar de la tristeza que Horacio estaba consumiendo.
Ambos despertaron una hora antes de el horario laboral, Ya que debian conversar.
Prepararon sus desayunos y se sentaron el la mesa.
-¿como amaneciste?- Preguntó Gustabo mirando fijamente a Horacio mientras tomaba un sorbo de su café.
-bien, pero...de la nada...aquellas palabras de Volkof vienen a mi mente.- Horacio baja mirada.

-Tranquilo, estas cosas pasan. Sabes que con el tiempo ese dolor desaparecerá, y ya no te dolerá más.- Gustabo le sonríe humildemente. -Por cierto, ¿hoy me acompañarás a trabajar?-

-Lo dudo...- responde con tristeza.

-Vamos, no te quedarás de por vida en la cama, ¿o si?-

-um, Vale Vale. Iré...pero ignoraré a Volkof.-

Gustabo sonríe y ambos siguen tomando su desayuno.
Al llegar la hora, fueron a pie a comisaria, Y al llegar a sus puertas ambos tuvieron recuerdos: Gustabo recordó su secreto con Conway, y Horacio recordó las palabras de Volkof, a lo que le dió verguenza entrar allí, al igual que a Gustabo.
Ambos fueron lentamente hacia adentro para hablar con algún comisario y poder subir al despacho de Conway.
Se acercaron a Torrente, pero este no podia, estaba en camino a algo urgente. Tampoco los demas, al parecer iban a hacer algo muy importante que nadie le queria llevar con Conway.
Solo habia una y la ultima opcion, Volkof.
Horacio se quedó atras de Gustabo y este habló.
-¿Nos abrirías las puertas para ir con Conway?-

-Vale...- respondió Volkof y luego miró a Horacio quién aún estaba escondido detrás de Gustabo. Este se sintió bien al que le ignorara.

Subieron los 3 y Volkof se alejó de allí, mientras Gustabo y Horacio entraban al despacho del Superintendente. Pero esta vez, Gustabo detras de Horacio.
Entrarón y se sentaron, como siempre.
-Os quiero comentar algo.- Dice Conway acercandose lentamente a ellos. -Dejad de hacer el Capullo, por favor. En este momento una mafia esta merodeando por esta ciudad, asi que tened cuidado, no quiero que os maten...- Este se avergüenza un poco. -Debeís madurar, porque si siguen haciendo el Capullo os matarán. Asi de simple.-
Ellos asienten a eso, aunque, todos sabemos que no va a suceder.
-Vale, ya podeís ir a trabajar.- dijo mientras se iba a sentar en su asiento.
Gustabo no queria hablar, se sentía timido, y Horacio estaba preocupado pensando en que cojones iba a pasar entre Volkof y él.
Ambos se marcharon de Allí, subieron al coche patrulla y fueron al Gimnasio de la playa a por comida y agua. Las comprarón se quedarón unos momentos allí, mirando al cielo.

-Te noto muy terco- dice Horacio para luego mirar a Gustabo.
Este se pone nervioso y lo niega, aunque admite que se siente perseguido. A lo que horacio dice lo mismo.
Una vez terminaron de decir eso miraron a su alrededor y no habia nadie, asi que se marcharon de allí.

Llegó la noche y volvieron a comisaria, dejaron el vehículo estacionado y subieron con el intendente. Conversaron un tiempo, pero No se sentaron ya que se debian ir a sus hogares.
Y al terminar de conversar ambos se despidieron de Conway, pero este habló.

-Gustabo, quedate conmigo, debo hablar contigo. Horacio, pirate.- dijo con un poco de verguenza, ya que él sabia lo que iba a ocurrir, obviamente si le daba el momento ideal para hacer lo que tenia planeado.

Horacio se despidió y se marchó de allí, dejando a Gustabo y a Conway a solas.

-¿Qué necesita?- preguntó Gustavo timidamente

-Acercate- dice con voz mas grave, pero sexy a la vez.

Gustabo lo hace, quedando cara a cara con él, pero estaba lejos aún. Asi que Conway agarra su cintura y lo atrae hacia él, dejando solo unos sentimetros de distancia.
Ambos sentian sus respiraciones chocar, sus corazones latían muy fuerte.
El espacio y el tiempo se acorta...y...
Sus labios ya puedieron chocarse. Un beso cálido, tierno y bello hizo que ambos se sonrrojaran y profundizaran el beso, como si no hubiera un mañana. Sus lenguas comenzaban a chocarse y frotarse dulcemente. Sus salivas eran compartidas y les gustaba, porque sino ya hubieran parado de hacerlo, pero no, seguían besandose. Sus mejillas estaban cada vez mas rojos y la felicidad aumentaba cada vez más. Pero...de pronto alguien entra por la puerta y solo pregunta...

- ¡¿Qué cojones está pasando aquí?!

《To be continue...》

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Yo se que todos nos morimos al leer eso, incluso a mi me agarró un ataque de epilepsia cuando lo escribía jajaj.

Espero que les haya gustado ♡