La dragon slayer del sol (temporada 2)

11.

Recuerdos recuperados

Maratón 1/3

— Yo soy..... END — repitió con sus ojos abiertos cómo platos el peli rosa.

Se había quedado totalmente en shock. Él era el demonio más peligroso y poderoso de los libros de Zeref. Sonaba casi cómo una mala broma cruel.

¿¡Cómo era eso si quiera posible!?

Si alguien lo descubría que pasaría, y ¿Por qué su padre nunca le había contado nada?

Todo era demasiado confuso para el pobre Natsu el cual sentí su cabeza explotar y su corazón doler al recordar su pasado y el doloroso final que tuvieron el y sus padres.

Y en ese momento recordó cómo en Tartaros el libro que protegía Lucy justo antes de que el llegara a evitar que Zeref la matara por el libro. Pero en el libro ponía la palabra END.

¿Ese libro tenía algo que ver con él?

¿Por eso Zeref quería el libro?

Mientras ese tipo de preguntas inundaban la mente del pobre Dragneel el escenario a su alrededor volvió a cambiar por un bosque.

Natsu rápidamente alzó su vista para ver que ocurría. Debía sonar cómo un masoquista al querer recordar aquellas partes de su pasado que hasta ese momento tan solo le dolía aún más.

Y la sorpresa que se llevó al ver a su padre Igneel en frente de Zeref no tenía igual ¿Ambos se conocían?

— ¿Que tal está Natsu? — preguntó el peli negro manteniendo una distancia con el dragón.

Eso era más que otra cosa para evitar que el dragón sufriera por la maldición causando la muerte de éste.

— Está bien. Pero sigo sin comprender por qué no quieres que le diga la verdad a Natsu, el merece saber de su pasado — afirmó el dragón girando su cabeza para ver detrás suyo donde se podía ver a un niño peli rosa tratar de usar magia.

— Quiero que Natsu tenga una infancia normal. No quiero que toda su vida tan solo se centre en matarme. Quiero que pueda disfrutar de su vida — explicó el peli negro juntando sus manos detrás de su espalda. Bajó su cabeza mientras entre cerraba sus ojos con algo de melancolía.

— hermano — dijo con melancolía el peli rosa secando las lágrimas.

Y de nuevo la escena volvió a cambiar por una especie de ¿salón escolar antiguo?

Vale, eso ya comenzaba a ser raro.

— Vamos chicos — dijo la voz de la rubia similar a la Lucy la cual entraba dentro de el salón con una serie de libros sujetos contra su pecho.

— Ouh, vamos Anna-sensei, déjenos jugar un poco más — pidió una voz algo más infantil.

Natsu giró a ver y para su sorpresa se encontró con los dragon slayers de primera y segunda generación pero cuando eran niños.

— ¿Nos conociamos de antes? — dijo con asombro el peli rosa observando cómo todos los niños se sentaban en las sillas de los pupitres.

Bueno, todos menos uno.

— ¡Yo no quiero dar clases! — se quejó el pequeño Natsu inflando sus mejillas haciendo un puchero infantil muy tierno la verdad.

Por primera vez Natsu, el Natsu actual rió, le recordaba a cómo era él cuando Erza le daba clases un poco más mayor. Y puede que sí le dieran clases ahora, él reaccionaría igual. Quejándose y negándose.