Narra Hai.
Sentía mucho, demasiado calor, pero estaba tan concentrado que antes quería acabar. ¡Por fin tenía lista la cena especial para Ethan y yo! ¡Era el gran día de que viniese a vivir conmigo y no paraba de la emoción!
Había dedicado muchas horas preparando todo, al estilo italiano, decidí cocinar pizzas caseras y todas esas cosas, pero como plato principal esos gigantes tazones de pasta con queso fundido que brotaban casi fuera del recipiente, se veían deliciosos, no podía esperar ni un segundo más.
Apagué la estufa y abrí la cocina esperando que la temperatura bajara un poco, mientras, ponía la mesa y acomodaba cada detalle... En ese lapso, llamaron a la puerta, con ese inconfundible toquido sabía que era él; abrí nervioso y luego mi novio al otro lado se abalanzó para darme un gran beso, lo abracé mucho y luego entro con su última maleta que le quedaba, ahora estaba completamente instalado en mi apartamento.
- ¿Y qué es eso tan delicioso que huelo en el aire? – Mencionó Ethan animado por su mudanza. – Con solo entrar aquí ya me ha dado hambre.
- ¡Me alegro mucho, porque es la comida para hoy, tiene tanto esfuerzo, que espero que la disfrutes en verdad! – Alardeó Hai.
- ¿Todo lo preparaste tú solo? Creo que debo comprobar si has mejorado en esto de la cocina.
- Con mucho gusto podrás hacerlo, siéntate y en seguida te sirvo.
En lo que tomaba los platos, Ethan me contaba que ese día se lo dieron libre, por eso aprovechó para venir aquí de una vez, pero, aunque no trabajó, los últimos preparativos lo dejaron cansado y que mejor que un buen alimento para recuperar fuerzas.
Empecé a llevar todos los platos repletos de comida, al parecer nunca acababan y mi novio se sorprendía de lo mucho que había cocinado, pero yo le contesté que para mí era una porción normal tomando en cuenta que éramos dos. La verdad, sí me pasé un poco, pero no había vuelta atrás, solo quedaba acabarla toda. Comenzamos a comer y a acabar cosa por cosa, fue difícil seguir, nos llevamos un buen rato ahí, en un punto los dos parecíamos ya muy llenos, pero tenía que animar a mi pareja a seguir más, me sentía genial haciendo eso.
- ¡Vamos Ethan! Que todavía te queda medio del último tazón de pasta, tú puedes. – Alentó Haiden.
- No puedo creer que yo me encuentre más lleno que tú ¿No se suponía que era al revés? – Le preguntó a Hai.
Simplemente me sonrojé con esa pregunta y le seguí diciendo que siguiera, continuó con los bocados hasta acabar todo. Veía su panza tan hinchada por ese alimento, yo ya no tenía mucha ropa que me quedara, así que me puse algo deportivo que se viera 'medianamente formal para la ocasión' por lo que no tenía gran molestia con mi ropa... Pero él, con su camisa blanca que ya había quedado manchada de salsa... Su estómago le apretaba mucho a esa prenda pequeña casi a su medida; los botones tensos, por poco hasta se le veía su ombligo.
Muy emocionado por la situación, le dije que lo ayudaría, desabotoné esa camisa para que no se sintiera apretado, me percaté que, aunque tenía la forma de unos cuadros aún marcados, la hinchada panza lo hacía parecer un gran gordo. Me di cuenta de que, si seguía así, su abdomen fuerte se iría en unos días y tal vez así regresara el gordo que amaba.
Él solo estaba sonrojado todo ese tiempo, pero sin duda se sentía aliviado por liberar su estómago.
- Ya me quitaste la camisa a mí, creo que lo justo es que ahora te toque a ti. – Se levantó Ethan y se acercó hacia Hai que se encontraba desprevenido...
Aquí está el nuevo capítulo que para mí ha sido de mis favoritos, espero que les haya gustado esa tensión del final jajaja, así que lean la continuación que será verdaderamente interesante, nos vemos en unos días, gracias por leer :).
ESTÁS LEYENDO
Más gordo será mejor
General FictionUn chico muy delgado descubrirá que el físico es lo menos importante cuando se siente bien con él mismo, ahora ha empezado una nueva vida en la que no hay nada que lo detenga a subir de peso ¿O sí? Esta es una historia de Feederism, Weight Gain y re...